Reduce el riesgo de cesárea y ayuda al feto

Inducir el trabajo de parto

El riesgo de que el parto sea por cesárea es significativamente menor que el riesgo asociado con el manejo expectante.

Por Lorraine L. Janeczko

NUEVA YORK (Reuters Health) - Inducir el trabajo de parto reduce el riesgo de tener que utilizar una cesárea sin que aumente el riesgo de muerte materna y con beneficios para el feto, según revela un nuevo estudio.

"Nuestro metaanálisis demostró que el riesgo de que el parto sea por cesárea después de inducir el trabajo de parto es significativamente menor que el riesgo asociado con el manejo expectante. Esto respalda evidencia de revisiones sistemáticas previas, pero contradice las creencias y la información de las organizaciones de consumidores, las guías y los libros de texto", escriben los autores en la revista CMAJ.

"Son hallazgos sólidos confiables (...) de modo que podemos asegurar que la inducción del trabajo de parto reduce las cesáreas y aumenta los partos vaginales", dijo por correo electrónico el coautor del estudio, doctor Khalid S. Khan, del Centro de Atención Primaria y Salud Pública y de la Facultad de Medicina y Odontología de Barts y Londres de la Universidad Reina María, Londres, Reino Unido.

"La preocupación por el riesgo de una cesárea no debería ser el motivo para no inducir el trabajo de parto en un embarazo a término. La inducción favorece el parto vaginal", agregó.

El equipo de Khan realizó una revisión sistemática y un metaanálisis de seis bases de datos electrónicas para identificar los mejores estudios publicados hasta abril del 2012.

En 157 ensayos clínicos aleatorizados, realizados entre 1975 y el 2010, se había comparado la inducción del trabajo de parto con placebo o el manejo expectante en embarazadas con un feto viable (31.085 partos).

El riesgo de cesárea era menor con la inducción del parto que con el manejo expectante (RR=0,88) y significativo en las gestaciones a término y postérmino, no así en los embarazos prematuros.

Además, la inducción del parto redujo un 50 por ciento el riesgo de muerte fetal y un 14 por ciento el de internación en una UTI neonatal, sin efecto alguno en el riesgo de muerte materna.

Los autores admiten que las limitaciones del estudio incluyen algunos factores potencialmente confundentes, como el IMC y la edad materna, y que las diferencias en las prácticas 35 años antes pudieron sesgar los resultados.

El doctor David P. van der Ham, del Departamento de Obstetricia y Ginecología del Hospital Martini, Groninga, Países Bajos, dijo por e-mail: "Esta revisión demuestra que la inducción del trabajo de parto reduce el riesgo de cesárea en los embarazos a término y postérmino, a diferencia de lo que indican las guías y los libros de texto".

"Como investigadores del Consorcio Holandés de Estudios sobre la Salud y la Reproducción Femenina, habíamos detectado un nivel de riesgo por lo menos similar de parto por cesárea entre la inducción del trabajo de parto y el manejo expectante en mujeres con distintas complicaciones gestacionales. Por lo tanto, estos resultados no me sorprenden", aseguró Van der Ham, que no participó del estudio

"Tampoco habría esperado que la inducción del trabajo de parto aumentara ese riesgo ni que la prostaglandina E2 y el misoprostol, especialmente, pudieran disminuirlo y que los métodos mecánicos, como el catéter de Foley, no pudieran hacerlo", dijo.

"Siempre nos pareció que la inducción hace bien. El hallazgo de que reduce la necesidad de una cesárea es tan evidente en nuestros análisis que hasta podría utilizarse como una estrategia para aumentar la cantidad de partos por vía vaginal", agregó.

FUENTE: CMAJ