Más estadounidenses tienen sobrepeso o son obesos, pero muchos han renunciado a intentar perder el peso excesivo, muestra un nuevo estudio.
Una de cada tres personas de Estados Unidos es obesa actualmente, en comparación con una de cada cinco hace 20 años, informan los investigadores.
Pero las personas encuestadas entre 2009 y 2014 eran en general un 17 por ciento menos propensas a decir que habían intentado perder peso en el año anterior que las encuestadas entre 1988 y 1994, encontró el estudio.
Las personas que tenían sobrepeso pero que aún no eran obesas experimentaron la mayor pérdida de interés en mantener un peso saludable, señaló el investigador principal, el Dr. Jian Zhang.
"Esto no es bueno. Estamos perdiendo la oportunidad de evitar que el sobrepeso se convierta en obesidad", dijo Zhang, profesor asociado de epidemiología en la Universidad del Sur de Georgia.
Zhang y sus colaboradores analizaron datos de la Encuesta nacional de examen de salud y nutrición de EE. UU., una encuesta continua con fondos federales que da seguimiento a la salud y los hábitos dietéticos de los estadounidenses.
Todos los grupos raciales y étnicos, en ambos sexos, reportaron un menor interés en perder peso, pero las mujeres en particular fueron más propensas a decir que se habían dado por vencidas, mostraron los hallazgos.
En 2014, las mujeres negras tenían un 31 por ciento menos de probabilidades de haber intentado perder peso en comparación con hacía dos décadas, y las mujeres blancas eran un 27 por ciento menos propensas a haberlo intentado, hallaron los investigadores.
Las personas podrían estar renunciando a perder peso porque es simplemente demasiado difícil, planteó Zhang.
"Es doloroso", explicó. "Rebajar es difícil. Muchos lo hemos intentado y hemos fracasado una y otra vez, y al final ya no seguimos intentándolo".
La medicina moderna ha mejorado respecto a conservar la salud general de las personas con sobrepeso, lo que quizá haga que se pregunten para qué deberían molestarse, siguió Zhang.
"Hay una evidencia creciente de que los adultos con sobrepeso podrían vivir tanto tiempo, y a veces quizá más, que los adultos con un peso normal, haciendo que muchos se cuestionen si hay que tomárselo en serio", dijo Zhang. "En la práctica clínica, solo consideramos el tratamiento del sobrepeso cuando los pacientes tienen dos o más factores de riesgo adicionales", como la hipertensión o el colesterol alto.
También es posible que el sobrepeso se haya convertido en la nueva normalidad. "Hoy día, creemos que la mayoría tiene la razón", dijo Zhang. "Dado que más de la mitad de las personas tienen sobrepeso, simplemente pensamos que estamos bien, que no hay necesidad de hacer nada respecto al peso corporal".
El Dr. Mitchell Roslin, jefe de cirugía de la obesidad en el Hospital Lenox Hill, en la ciudad de Nueva York, añadió que los consejos contradictorios sobre la dieta probablemente también desanimen a muchos de intentar perder algo de peso.
"Primero les dijeron que no comieran grasa, ahora les decimos a los pacientes que reduzcan los carbohidratos simples", comentó Roslin. "Aunque creo que reducir los carbohidratos es clave, lo que el público escucha es 'voy a comer lo que quiera, porque todos estos consejos no han funcionado'".
Según el Dr. Rajpal Chopra, esas cifras muestran que los médicos, las autoridades de salud pública y los medios deben hacer un mejor trabajo al enfatizar la importancia de mantener un peso saludable. Chopra es endocrinólogo en Long Island Jewish Forest Hills de Northwell Health, en Forest Hills, Nueva York.
"El camino para perder peso con frecuencia está lleno de altibajos, y puede ser un proceso largo y frustrante. Lo que se debe enfatizar son las consecuencias de salud de largo alcance", planteó Chopra.
"La motivación debe provenir de familiares, amigos, médicos y los medios para educar sobre los riesgos de salud de tener sobrepeso", añadió.
Zhang dijo que los esfuerzos futuros por mejorar la salud pública deben enfocarse en cambios en el estilo de vida que fomenten una alimentación saludable y el ejercicio para todo el mundo, en lugar de un énfasis en perder peso.
"Detener un tren es difícil; intentar perder peso y no recuperarlo es difícil", comentó. "Hay que atacar al sobrepeso y la obesidad de frente. Hagamos más para evitar que suceda, en lugar de perderlo. Si arreglar un problema no es fácil, entones debemos evitar que suceda, es así de sencillo".
FUENTES: Jian Zhang, M.D., DrPH, associate professor, epidemiology, Georgia Southern University, Statesboro, Ga.; Mitchell Roslin, M.D., chief, obesity surgery, Lenox Hill Hospital, New York City; Rajpal Chopra, M.D., endocrinologist, Northwell Health's Long Island Jewish Forest Hills, Forest Hills, N.Y.; March 7, 2017, Journal of the American Medical Association