Introducción y objetivos
El objetivo del tratamiento de los pacientes con trastorno depresivo mayor (TDM) es alcanzar la remisión. Debido a la frecuencia elevada de recaídas durante los seis meses posteriores al episodio depresivo, se recomienda continuar el tratamiento durante cuatro a nueve meses luego de lograr la resolución sintomática. No obstante, los pacientes que presentan recurrencias deberían recibir una terapia de mantenimiento más prolongada.
La desvenlafaxina es un inhibidor de la recaptación de noradrenalina y serotonina (IRNS) aprobado para el tratamiento de los pacientes con TDM. Su eficacia fue demostrada para el tratamiento agudo de los pacientes depresivos, ante la aplicación de la 17-item Hamilton Depression Rating Scale(HDRS-17). Además, el tratamiento se asoció con un buen nivel de tolerabilidad.
La utilidad de la droga a largo plazo se evaluó en un estudio en fase III efectuado a continuación del tratamiento agudo, que tuvo seis meses de duración. En este caso, la droga disminuyó el índice de recaídas en forma significativa en comparación con el placebo. Más allá de la respuesta al tratamiento, muchos pacientes presentan síntomas residuales.
En el presente estudio se evaluó la respuesta antidepresiva de los pacientes tratados con desvenlafaxina 50 mg/día, en comparación con aquellos que recibieron placebo, incluidos en un estudio de 11 meses de duración en el cual se emplearon parámetros de evaluación complementarios al índice de recaídas.
Pacientes y métodos
El estudio fue multicéntrico y en fase III e incluyó un período de detección sistemática, una etapa de tratamiento abierto y un período final de seis meses de duración. Los pacientes que respondieron al tratamiento abierto con desvenlafaxina 50 mg/día en la semana 8 de seguimiento y presentaron estabilidad clínica durante 12 semanas más de tratamiento ingresaron en el período a doble ciego. Durante este último se administró la desvenlafaxina en dosis de 50 mg/día o placebo. El tratamiento continuó hasta la finalización del estudio o la recaída depresiva.
Participaron pacientes adultos, ambulatorios, que cursaban un episodio de TDM sin características psicóticas. Los síntomas depresivos debían tener una duración mínima de 30 días y corresponderse con un puntaje mayor o igual a 20 en la HDRS-17. También se aplicaron las escalas Clinical Global Impression-Severity (CGI-S) y CGI-Improvement (CGI-I).
El criterio principal de vaoración fue el tiempo transcurrido hasta la aparición de una recaída. También se consideró el puntaje de las escalas HDRS-17, CGI-I y CGI-S y la proporción de individuos que alcanzaron la remisión. La productividad laboral y el bienestar de los pacientes fueron evaluados mediante el cuestionario Work Productivity and Activity Impairment (WPAI) y el World Health Organization 5-item Well-Being Index (WHO-5).
Resultados
En total, 548 sujetos fueron distribuidos en forma aleatorizada para recibir placebo o desvenlafaxina durante el período a doble ciego. De ellos, 162 interrumpieron el tratamiento en forma temprana debido principalmente a la falta de eficacia. La aparición de eventos adversos tuvo lugar en el 57.2% y el 54.4% de los pacientes tratados con placebo o desvenlafaxina 50 mg/día, respectivamente.
El puntaje total en la HDRS-17 mejoró durante el tratamiento abierto. Dicha mejoría se mantuvo hasta la semana 20. Durante la etapa a doble ciego se observó un aumento leve del puntaje total en la HDRS-17 en ambos grupos, aunque dicho aumento fue mayor en el grupo placebo. Luego de 26 semanas de tratamiento a doble ciego, el aumento del puntaje total en la HDRS-17 fue significativamente mayor en el grupo placebo.
El puntaje medio total de la subescala de 6 ítems de la HDRS (HDRS-6) disminuyó en la etapa de tratamiento abierto y dicha disminución se mantuvo hasta el período a doble ciego. En esta última etapa, el puntaje en la HDRS-6 no se modificó significativamente en el grupo tratado con desvenlafaxina, en tanto que aumentó en el grupo placebo. La diferencia entre ambos grupos fue estadísticamente significativa desde la semana 2 hasta la semana 26 de tratamiento a doble ciego.
La remisión fue alcanzada por el 46.8% y el 75.9% de los pacientes al finalizar el período de tratamiento abierto de ocho semanas de duración y la fase de estabilización posterior, respectivamente. Durante la fase a doble ciego, el índice de remisión disminuyó en forma significativa en el grupo placebo en comparación con el grupo tratado con desvenlafaxina.
Los resultados en la escala CGI-S mejoraron durante la etapa inicial de tratamiento y se mantuvieron durante la fase de continuación. En el período a doble ciego se observó la falta de modificación significativa de dicho puntaje en el grupo tratado con desvenlafaxina, en tanto que el grupo placebo presentó un aumento significativo del puntaje.
El 55% y el 27.7% de los pacientes presentaron un puntaje de 1 o 2 en la escala CGI-I al final de la etapa de tratamiento abierto, respectivamente. Estos puntajes indican una mejoría. Una vez concluida la fase de estabilización, dichos puntajes tuvieron lugar en el 77.5% y el 16.1% de los casos, respectivamente.
Al finalizar la etapa a doble ciego, el 78.1% de los individuos tratados con desvenlafaxina y el 57.1% de los que recibieron placebo presentaron puntajes de 1 a 4 en la escala CGI-I. En cambio, la proporción de participantes que presentaron un puntaje de 5 a 7, coincidente con un empeoramiento clínico, fue mayor en el grupo placebo.
La fase de tratamiento abierto se asoció con una mejora de los diferentes dominios del cuestionario WPAI. Esta mejora también tuvo lugar durante la etapa de estabilización, en tanto que en la fase a doble ciego se observaron ventajas significativas para la desvenlafaxina, en comparación con el placebo, al evaluar el puntaje del cuestionario. La aplicación en el WHO-5 arrojó resultados similares a los obtenidos ante la aplicación del cuestionario WPAI.
Discusión
De acuerdo con los resultados obtenidos, los pacientes adultos y ambulatorios con depresión mayor que responden al tratamiento agudo con 50 mg/día de desvenlafaxina pueden mantener dicha eficacia durante un período de seis meses. La droga incrementó el tiempo transcurrido hasta las recaídas y disminuyó significativamente el riesgo de recaídas en comparación con el placebo. La eficacia de la desvenlafaxina durante la etapa abierta de tratamiento agudo fue notoria al considerar los índices de remisión.
Los resultados obtenidos coinciden con lo hallado en estudios sobre el uso de otros IRNS como la duloxetina y la venlafaxina.
El efecto de la desvenlafaxina pudo apreciarse al analizar la disminución de los síntomas depresivos y el desempeño laboral y cotidiano de los pacientes. Esto es importante si se tiene en cuenta que uno de los objetivos del tratamiento de las personas con depresión es recuperar el nivel habitual de desempeño. Es necesario contar con estudios adicionales que permitan conocer los efectos de la desvenlafaxina sobre el desempeño a largo plazo de los pacientes con depresión mayor.
Entre las limitaciones del presente estudio, los autores destacan que la aplicación de criterios de exclusión no permite generalizar los resultados a toda la población de pacientes con depresión mayor. En segundo lugar, la respuesta al tratamiento a doble ciego sólo se evaluó en enfermos que habían respondido al tratamiento agudo. Finalmente, no se evaluó la eficacia de la droga durante un período mayor de un año de seguimiento.
Conclusión
La continuidad del tratamiento con desvenlafaxina 50 mg/día luego de obtener la respuesta aguda se asoció con eficacia terapéutica durante un período adicional de seis meses de seguimiento. Dicha eficacia tuvo lugar tanto en términos de mejoría sintomática como de mejoría del desempeño general. En cambio, la administración de placebo luego del período de tratamiento agudo se asoció con el empeoramiento sintomático.
SIIC