En el plazo de 5 minutos

Una inyección rápida de epinefrina aumenta la supervivencia del paro cardiaco

Una dosis a los 5 minutos de haberse detenido el corazón aumenta las probabilidades en un 20 por ciento

Autor/a: Robert Preidt

Fuente: MedlinePlus

Los pacientes con un paro cardiaco que reciben epinefrina (adrenalina) en el plazo de 5 minutos de que se detenga su corazón tienen más probabilidades de sobrevivir que los que no la reciben en ese periodo, según un estudio reciente.

Los investigadores analizaron los resultados de más de 100,000 pacientes que sufrieron un paro cardiaco mientras estaban en casi 550 hospitales de Estados Unidos. El paro cardiaco se produce cuando el corazón deja de latir de pronto, mientras que un ataque cardiaco se produce cuando el flujo sanguíneo al corazón queda bloqueado y se daña el tejido cardiaco.

En el estudio, las tasas de supervivencia fueron de casi un 13 por ciento entre los pacientes que recibieron inyecciones de epinefrina en el plazo de 5 minutos desde que se les paró el corazón. Las tasas fueron solamente de un 11 por ciento entre los que recibieron el medicamento después de haber pasado 5 minutos.

"Es una tasa de supervivencia un 20 por ciento más alta para los pacientes en los hospitales en los que la epinefrina se administra rápidamente, lo que supone una gran diferencia", dijo el primer autor del estudio, el Dr. Rohan Khera, miembro de la división de cardiología del Centro Médico Southwestern de la Universidad de Texas (UT) en Dallas.

Los investigadores también encontraron que las demoras a la hora de recibir la inyección de epinefrina resultaron en una peor recuperación de los pacientes, y que los hospitales que tenían un mayor número de pacientes con paro cardiaco tendían a administrar la epinefrina antes que los que tenían pocos casos.

Aproximadamente un 80 por ciento de los pacientes que sufren un paro cardiaco en un hospital tienen una afección por causas que no se pueden tratar con un desfibrilador, explicaron los investigadores. Tienen que ser tratados con una RCP y epinefrina, y tienen unas tasas de supervivencia mucho más bajas que los que pueden ser tratados con un desfibrilador.

"Las opciones de tratamiento por un paro cardiaco no desfibrilable son tan limitadas que se ha puesto un énfasis en la mejora de los procesos actuales", dijo Khera en un comunicado de prensa de la UT. "Administrar la epinefrina rápidamente y mejorar la calidad de la RCP son prácticas que se pueden mejorar con facilidad, lo que puede salvar vidas".

Los hallazgos aparecen en la edición en línea del 1 de diciembre de la revista Circulation.

FUENTE: UT Southwestern Medical Center