Robert Preidt
Unas sesiones breves de ejercicio de alta intensidad podrían ofrecer más beneficios de salud a las personas que sufren de diabetes tipo 2 que las sesiones largas de actividad menos intensa, sugiere un nuevo estudio canadiense.
La investigación incluyó a 76 adultos recién diagnosticados con diabetes tipo 2. Su edad promedio era de 67 años. Se asignaron al azar a realizar una sesión de ejercicio de 30 minutos cinco días a la semana a un 65 por ciento de su ritmo cardiaco objetivo, o tres sesiones de ejercicio de 10 minutos al día, cinco días a la semana, a un 85 por ciento de su ritmo cardiaco objetivo.
Se evaluó a los participantes tres meses después. En comparación con los del grupo de intensidad más baja, los del grupo de alta intensidad realizaron más ejercicio y experimentaron reducciones más grandes en los niveles de colesterol y azúcar en sangre, perdieron más peso y obtuvieron mejoras más notables en la salud cardiaca.
Los pacientes del grupo de alta intensidad mostraron una reducción más de dos veces más grande en los niveles de hemoglobina A1C. La A1C es un análisis sanguíneo que ofrece un cálculo aproximado de los niveles promedio de azúcar en sangre en los últimos dos o tres meses, según la Asociación Americana de la Diabetes (American Diabetes Association).
Aunque ya se sabía que el ejercicio beneficia a las personas con diabetes tipo 2, el enfoque ha sido unas sesiones de ejercicio sostenido de baja intensidad, señaló el coautor del estudio, Avinash Pandey, estudiante de licenciatura en la Universidad de Ontario Occidental.
"Pero quizá se logre más con unas sesiones cortas de ejercicio vigoroso en que los pacientes logren un ritmo cardiaco objetivo máximo más alto, y podría ser más fácil incluirlas en un horario apretado", dijo Pandey en un comunicado de prensa de la Asociación Americana del Corazón (American Heart Association).
También anotó que dado que las personas podían incluir el ejercicio de alta intensidad en sus horarios, eran más constantes con el ejercicio y acabaron haciendo más ejercicio a la semana.
El ejercicio de alta intensidad podría utilizar la energía de forma distinta que el ejercicio menos intenso, sugirieron los autores del estudio.
Pandey añadió que los investigadores esperan estudiar las sesiones cortas de ejercicio intensivo en grupos de personas más grandes y diversos.
"Con más estudios, las sesiones cortas de ejercicio podrían convertirse en una alternativa viable al estándar actual de atención, que es un ejercicio sostenido de baja intensidad para la rehabilitación de la diabetes", comentó.
El estudio fue presentado el martes en la reunión anual de la Asociación Americana del Corazón en Orlando, Florida. Los hallazgos presentados en reuniones generalmente se consideran preliminares hasta que se publiquen en una revista revisada por profesionales.
FUENTE: American Heart Association
Podrían beneficiar a las personas que sufren de diabetes tipo 2
Sesiones cortas e intensas de ejercicio
Una investigación sugiere que el ejercicio breve pero más intenso podría proveer un mejor control de la glucemia
Fuente: Medlineplus