Supervivencia más larga con bajas dosis

Aspirina y cáncer colon

Un estudio encontró el mayor beneficio entre los que tomaban el fármaco antes del diagnóstico de cáncer

Fuente: MedlinePlus

Los pacientes de cáncer de colon que toman aspirina en dosis baja podrían tener unas probabilidades algo más altas de sobrevivir a la enfermedad, insinúa un estudio a gran escala.

Unos investigadores noruegos encontraron que, entre más de 23,000 pacientes de cáncer de colon, los que tomaban aspirina tenían un 15 por ciento menos de probabilidades de morir de la enfermedad en el transcurso de varios años.

Pero esos hallazgos, por sí solos, no prueban que la aspirina prolongue las vidas de los pacientes de cáncer de colon. Podría haber otros motivos de que los usuarios de aspirina tuvieran unas mejores probabilidades de sobrevivir, según el investigador líder, el Dr. Kjetil Tasken, profesor de medicina de la Universidad de Oslo, en Noruega.

Aún así, dijo, hay muchas evidencias de que la aspirina en dosis baja puede ayudar a reducir el riesgo de las personas de desarrollar cáncer de colon en primer lugar.

De hecho, unas recomendaciones del Grupo de Trabajo de Servicios Preventivos de EE. UU. señalan que los adultos de entre 50 y 69 años de edad quizá deban pensar en tomar una aspirina de dosis baja para reducir su riesgo de cáncer de colon (así como también de enfermedad cardiaca y accidente cerebrovascular).

Tasken explicó que lo que no está claro es si las personas que ya tienen la enfermedad pueden beneficiarse al añadir aspirina al tratamiento estándar.

Según los hallazgos actuales, "vale mucho la pena explorar" esa posibilidad, planteó Tasken. Pero enfatizó que se necesitan ensayos clínicos en que los investigadores evalúen directamente la aspirina como tratamiento contra el cáncer de colon para saberlo con certeza.

Esos ensayos ya se están realizando, y Tasken comentó que los pacientes deben esperar los resultados antes de recurrir a la aspirina de forma independiente. La aspirina conlleva riesgos, que incluyen sangrado en el estómago o el cerebro, según el estudio.

Los hallazgos se basan en los expedientes de más de 23,000 adultos noruegos. Todos fueron diagnosticados con cáncer de colon entre 2004 y 2011. A más de una cuarta parte les recetaron una aspirina diaria de dosis baja durante más de seis meses tras el diagnóstico. Y la mayoría también tomaban aspirina antes del diagnóstico.

En Noruega, la aspirina de dosis baja solo está disponible con receta, en dosis de 75 o 160 miligramos (mg) al día. Generalmente se receta para reducir los riesgos de enfermedad cardiaca y accidente cerebrovascular, dijo Tasken.

En general, halló el estudio, el 66 por ciento de los usuarios de aspirina seguían con vida tras unos tres años. Esto es en comparación con un 58 por ciento de los no usuarios, encontró el estudio.

Los investigadores intentaron tomar en cuenta otras explicaciones, como la edad, la gravedad del cáncer y si los pacientes tomaban otros fármacos para proteger el corazón.

Aún así, el beneficio de supervivencia de los usuarios de aspirina persistió.

Cuando los investigadores profundizaron, el beneficio se concentró en los pacientes que tomaban aspirina antes del diagnóstico: tenían un 23 por ciento menos de probabilidades de morir de cáncer de colon, y un 14 por ciento menos de probabilidades de morir por cualquier causa, que los pacientes que no usaban aspirina en lo absoluto.

Un experto que no participó en el estudio dijo que plantea una "pregunta científica interesante". ¿Los usuarios de aspirina tienden a desarrollar cánceres de colon menos agresivos, y por qué?

Pero los resultados "no necesariamente significan que las personas con cáncer colorrectal se beneficien de tomar aspirina", dijo Eric Jacobs, director estratégico de farmacoepidemiología de la Sociedad Americana Contra El Cáncer (American Cancer Society, ACS).

Es "biológicamente plausible" que la aspirina pueda ayudar a tratar ciertos tipos de cáncer, basándose en la investigación realizada en el laboratorio, apuntó Jacobs.

La aspirina inhibe unas células sanguíneas llamadas plaquetas, explicó, y hay evidencias de que unas plaquetas "activadas" pueden fomentar que los tumores crezcan y se propaguen.

Pero Jacobs se mostró de acuerdo en que todo el mundo debe esperar a que los ensayos clínicos en curso terminen. "Esos ensayos deberían ofrecer unas respuestas más claras en unos años", dijo.

Por ahora, Jacobs aconsejó a las personas que se preguntan si deben tomar aspirina en dosis baja que "hablen con un proveedor de atención sanitaria que pueda ayudarles a sopesar los beneficios contra los riesgos".

También enfatizó la importancia de las pruebas de detección del cáncer de colon para ayudar a prevenir la enfermedad o a detectarla pronto.

"Independientemente de si una persona toma aspirina o no, una de las mejores defensas contra desarrollar cáncer colorrectal es realizar una prueba de detección", afirmó Jacobs.

Las personas con un riesgo promedio de cáncer de colon deben comenzar a hacerse las pruebas de detección a los 50 años, según la ACS. Algunas pruebas, como la colonoscopia, pueden prevenir el cáncer de colon al permitir a los médicos encontrar y extirpar unos tumores precancerosos llamados pólipos.

El estudio aparece en la revista Journal of Clinical Oncology.


FUENTES: Kjetil Tasken, M.D., Ph.D., professor, medicine, University of Oslo, Norway; Eric Jacobs, Ph.D., strategic director, pharmacoepidemiology, American Cancer Society, Atlanta; May 31, 2016, Journal of Clinical Oncology