Tratamiento de la depresión

Escitalopram normaliza el procesamiento autorreferencial

El escitalopram mejora la regulación del procesamiento autorreferencial y favorece la orientación de la atención hacia los estímulos externos, además de potenciar el procesamiento de información con valencia positiva en pacientes con depresión

Autor/a: Komulainen E, Heikkilä R, Ekelund J y colaboradores

Fuente: J Affect Disord. 2018 Aug 15;236:222-229

Introducción y objetivos

La depresión se asocia con un sesgo del procesamiento de la información que se traduce en pensamientos negativos y contribuye con el mantenimiento de la enfermedad. A esto se suma el aumento de la rumiación y las dificultades para apreciar los estímulos externos.

Este autoenfoque se asocia con emociones negativas como la culpa y la disminución de la autoestima. A su vez, el afecto negativo incrementa la autorreferencia y, como consecuencia, el riesgo de síntomas depresivos futuros.

El tratamiento con antidepresivos puede afectar el procesamiento emocional al potenciar la información positiva desde las primeras etapas de administración. Este cambio se observa antes del efecto antidepresivo y predice la respuesta al tratamiento. En consecuencia, la alteración del procesamiento emocional es un mecanismo clave de la acción antidepresiva.

Las estructuras cerebrales implicadas en el procesamiento autorreferencial se ubican en la línea media cortical e incluyen la corteza prefrontal medial, la corteza cingulada anterior y posterior, y el precuño. Las cortezas prefrontal medial y cingulada anterior se encuentran interconectadas con estructuras límbicas, subcorticales y corticales laterales.

Su actividad se vincula con las vías neurales implicadas en la aparición de depresión. De hecho, el autoenfoque observado en pacientes depresivos se asoció con un aumento de la actividad de ambas regiones. Hasta el momento, se desconoce la función de los antidepresivos en términos de procesamiento autorreferencial en las estructuras de la línea media cortical en pacientes con depresión.

El presente estudio se llevó a cabo con el objetivo de evaluar el efecto del tratamiento con escitalopram durante una semana en pacientes con trastorno depresivo mayor (TDM). Los autores analizaron la acción del fármaco en términos de modulación de las respuestas neurales a la información autorreferencial. 


Pacientes y métodos

El estudio fue a doble ciego, aleatorizado y controlado con placebo y se llevó a cabo en 32 pacientes adultos con TDM unipolar, de acuerdo con el resultado de la Structured Clinical Interview for DSM-IV Axis I Disorders (SCID-I).

Los pacientes debían presentar depresión leve o moderada, según el resultado obtenido en la Montgomery-Åsberg Rating Scale (MADRS), y no haber recibido antidepresivos o psicoterapia durante los 4 meses anteriores del inicio del estudio.

Se llevó a cabo una distribución aleatoria para administrar placebo o escitalopram 10 mg/día, en horario matutino, durante una semana. Luego, los participantes fueron evaluados mediante resonancia magnética funcional (RMf).

La comorbilidad con los trastornos de ansiedad fue evaluada mediante la SCID y tuvo lugar en 17 casos, sin diferencias significativas entre ambos grupos. El efecto de la depresión sobre el procesamiento autorreferencial fue investigado mediante la inclusión de un grupo de voluntarios sanos no medicados.

La gravedad de la depresión fue evaluada antes de la distribución aleatoria y luego de 7 días de seguimiento mediante la MADRS. También se aplicaron otras herramientas, como el Beck Depression Inventory (BDI-II), el Beck Anxiety Inventory (BAI) y la Perceived Social Support Scale Revised (PSSS-R).

Además, se aplicó un cuestionario diario para evaluar el estado afectivo actual. Los rasgos de la personalidad fueron evaluados mediante el NEO Five Factor Inventory (NEO-FFI).

Los pacientes fueron analizados durante la RMf mediante la exposición a diferentes palabras, 30 adjetivos positivos, 30 adjetivos negativos y 20 palabras neutras. Cada palabra se presentó durante 1 segundo, con un intervalo entre estímulos de 5000 ms a 9500 ms.

La duración total de la prueba fue de 11 minutos. Luego, se solicitó a los participantes que clasificaran las palabras como positivas o negativas al ser utilizadas en el contexto de una conversación. También se aplicó una prueba de memoria una vez finalizada la RMf. La información fue analizada mediante los programas MarsBaR y SPSS Statistics, versión 21, entre otras herramientas.


Resultados

Los grupos presentaron características similares con excepción de la edad, que fue mayor en el grupo que recibió escitalopram. En cambio, el grupo placebo presentó un nivel superior de neuroticismo y un nivel inferior de amabilidad ante la evaluación de la personalidad. El tiempo tuvo un efecto significativo sobre el resultado de la MADRS.

En cuanto al puntaje del BDI, se observó un efecto significativo del tiempo y del grupo considerado. En este caso, el grupo placebo presentó un puntaje superior en comparación con el grupo tratado con el fármaco. Los efectos adversos más frecuentes del escitalopram fueron las náuseas y otros síntomas gastrointestinales.

La evaluación del tiempo de reacción durante la prueba de clasificación emocional indicó un efecto principal para la valencia y una interacción entre el grupo y la valencia. Las diferencias entre los grupos fueron observadas ante las palabras con valencia positiva, únicamente.

El grupo tratado con escitalopram presentó una velocidad de clasificación de las palabras positivas significativamente superior, en comparación con el grupo placebo. No se registraron otras diferencias entre los grupos.

La RMf indicó una respuesta significativamente superior a nivel de la corteza prefrontal medial/corteza cingulada anterior ante la exposición a las palabras positivas, en comparación con las palabras negativas, para el grupo tratado con escitalopram en comparación con el grupo placebo.

La evaluación del cambio de señal indicó un aumento de las respuestas a las palabras positivas en el grupo que recibió escitalopram. Los pacientes con depresión presentaron una respuesta inferior frente a los individuos sanos al comparar la actividad de la corteza prefrontal medial/corteza cingulada anterior ante la exposición a las palabras positivas, en comparación con las negativas.

Los pacientes depresivos que recibieron placebo presentaron respuestas inferiores ante las palabras positivas, en tanto que los individuos sanos presentaron respuestas similares ante la exposición a las palabras positivas o negativas.

El grupo tratado con escitalopram presentó una disminución de la respuesta al procesamiento autorreferencial al evaluar las cortezas frontal y parietal medial en comparación con el grupo placebo. El análisis del cambio de señal indicó que el grupo tratado con escitalopram presentó una respuesta superior a las palabras neutrales empleadas como control.

Los autores realizaron un análisis de las regiones de interés correspondientes a la red neuronal por defecto y a la red neuronal implicada en la atención. El análisis de la mayoría de las regiones de interés indicó diferencias significativas entre los grupos, con una disminución de la respuesta en el grupo que recibió escitalopram. Este grupo también presentó una respuesta inferior al procesamiento autorreferencial positivo en comparación con el grupo placebo.

El puntaje obtenido ante la aplicación del BDI o la evaluación del neuroticismo no se correlacionó significativamente con la actividad de las regiones de interés ante la exposición a las palabras positivas o negativas en ninguno de los grupos.

Por último, los pacientes con depresión presentaron una activación inferior en la corteza prefrontal dorsomedial y en la corteza cingulada anterior ante el procesamiento autorreferencial positivo, en comparación con los individuos sanos.


Discusión

De acuerdo con los resultados obtenidos, el escitalopram disminuyó las respuestas neurales ante el procesamiento autorreferencial a nivel de la corteza medial posterior.

El escitalopram también aumentó la activación ante la exposición a las palabras positivas y dicho efecto tuvo lugar antes del efecto antidepresivo y coincidió con lo observado en el grupo de voluntarios sanos. Puede indicarse que la normalización de las respuestas neurales aberrantes ante el uso de escitalopram precede al efecto terapéutico.

Es sabido que la depresión se asocia con una disfunción de la red neuronal por defecto y del procesamiento atencional. La disminución de la capacidad para desactivar la red neuronal por defecto y la dominancia de dicha red sobre la red de procesamiento atencional se asociaron con la rumiación maladaptativa observada en pacientes con depresión.

Este desequilibrio podría favorecer la atención hacia los pensamientos y sensaciones internos a expensas de una disminución de la atención hacia el entorno.

El escitalopram modula el procesamiento autorreferencial y tiene un efecto especialmente acentuado sobre la red neuronal por defecto, clásicamente implicada en tareas con enfoque interno como el pensamiento independiente de estímulos y la memoria autobiográfica. No obstante, también se relaciona con la atención hacia el entorno en condiciones de baja demanda.

En coincidencia con lo esperado por los autores, se observó un cambio específico para la valencia en la respuesta neural al procesamiento autorreferencial a nivel de la corteza prefrontal medial y cingulada anterior. El escitalopram mejoró el procesamiento autorreferencial positivo en comparación con el procesamiento autorreferencial negativo.

Esto se tradujo en una disminución del tiempo de reacción a las palabras positivas. Puede sugerirse que el escitalopram modifica el procesamiento autorreferencial mediante la modulación de la evaluación de los eventos autorreferenciales y el otorgamiento de un contenido emocional. En última instancia, estos cambios resultarían en la modificación de la autopercepción y en la normalización del sesgo negativo asociado con la depresión.  


Conclusión

El tratamiento con escitalopram se asoció con una disminución de la respuesta de las regiones corticales mediales posteriores ante el procesamiento autorreferencial, en comparación con lo observado en condiciones neutrales.

La administración del fármaco también aumentó la respuesta de la corteza prefrontal medial y cingulada anterior ante el procesamiento autorreferencial.

Dicho efecto tuvo lugar antes de observarse un cambio de los síntomas depresivos. En consecuencia, sería el resultado directo de la administración del fármaco y no de la mejoría de los síntomas.

Puede indicarse que el escitalopram mejora la regulación del procesamiento autorreferencial y favorece la orientación de la atención hacia los estímulos externos, además de potenciar el procesamiento de información con valencia positiva.

Como consecuencia, se observaría una normalización del sesgo negativo generado por la depresión.

SIIC- Sociedad Iberoamericana de Información Científica