Introducción

El juego es esencial para el desarrollo óptimo del niño porque contribuye al bienestar cognitivo, físico, social y emocional de los niños y jóvenes. También ofrece una oportunidad ideal y significativa para que los padres y otros cuidadores se involucren completamente con los niños utilizando juguetes como un instrumento de juego e interacción.

La evolución de las percepciones sociales de los juegos desde los juguetes de los niños hasta los facilitadores críticos del desarrollo temprano del cerebro en el niño han desafiado a los cuidadores a decidir qué juguetes son los más apropiados para sus hijos.

Este informe clínico se esfuerza por proporcionar a los proveedores de atención médica pediátrica información basada en evidencia que pueda usarse para ayudar a los cuidadores a elegir juguetes para sus hijos.

El informe destaca la definición amplia de un juguete; consideración de los posibles beneficios y posibles efectos dañinos de las opciones de juguetes en el desarrollo infantil; y la promoción de cuidados y desarrollo positivos cuando se usan juguetes para involucrar a los cuidadores en interacciones basadas en el juego con sus hijos que son ricas en lenguaje, simulación, resolución de problemas y creatividad.

El informe apunta a abordar la evolución de la sustitución de los juguetes más tradicionales con “juguetes” virtuales basados en medios digitales y la falta de evidencia de beneficios similares en el desarrollo infantil.

Además, este informe aborda brevemente el papel de los juguetes en la publicidad y / o los programas de incentivos y tiene como objetivo crear conciencia sobre los riesgos de seguridad y salud asociados con la disponibilidad y accesibilidad de los juguetes en entornos públicos, incluidos algunos entornos de atención médica.

Los últimos 20 años han traído un cambio en la percepción de los juguetes por parte de los padres y la sociedad, y es más probable que los padres y otros cuidadores consideren que los juguetes son importantes para el desarrollo, la autorregulación y el funcionamiento ejecutivo de los niños.^{1, 2}

Varios factores subyacentes interrelacionados han contribuido a este cambio, que incluye:

(1) Un mayor reconocimiento del desarrollo temprano del cerebro y del niño como crítico para el éxito educativo.

(2) Un mayor reconocimiento de las experiencias tempranas en el hogar y en entornos de cuidado infantil que facilitan el desarrollo temprano del cerebro y el niño‍.³

(3) Mayor comercialización de los llamados "juguetes educativos", que son críticos para mejorar experiencias tempranas.

(4) La percepción (quizás una percepción errónea) del juego con juguetes en lugar de la interacción con los cuidadores en torno a los juguetes como algo importante para el desarrollo del niño, incluida la autorregulación.³

(5) El aumento de la sofisticación de los "juguetes" virtuales basados ??en medios digitales que reemplazan a los juguetes físicos y, a menudo, los cuidadores perciben incorrectamente que tienen un beneficio educativo.^{4, 5}

Aunque los juguetes de alta calidad facilitan el desarrollo infantil cuando conducen a la participación de los cuidadores en interacciones basadas en el juego que son ricas en lenguaje, simulación, resolución de problemas, reciprocidad, cooperación y creatividad‍⁴ (y potencialmente para niños mayores en juegos solitarios‍¹), muchas de las afirmaciones anunciadas para juguetes no se basan en evidencia científica.

Además, hubo un creciente reconocimiento del potencial de daño en el contexto de la exposición a medios electrónicos, toxinas ambientales y peligros de seguridad.

En particular, los medios electrónicos se han asociado con el desplazamiento de las interacciones entre cuidadores y niños basados en el juego y las reducciones en las actividades cognitivas y / o del lenguaje^6–10 y motoras gruesas¹¹, con implicancias para el desarrollo infantil⁷ y los resultados de la salud ¹¹ (por ejemplo, obesidad).

Este informe clínico aborda el papel de los proveedores de atención médica pediátrica al asesorar a los cuidadores sobre los juguetes en el contexto de los cambios en las percepciones  de los cuidadores en relación a los juguetes y la evolución de lo que ahora constituye un juguete.

Complementa la política existente de la Academia Americana de Pediatría relacionada con el juego, ⁴ medios de comunicación,^{12, 13} preparación para la escuela,¹⁴ estrés tóxico, ^{15, 16} prevención de lesiones, ¹⁷ toxicología, ¹⁸ y pobreza. ⁴

En este informe, un juguete se define como un objeto (ya sea hecho, comprado, o encontrado en la naturaleza) destinado a juegos de niños.

En el desarrollo, la importancia de los juguetes es muy fuerte apoyado por un gran cuerpo de investigación que documenta el papel del juego en la promoción del desarrollo en todos los dominios (incluido el cognitivo, el lenguaje, el socioemocional y el físico).^{1, 4, 19}

Aunque el concepto de juego no ha cambiado con el tiempo, lo que constituye un juguete en el momento de este informe es sustancialmente diferente de lo que era durante el siglo anterior.²⁰

Esta diferencia es atribuible en parte a la proliferación de juguetes electrónicos, de estimulación sensorial y ligeros y plataformas basadas en medios digitales con software orientado a los niños y aplicaciones móviles^{1, 21} que los padres pueden percibir como necesarias para el progreso del desarrollo a pesar de la falta de evidencia de apoyo y, quizás lo más importante, con la posibilidad de interrumpir las interacciones entre cuidadores y niños.²²

Los juguetes tradicionales (físicos) se pueden clasificar de varias maneras: (1) Simboliza y / o simula (por ejemplo, muñecas, figuras de acción, automóviles, cocina y / o implementos de alimentación, etc); (2) motor fino, adaptativo y / o manipulador (por ejemplo, bloques, formas, rompecabezas, trenes, etc.); (3) arte (p. Ej., Arcilla y colorante); (4) lenguaje y / o conceptos (por ejemplo, juegos de cartas, cartas de juguete y juegos de mesa); y (5) motricidad gruesa y / o física (por ejemplo, carros de juguete grandes, triciclos y juguetes para empujar y jalar).

Los juguetes de alta calidad en cada una de estas categorías pueden facilitar las interacciones entre los cuidadores, el juego entre compañeros y el crecimiento de la imaginación. Cabe destacar que los juguetes de alta calidad no tienen por qué ser costosos. Por ejemplo, los bloques de juguete, además de los objetos de la casa, pueden ser interesantes para que un niño los examine y explore, especialmente si observa cómo los adultos los usan.

Durante las últimas 2 décadas, varios elementos centrales de los juguetes tradicionales se han adaptado a versiones electrónicas (virtuales), como computadoras portátiles, tabletas, teléfonos, otros dispositivos móviles y dispositivos de juegos electrónicos independientes, y juguetes que sustituyen la interacción humana (p. ej., un oso de juguete que puede leer una historia en voz alta).^2,5

En muchos casos, se han integrado con nuevos elementos que antes no estaban disponibles en los juguetes tradicionales, como juguetes estimulantes sensoriales (especialmente para bebés, para los cuales el compromiso visual intenso y las consecuencias del desarrollo neurológico no se conocen actualmente²).

Este desenfoque de la línea entre los juguetes físicos y virtuales ha complicado enormemente la toma de decisiones de los cuidadores al seleccionar juguetes, especialmente porque las aplicaciones de dispositivos móviles para niños han proliferado a un ritmo extraordinario. ^1,21

Como resultado, los proveedores de servicios de salud pediátricos tienen un rol importante al proveer orientación para la selección de juguetes y aplicaciones apropiadas.‍²¹

> Consideraciones generales

Pretendiendo a través de personajes de juguete (p. ej., muñecas, animales y figuras) y objetos de juguete asociados (p. ej., alimentos, utensilios, automóviles, aviones y edificios) puede promover el uso de palabras y narraciones para imitar, describir y enfrentar circunstancias y sentimientos reales. Este juego imaginativo en última instancia facilita el desarrollo del lenguaje, la autorregulación, el pensamiento simbólico y el desarrollo socioemocional. ²⁶

La resolución de problemas a través del juego con los "favoritos tradicionales", como los bloques y los rompecabezas, puede apoyar las habilidades motoras finas y el desarrollo del lenguaje y cognitivo y predice habilidades tanto espaciales como matemáticas tempranas.^27,28

El uso de juguetes en la actividad física (como jugar con pelotas) tiene el potencial de facilitar el desarrollo motor grueso junto con la autorregulación y la interacción entre compañeros debido a las negociaciones con respecto a las reglas que normalmente tienen lugar. Los anteriores son solo algunos ejemplos del desarrollo de habilidades asociadas del juego con juguetes.

Jugar con los cuidadores es probablemente necesario para apoyar el desarrollo de habilidades. Sin embargo, el juego solitario también puede tener un papel importante (especialmente para los niños mayores, para quienes explorar y jugar con juguetes en su propio tiempo y ritmo pueden fomentar su creatividad, investigación y habilidades de asimilación independientes¹).

Los mejores juguetes son aquellos que combinan las habilidades adquiridas y alientan aún más el desarrollo de nuevas habilidades. Los juguetes avanzados para el desarrollo también pueden ser apropiados, especialmente cuando los cuidadores montan un escenario (por ejemplo, configuran un argumento para fingir que están juntos o brindan apoyo para el aprendizaje del niño de una nueva habilidad) en su juego.

Algunos juguetes tienen la capacidad de “crecer” con el niño, en el sentido de que pueden usarse de manera diferente a medida que los niños avanzan en su desarrollo. Por ejemplo, un niño de 18 meses podría intentar usar bloques funcionalmente (por ejemplo, apilarlos), mientras que un niño de 2 años podría usar los mismos bloques para participar en juegos simbólicos sofisticados (por ejemplo, alimentando a la muñeca con un bloque que representa una botella‍¹) o use los mismos bloques para construir un puente, demostrando el desarrollo de la conciencia espacial.

En particular, los datos que respaldan la función de desarrollo de los juguetes provienen principalmente de estudios de actividades en las que los niños juegan con cuidadores³ en lugar de hacerlo solos‍^{4, 27, 29}

En particular, los juguetes que son más propensos a facilitar el desarrollo son aquellos que son más agradables y se utilizan productivamente para jugar junto con un cuidador comprometido, ya que en tales contextos, jugar con juguetes es probable que incluya experiencias de lenguaje enriquecidas, interacciones verbales recíprocas ("servir y devolver" ^15,16) y escenarios.

Los juguetes pueden desempeñar un papel especialmente importante en la promoción del aprendizaje y el descubrimiento en el "juego guiado", en el que los niños toman la iniciativa, pero los cuidadores apoyan su exploración en el contexto de los objetivos de aprendizaje. ^1,30

La idea de jugar con juguetes se enriquece con un cuidador que es consistente con los muchos estudios de la infancia temprana que documentan que el aprendizaje se lleva a cabo de manera óptima en el contexto de las conversaciones de servicio y retorno (dar y recibir) que se basan en el enfoque del niño³¹ (y son análogos a la lectura de libros compartidos).

En general, los juguetes que facilitan el juego imaginativo y la resolución de problemas tienen más probabilidades de permitir tal participación por parte de los cuidadores, mientras que los juguetes con base electrónica (ya sean tradicionales o basados ??en los medios de comunicación) tienen menos probabilidades de hacerlo.^10,32

Por lo tanto, cuando los proveedores de servicios de salud pediátricos asesoran a los padres y cuidadores, es importante enfatizar que los juguetes pueden desempeñar un papel importante pero de apoyo para mejorar el desarrollo social de un niño, además de otros dominios, como el lenguaje, principalmente mediante la participación de cuidadores en interacciones receptivas³ y juegos de simulación.

El ritmo de la vida en la sociedad actual proporciona un tiempo limitado disponible para muchos cuidadores, y el juego solitario con juguetes no debe ser un sustituto de las interacciones cuidador-niño durante el juego u otros contextos, como leer en voz alta.

Los juguetes electrónicos por sí mismos no proporcionan a los niños la interacción y el compromiso de los padres que son críticos para el desarrollo saludable.

> Adecuación de los juguetes para niños con necesidades especiales

Los niños con retrasos de desarrollo o discapacidades pueden enfrentar una variedad de dificultades u obstáculos en su juego debido a factores tales como limitaciones intelectuales o restricciones físicas. Una de las mayores dificultades es cuando el juego en sí se vuelve de naturaleza atípica.

Por ejemplo, pueden jugar con objetos repetitivamente (por ejemplo, apilar bloques de la misma manera una y otra vez pero sin construir nada per se) o no funcionalmente (por ejemplo, tocar un teléfono de juguete en el piso en lugar de hablar con él) o participar con juguetes a un nivel de desarrollo significativamente diferente al de los compañeros de una edad similar (por ejemplo, 3 niños pequeños están haciendo que sus dinosaurios de juguete se persigan unos a otros, mientras que un cuarto está de pie masticando la cola del dinosaurio de juguete).

Además, las conductas atípicas entre los niños con discapacidades pueden interrumpir las interacciones sociales además del juego en sí. Estas diferencias en las capacidades de desarrollo se exhiben en dominios,³ y, a su vez, la forma en que los niños juegan con sus juguetes puede limitar su capacidad de aprender y desarrollarse al máximo a partir de las oportunidades de juego entre padres e hijos.

La elección de juguetes puede ser especialmente compleja para los niños con necesidades especiales dado que las recomendaciones sobre el empaque generalmente se basan en la edad y no en las capacidades de desarrollo.

Por ejemplo, los cuidadores de niños con necesidades especiales tienen más probabilidades de elegir juguetes funcionales (por ejemplo, juguetes que se activan fácilmente y que a menudo responden con luces y sonidos) ³³ sobre juguetes simbólicos que fomentan el juego de simulación, la creatividad y las interacciones (por ejemplo, juguetes granja de animales).³⁴

Por lo tanto, los cuidadores de niños con necesidades especiales pueden beneficiarse de la orientación adicional de terapeutas especializados (por ejemplo, terapeutas ocupacionales o físicos) al elegir qué juguetes, actividades e interacciones son más adecuados para la edad de desarrollo de su hijo para asegurar el crecimiento continuo y el dominio de habilidades.

Las adaptaciones de los juguetes para adecuarse a una discapacidad motora, visual u otra pueden ser importantes para los niños con necesidades especiales. Esto se puede lograr combinando un acceso fácil con retroalimentación multisensorial, ³⁵ como la luz y el sonido cuando se enciende un juguete.

Los ejemplos de adaptaciones en el diseño incluyen tiras de velcro para ayudar a un niño a sostener un juguete³⁶, agregar una pieza de espuma alrededor de un marcador o pincel para hacer que el utensilio de arte sea más fácil de sostener para un niño con una incapacidad para agarrar el utensilio de forma independiente,³⁷ y el uso de un botón pulsador más grande para activar un juguete para un niño con dificultades de motricidad fina que no pueden manipular fácilmente un pequeño interruptor.‍³⁵

La tecnología ha jugado un papel particularmente importante en apoyo al uso de juguetes, y se anticipó que el papel de la tecnología para abordar las intervenciones de desarrollo aumentarán con el tiempo con la orientación de la investigación.

Al igual que con los niños con desarrollo habitual, los niños con necesidades especiales se benefician al máximo de jugar con juguetes en el contexto de la interacción del cuidador. Los juguetes pueden usarse como un modo de incentivo en el contexto de los servicios de intervención temprana y la terapia física en general. Por ejemplo, los terapeutas a menudo usan juguetes para estimular el uso de una mano no dominante colocando el juguete en ese lado del cuerpo.

Alternativamente, usar un juguete como recompensa puede ayudar a provocar verbalizaciones en un niño con una discapacidad del lenguaje. Los juguetes nuevos o preferidos se pueden colocar cerca de la cara de un adulto para fomentar el contacto visual con un niño con trastorno del espectro autista. ^{38, 39}

> Los juguetes y la promoción de la crianza de los hijos, cuidado positivo y desarrollo infantil

Hubo una amplia gama de esfuerzos científicos y basados ??en políticas para mejorar el desarrollo temprano promoviendo que los cuidadores y los niños jueguen con juguetes. Estos esfuerzos son especialmente importantes para los niños que crecen en la pobreza, para quienes existe un acceso reducido a juguetes apropiados para el desarrollo y barreras para la interacción entre cuidadores y niños.^{4, 14, 15}

Tales iniciativas complementan los programas existentes que buscan mejorar la alfabetización temprana dentro de hogares médicos pediátricos (por ejemplo, Reach Out and Read‍40). Los esfuerzos para promover el juego con juguetes se han llevado a cabo en diversas plataformas, incluyendo en (1) escuelas preescolares (por ejemplo, Herramientas de la Mente⁴¹), (2) visitas domiciliarias (por ejemplo, Programa de Hogares de Padres e Hijos y Estrategias de Juego y Aprendizaje‍⁴²), (3) salud pública (por ejemplo, Building Blocks Bl29 y Blocktivities‍⁴³), y (4) atención primaria pediátrica (por ejemplo, ProyectoVideo de Interacción‍²⁹), por nombrar algunos.

Los hallazgos de estos programas sugieren que es más probable que los juguetes faciliten los avances en el desarrollo en el contexto de las interacciones³ con los cuidadores (incluyendo escenarios y el juego guiado en lugar de como resultado del juguete en sí) ³¹, los educadores de la primera infancia y otros proveedores.⁴⁴

El conocimiento y conocimiento de los proveedores de atención médica pediátrica sobre estos programas pueden brindar orientación anticipada a los padres, brindar oportunidades para la integración dentro de la mejora médica en el hogar y funcionar como fuentes potenciales de referencia dependiendo de la disponibilidad dentro de las comunidades a las que sirven.

Además, la selección de juguetes ofrecidos a los niños debe reflejar el mundo diverso y multicultural en el que vivimos (es decir, la selección de muñecas de diferentes etnias en el área de espera del consultorio pediátrico).

Un estudio de 2013 reveló que el 38% de los niños menores de 2 años en los EE. UU. Y el 80% de los niños de 2 a 4 años‍,^{11, 46} han usado un dispositivo de medios electrónicos móviles; esto se ha más que duplicado en comparación con los datos recopilados en 2011.‍^{4, 11, 32}

Los datos más recientes presentados en 2015 sugieren que el 96,9% de los niños ha usado dispositivos móviles, y la mayoría comenzó a usarlos antes de cumplir 1 año de edad.‍⁴⁷ Para niños pequeños, el aumento en el tiempo en pantalla, que ha evolucionado durante la última década, se ha producido en asociación con una disminución en el juego, que incluye el juego activo y el juego con juguetes.‍¹¹

Esto es especialmente importante para el desarrollo de los niños pequeños porque el tiempo en pantalla interfiere directamente tanto las actividades de juego como las interacciones entre padres e hijos,⁴⁸ ??e incluso los medios educativos se ven normalmente sin los aportes de los cuidadores.^{‍11, 21, 48}

Además, los juguetes virtuales (es decir, juegos de pantalla y / o aplicaciones) están cada vez más diseñados para emular e incluso reemplazar los juguetes físicos. Esto aumenta potencialmente los riesgos conocidos de la exposición a los medios electrónicos, como la promoción del comportamiento agresivo⁴⁹ y la obesidad.⁵⁰

El potencial de estos riesgos es especialmente grande en el contexto de la violencia presentada como humorística o justificada, que puede reforzar el comportamiento agresivo y desensibilizar a los niños.

Aunque se ha sugerido que puede haber beneficios de aprendizaje en asociación con los medios interactivos, ^{46, 52, 53} actualmente no hay evidencia que sugiera que los beneficios posibles de los medios interactivos coincidan con los del juego activo, creativo, práctico y de simulación con juguetes más tradicionales.^{4, 9}

En particular, los niños necesitan usar sus manos para explorar y manipular, para fortalecer aquellas áreas del cerebro asociadas con el aprendizaje espacial y matemático.^{54, 55}

Investigaciones recientes han revelado que durante el juego de niños con juguetes electrónicos, hubo menos palabras adultas, menos giros conversacionales, menos respuestas de los padres y menos producciones de palabras específicas del contenido que durante el juego con juguetes o libros tradicionales.

Los niños mismos vocalizan menos durante el juego con juguetes electrónicos que con libros. ⁸ Las aplicaciones más nuevas para teléfonos inteligentes están enfocadas en abordar la falta de interactividad social y física; sin embargo, los estudios a largo plazo de riesgos y beneficios son necesarios para determinar su impacto real y su sostenibilidad^.‍56

Es irónico que en un momento en que los psicólogos y otros científicos del desarrollo estén reconociendo el papel del cuerpo en el aprendizaje, los juguetes para los niños sean cada vez más bidimensionales.‍⁵⁷

Se utiliza una gran cantidad de marketing tanto en los medios tradicionales como en los nuevos para alentar a los cuidadores a considerar los juguetes tecnológicamente críticos para el  desarrollo. Tal mercado ha llevado a una mayor exposición de los niños a videos de enriquecimiento, programas informáticos, libros especializados con lectura grabada por voz y juguetes de "desarrollo" a partir de la infancia temprana. ^{4, 58}

Es importante tener en cuenta que los reclamos de tales juguetes en el empaque y en gran medida, la publicidad no está demostrada‍^{59 –61} por estudios creíbles y, por lo tanto, es importante que los proveedores de atención médica pediátrica ayuden a los cuidadores a descifrar tales anuncios.

Los juguetes también se utilizan ampliamente como un mecanismo para la comercialización. Por ejemplo, hubo una tendencia en la última década de combinar el consumo de alimentos con un incentivo de juguete. Muchos restaurantes de comida rápida ofrecen un incentivo de juguetes con compras particulares de comidas (muchas de las cuales son densas en energía y pobres en nutrientes) para aumentar las ventas; se piensa que dichos incentivos han contribuido a la obesidad infantil.⁶²

Las promociones e incentivos son una consideración especialmente importante para los niños menores de 8 años, que no saben que las promociones y los anuncios están diseñados para persuadirlos de que sus cuidadores compren productos específicos.⁵⁹

Las iniciativas recientes a nivel federal (Comisión Federal de Comunicaciones y Comisión Federal de Comercio) y locales han buscado y continúan desarrollando regulaciones para guiar y reducir este contenido sugerente en los anuncios.

Un ejemplo es la ordenanza de juguetes de EE.UU. pilotada en el condado de Santa Clara, California, que prohibió la distribución de juguetes y otros incentivos a los niños junto con comidas, alimentos o bebidas que no cumplen con los criterios nutricionales mínimos.

Esta ordenanza, a su vez, influyó positivamente en la comercialización de elementos de menú saludables con el incentivo de los juguetes, y los niños solicitaron a sus padres que compraran las opciones de comidas más saludables.

El período de prueba proporcionó datos que revelan los efectos de la comercialización a través de incentivos de juguete en las elecciones de alimentos de los niños y, además, los efectos de sus solicitudes en la compra de la comida por parte de los padres.‍62 La iniciativa se expandió posteriormente a cambios similares en varias ciudades importantes de los EE. UU. (San Francisco y Nueva York).

Regulaciones gubernamentales, mejores estándares de seguridad para la fabricación y el uso de juguetes, y las pruebas de productos han hecho que la mayoría de los juguetes sean seguros cuando se usan adecuadamente para las edades y etapas de desarrollo recomendadas.

Sin embargo, solo porque un producto esté en el mercado no significa que sea seguro. En la determinación de la seguridad del juguete, las características deben ser consideradas, así como la forma de uso o abuso del juguete y la cantidad de supervisión o ayuda necesaria para un juego seguro.

En un ejemplo reciente de peligros potenciales, ingestión de objetos magnéticos de alta potencia (p. Ej., Imanes de tierras raras) y los imanes permanentes fuertes) que a veces se utilizan en juguetes dieron como resultado una importante morbilidad infantil con hemorragia gastrointestinal y muerte cuando se los ingiere.

El sitio web de la Comisión de Seguridad de Productos del Consumidor de los Estados Unidos (CPSC) (www.cpsc.gov/) contiene información sobre la seguridad de los juguetes y puede ser un recurso para proveedores de salud pediátrica y cuidadores. ^{17, 64}

Dos iniciativas de la CPSC de especial relevancia son Safer Products (www .saferproducts.gov/), que permite a cualquier persona informar inquietudes de seguridad, y los retira. El sitio web de gov (www. recalls. gov), que proporciona información sobre los retiros de seguridad.

Además de las características de seguridad física, se debe prestar mucha atención al contacto de un juguete con sustancias dañinas que pueden usarse para tratar sus materiales (por ejemplo, arsénico usado para tratar algunos productos de madera, pintura con plomo o productos químicos como el bisfenol A). La publicación Cuidando a nuestros niños, tercera edición, incluye información detallada sobre los peligros potenciales.‍⁶⁵

Los juguetes provistos en las salas de espera de los consultorios pediátricos y otros entornos médicos pueden servir como modelo para los cuidadores y, por lo tanto, ayudarles a tomar decisiones sobre los juguetes. Tales juguetes también pueden ayudar a reducir la ansiedad del niño con respecto a las visitas y procedimientos.

Sin embargo, los juguetes en entornos pediátricos también tienen el potencial de convertirse en un vehículo para transmitir virus y otros patógenos entre los niños.

Las recomendaciones claras y fáciles de seguir para el uso y la limpieza de los juguetes en el consultorio pediátrico han sido realizadas por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades y otros.‍⁶⁶ - 69

Por ejemplo, la desinfección de los juguetes se puede realizar de manera segura lavando con Jabón y agua, y luego desinfectar usando una solución recién preparada (dilución 1: 100 de lavandina doméstica; remojar por al menos 2 minutos) o usando una solución desinfectante registrada por la Agencia de Protección Ambiental (según lo indican las instrucciones del fabricante) y luego enjuague y secado al aire.^{66 - 68} Los juguetes deben limpiarse entre usos para evitar la transferencia de agentes infecciosos.‍⁶⁷

Además, a los cuidadores se les puede dar la opción de traer los propios juguetes de sus hijos para las visitas al consultorio para minimizar el intercambio y la transmisión de enfermedades infecciosas. Si bien algunos de los juguetes disponibles se comercializan como agentes antibacterianos incorporados en su construcción, es importante tener en cuenta que actualmente no se ha demostrado que dicha construcción sea "antibacteriana".⁶⁶

Puede encontrar más información sobre cómo limpiar y desinfectar los juguetes en Cuidado de nuestros niños, tercera edición.⁶⁵ Aunque las medidas adecuadas de control de infecciones pueden parecer desalentadoras, las recomendaciones tienden a ser sencillas de implementar y no deben considerarse una barrera para el uso de juguetes en el ámbito ambulatorio.

1. Se pueden ofrecer consejos sobre juguetes y / o juegos con juguetes junto con orientación en 5 áreas relacionadas: desarrollo socioemocional a través de interacciones sociales, promoción de la alfabetización, juegos de bloques y rompecabezas en relación con la ciencia y / o las habilidades matemáticas y espaciales, juegos imaginativos y creativos en relación con el juego ficticio y / o libre, y la exposición a los medios electrónicos.

2. Los proveedores de atención médica pediátrica pueden aconsejar a los padres y cuidadores sobre los juguetes que son apropiados para niños pequeños en términos de etapa de desarrollo, oportunidades de aprendizaje y seguridad. Para las familias a las que les preocupa el nivel de alfabetización de los cuidadores, el profesional puede crear folletos con fotos de juguetes de ejemplo.

3. Si hay juguetes disponibles para niños en salas de espera y de examen, se los puede ver como modelos para juguetes que son apropiados para el hogar.

4. Los proveedores de atención médica pediátrica pueden optar por brindarles a los padres información sobre juguetes apropiados para el desarrollo, que son aquellos que promueven interacciones entre cuidadores y niños, juegos de fantasía, juegos físicamente activos, resolución de problemas y creatividad. Se pueden encontrar listas de juguetes apropiados a través de muchos recursos, incluidos libros, folletos de organizaciones como Zero to Three e instrumentos para evaluar la provisión de juguetes en el hogar. Los proveedores de atención médica pediátrica también pueden recomendar libros que brinden orientación sobre cómo interactuar con los niños, incluso en el contexto del juego de juguetes para fomentar el desarrollo del lenguaje.

5. Si los proveedores de atención médica pediátrica hacen que los juguetes estén disponibles en el consultorio, pueden considerar si son seguros para todos los niños de todas las edades de acuerdo con las siguientes recomendaciones:

6. Aunque los proveedores de atención médica pediátrica pueden poner juguetes a su disposición en sus consultorios, aquellos que lo hagan deberían elegir juguetes que se limpien de manera fácil y rutinaria. Cuando sea posible, cada vez que un juguete haya estado en contacto con la saliva u otros fluidos corporales, debe desinfectarse.

7. Mostrar avisos en el consultorio sobre el retiro de juguetes es importante para informar a los padres sobre los peligros de los productos.

8. Aprovechar las oportunidades disponibles para aconsejar a los cuidadores sobre los peligros asociados con los juguetes con imán de alta potencia, así como con las pilas botón que se encuentran en todos los juguetes electrónicos.

1.Reconocer que uno de los propósitos más importantes del juego con juguetes durante la niñez, y especialmente en la infancia, no es educativo en absoluto, sino más bien facilitar un apoyo cálido y comprensivo de interacciones y relaciones.

2. Los estudios científicos que apoyan un papel de desarrollo para los juguetes provienen principalmente de estudios de actividades en las que los niños juegan con los cuidadores en lugar de hacerlo solos. El juguete más educativo es aquel que fomenta las interacciones entre cuidadores y niños en juegos incondicionales de apoyo.

3. Proporcionar a los niños juguetes seguros y asequibles que sean apropiados para el desarrollo. Incluir juguetes que promuevan el aprendizaje y el crecimiento en todas las áreas del desarrollo. Elegir juguetes que no estimulen demasiado y alentar a los niños a usar su imaginación. Las habilidades socioemocionales y cognitivas se desarrollan y mejoran a medida que los niños utilizan el juego para resolver problemas de la vida real.

4. Hacer una selección cuidadosa de juguetes y recordar que un buen juguete no tiene por qué ser moderno o caro. De hecho, a veces los juguetes más simples pueden ser los mejores, ya que brindan oportunidades para que los niños usen su imaginación para crear el uso del juguete, y no al revés. Elegir juguetes que crecerán con el niño, fomente las interacciones con los cuidadores, fomente la exploración y la resolución de problemas y encienda la imaginación del niño.

5. Usar libros infantiles para desarrollar ideas para simular juntos jugando con juguetes; el uso de la biblioteca debe ser rutinario para todos los padres, independientemente de su estatus socioeconómico. Se debe considerar una lista de ubicaciones de bibliotecas comunitarias para el consultorio.

6. Tener en cuenta que los juguetes no son un sustituto de las relaciones cálidas, amorosas y confiables. Use juguetes para mejorar las interacciones entre el cuidador y el niño en lugar de dirigir el juego de los niños.

7. Busque el consejo del proveedor de atención médica pediátrica para distinguir entre juguetes seguros y no seguros.

8. Tener en cuenta el potencial de los juguetes para promover estereotipos basados ??en la raza o el género.

9. Limitar el uso de videojuegos y juegos de computadora. Tiempo total de pantalla, incluyendo televisión y uso de computadora, debe ser menos de 1 hora por día para niños de 2 años o más y evitarse en niños de 18 a 24 meses de edad. Los niños menores de 5 años deben jugar con la computadora o los videojuegos solo si son apropiados para el desarrollo, y deben estar acompañados por el padre o cuidador. El uso de los medios junto con la interacción del cuidador es esencial para minimizar los efectos adversos de los medios en la mente de los jóvenes.

10. Buscar juguetes que alienten al niño a ser mental y físicamente activo.

• Para obtener información sobre inquietudes o preguntas sobre la seguridad de los juguetes, consulte el sitio web de la Comisión de Seguridad de Productos del Consumidor de los EE. UU. (www.cpsc.gov) y Cuidando a nuestros niños, tercera edición.

• Para preguntas o inquietudes con respecto a las pautas de control de infecciones, consulte las pautas de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (http://www.cdc.gov).

• Para orientación en la identificación de juguetes apropiados para niños pequeños, consulte los siguientes recursos:

1. De cero a tres, “Consejos para elegir juguetes para niños pequeños” (https: // www.zerotothree.org / resources / 1076- tips- for- choice- toys- fortoddlers);

2. La Asociación Nacional para la Educación de Niños Pequeños. (NAEYC) (http: // www. Naeyc. Org / ecp / resources / goodtoys); y

3. StimQ (http: // www. Med. Nyu. Edu / pediatrics / developmental / investigación / belle-project / stimqcognitive-home- environment).

• Para obtener sugerencias sobre cómo los cuidadores pueden usar juguetes, juegos y otras actividades para fomentar el desarrollo del lenguaje, consulte los siguientes sitios web:

1. Demasiado pequeño para fallar (http: // toosmall.org/), y

2. Cerrando la brecha de la palabra (http: // bwgresnet. Ku. Edu /).

• Para obtener una lista de recursos de sugerencias sobre juguetes, juegos y recreación para

niños con discapacidades, refiérase a los siguientes sitios web:

1. El sitio web de Northwest Access Fund (http: // washingtonaccessf und. org / toys- play- for- children- abstisabilities-lista de recursos /), y

2. ¡Cómo jugamos! Una guía para padres e intervención temprana de profesionales desde el nacimiento hasta dos años (https: // eric. Ed. Gov /? Id = ED447660).

• Para obtener información sobre la promoción de la actividad física, consulte los siguientes recursos:

1. Vamos a Mover (https: // nos permite mover. Obamawhitehouse. Archives. Gov /ponerse activo), y

2. Centro Nacional de Recursos para la Salud y Seguridad en el Cuidado Infantil y Educación Temprana (http: // nrckids. org / index. cfm / products /videos11 / motion- moments1 /).

Resumen y comentario objetivo: Dra. María José Chiolo