Quizá esas dietas ricas en proteína tengan algo de razón: un nuevo estudio encontró que es verdad que la proteína hace que uno se sienta lleno antes.
Muchas personas aumentan su consumo de carne y otros alimentos ricos en proteína cuando intentan perder el exceso de peso, porque creen que les ayudará a sentirse más llenos al mismo tiempo que consumen menos calorías.
Pero se carecía de estudios de gran tamaño que confirmaran esa idea, anotó un equipo dirigido por un investigador sobre la nutrición, Richard Mattes, de la Universidad de Purdue en West Lafayette, Indiana.
Su equipo analizó los datos disponibles de numerosos estudios sobre el tema. El nuevo estudio concluyó que la proteína de hecho sí hace que la gente se sienta más llena antes.
Los hallazgos aparece en la edición del 3 de marzo de la revista Journal of the Academy of Nutrition and Dietetics.
"Muchas evidencias sugieren que la proteína activa la liberación de la hormona de la saciedad [de sentirse lleno], y por lo tanto debe tener el vínculo más firme con las calificaciones de saciedad", señaló Mattes, director del Centro de Investigación sobre la Conducta de Ingesta de la Purdue, en un comunicado de prensa de la revista.
Pero "los estudios individuales con frecuencia se llevan a cabo con poblaciones pequeñas o con métodos distintos, lo que puede dificultar la interpretación de los resultados. Nuestro estudio combinó experimentos múltiples para confirmar la presencia de un efecto", explicó.
Pero aunque la proteína ayudó a las personas a dieta a sentirse llenos, no es una panacea para perder peso, enfatizaron los investigadores.
"Las sensaciones como el hambre y la saciedad no son los únicos factores que influyen sobre el consumo [de calorías]", comentó Mattes. "Con frecuencia comemos por otros motivos. Todo el que se ha sentido demasiado lleno como para terminar toda la comida, pero tiene sitio para el postre, lo sabe muy bien".
¿Y cuánta proteína se necesita para sentirse lleno?
Heather Leidy, coautora del estudio y profesora asistente de nutrición de la Universidad de Missouri, dijo que el tema todavía está "sin resolver".
Pero un aumento moderado en el consumo de proteína podría ser un buen primer paso para las personas que intentan perder peso, sugirieron los investigadores.
"Si esos efectos se sostienen a largo plazo (y nuestro estudio solo observó los efectos a corto plazo), un aumento en el consumo de proteína podría ayudar a perder o a mantener el peso corporal", afirmó Mattes.
Dos expertas en nutrición dijeron que el estudio es útil, pero que la efectividad a largo plazo de una dieta rica en proteína todavía no es una certeza.
"Aunque esta información podría ser útil para hacer que se realicen estudios adicionales sobre este tema y cómo se relaciona con el consumo de calorías y el peso, no podemos concluir que más proteína signifique una mayor pérdida de peso", señaló Erin Keane, nutricionista del Hospital Lenox Hill, en la ciudad de Nueva York.
"Los estudios [examinados en la nueva revisión] difirieron mucho respecto a la cantidad de proteína consumida, además de la cantidad total de calorías ingeridas en un momento dado", anotó. "Los estudios tampoco ofrecieron información sobre si el aumento en la saciedad en realidad condujo o no a una reducción en la ingesta total en un día dado".
Dana Angelo White, nutricionista y profesora clínica asistente de entrenamiento deportivo de la Universidad de Quininipiac en Hamden, Connecticut, dijo que el nuevo hallazgo "refuerza el mensaje que los dietistas registrados ofrecen actualmente".
Según White, "la cantidad exacta varía, pero lo ideal es consumir una variedad de tipos de proteína de origen tanto vegetal como animal, distribuida a lo largo del día. Esto no solo combatirá a la sensación de hambre, sino que ofrecerá al cuerpo los aminoácidos que necesita para cosas como la salud muscular, la inmunidad y la producción de hormonas".
FUENTES: Erin Keane, RD, nutritionist, Lenox Hill Hospital, New York City; Dana Angelo White, RD, nutritionist, clinical assistant professor, athletic training and sports medicine, Quinnipiac University, Hamden, Conn.; Journal of the Academy of Nutrition and Dietetics