Obesidad abdominal se vincula con arterosclerosis coronaria

La cintura podría predecir mejor la enfermedad cardiaca que el peso

Un estudio encuentra que los pacientes de diabetes con "forma de manzana" tenían más probabilidades de deterioro cardiaco

Fuente: MedlinePlus

Cuando se trata de la salud del corazón, una nueva investigación amplía el argumento de que un cuerpo en forma de pera, que es amplio en las caderas, podría ser mejor que un cuerpo en forma de manzana, que lleva más peso en la cintura.

Un estudio de pacientes con diabetes encontró que un tamaño creciente en la cintura parece ser un factor de predicción más potente de una enfermedad cardiaca grave que el peso corporal o el índice de masa corporal (el IMC, una proporción entre el peso y la estatura).

"Sabíamos que la obesidad abdominal se vincula más con la arterosclerosis coronaria [una acumulación de placa en las arterias] que otras formas de obesidad", dijo el Dr. Brent Muhlestein, uno de los autores del estudio y codirector de investigación del Instituto Cardiaco del Centro Médico Intermontañas de Salt Lake City.

"Encontramos que la función del ventrículo izquierdo del corazón empeoraba con una circunferencia creciente en la cintura. La relación entre la función del ventrículo izquierdo y la circunferencia de la cintura siguió siendo significativamente alta incluso tras tener en cuenta el peso corporal", afirmó Muhlestein.

El ventrículo izquierdo es la principal cámara de bombeo del corazón, y una función ventricular anómala es una causa común de enfermedad cardiaca, incluyendo la insuficiencia cardiaca congestiva, anotaron los autores del estudio.

Muhlestein añadió que reducir el tamaño de la cintura podría reducir los riesgos.

Para esta investigación, los científicos midieron la circunferencia de la cintura, el peso corporal total y el IMC de 200 hombres y mujeres con diabetes tipo 1 o tipo 2. La diabetes puede aumentar los riesgos cardiacos, pero los pacientes no comenzaron el estudio con ningún síntoma de enfermedad cardiaca.

Los investigadores evaluaron la función cardiaca de los participantes del estudio mediante una ecocardiografía, un tipo de ultrasonido. Anotaron que la función ventricular izquierda empeoró progresivamente a medida que las cinturas aumentaron, y el declive cardiaco al final se niveló con una cintura de 45 pulgadas (114 centímetros).

Los autores del estudio anotaron que el vínculo entre la circunferencia en la cintura y la reducción en la función cardiaca fue independiente del peso corporal total y el IMC.

La Dra. Sarah Samaan, cardióloga y socia médica del Hospital Cardiaco de Baylor en Plano, Texas, dijo que estos resultados respaldan a investigaciones anteriores que han indicado que la grasa en el área abdominal es mucho más riesgosa que en otros lugares del cuerpo.

"La grasa abdominal produce una amplia variedad de sustancias inflamatorias, y se correlaciona más con la enfermedad cardiaca, la hipertensión y la diabetes que otros tipos de grasa", comentó Samaan, que no participó en el estudio. "Sabemos que las personas más gordas son más propensas a tener corazones más rígidos, lo que a su vez puede predisponer a la insuficiencia cardiaca. Este estudio nos muestra que la grasa en el área abdominal es particularmente dañina para la función cardiaca".

Cuando se compararon con los hombres, las mujeres del estudio tenían en general una mejor función cardiaca en cada nivel creciente de obesidad abdominal. "En general, la obesidad abdominal tuvo un mayor efecto adverso en los hombres que en las mujeres", dijo Muhlestein.

Apuntó que se aconseja a las mujeres mantener una cintura de unas 34 pulgadas (86 centímetros) o menos, mientras que los hombres deben intentar mantener una cintura de 40 pulgadas (casi 102 centímetros) o menos.

Investigaciones anteriores del mismo equipo de científicos en el Instituto Cardiaco del Centro Médico Intermontañas y en el Hospital de Johns Hopkins en Baltimore mostraron que mientras más alto es el IMC, mayor es el riesgo de enfermedad cardiaca.

El ejercicio y la dieta siguen siendo los pilares del tratamiento de todas las personas obesas, incluyendo las que tienen forma de manzana, señaló Muhlestein. "Pero este estudio enfatiza que los que tenemos forma de manzana quizá debamos motivarnos aun más para reducir todos nuestros factores de riesgos cardiovasculares, incluyendo la circunferencia de la cintura", dijo.

Samaan añadió que el ejercicio aeróbico es el mejor tipo de ejercicio para quemar grasa del vientre.

"Aunque los abdominales podrían fortalecer esos músculos, no necesariamente queman grasa del vientre", dijo. "Además, los fumadores tienden a tener más grasa abdominal, aunque su peso corporal total sea normal, así que dejar de fumar podría ayudar".

El estudio fue presentado el sábado en la reunión anual del Colegio Americano de Cardiología (American College of Cardiology), en Chicago. Los datos y conclusiones presentados en reuniones por lo general se consideran preliminares hasta que se publiquen en una revista médica revisada por profesionales.


FUENTES: J. Brent Muhlestein, M.D., professor, medicine, University of Utah, and co-director, research, Intermountain Medical Center Heart Institute, Salt Lake City; Sarah Samaan, M.D., cardiologist and physician partner, Heart Hospital at Baylor, Plano, Texas; abstract for presentation, April 2, 2016, American College of Cardiology Scientific Session, Chicago