El principal inconveniente con cualquier enfermedad es su normalización. Cuando eso ocurre se le resta atención y en ocasiones se deja en el abandono a los pacientes. El mejor ejemplo es el asma que ya representa un problema de salud pública en México. Pero aunque es bastante frecuente, hay personas que la ven como un mal menor que no debe ser atendido.
Impacto a nivel global |
Tan solo para tener en cuenta, la Organización Mundial de la Salud (OMS) afirma que en el 2019 afectó a 262 millones de personas y causó 461 mil decesos. Con esto queda claro que puede ser mortal si no se ofrece el tratamiento adecuado a los pacientes.
Por lo anterior es que el primer martes de mayo se conmemora el Día Mundial del Asma. La iniciativa global tiene por tema “Cerrar brechas en la atención del asma” y el objetivo de sensibilizar a la población. Además busca romper con los prejuicios existentes que hoy en día obstaculizan la correcta atención y control del padecimiento.
En este día, es importante reconocer los desafíos a los que se enfrentan las personas que viven con la enfermedad. También resulta urgente sensibilizar y generar conciencia porque aún falta mucho por trabajar para crear las condiciones idóneas de aquellos que viven con asma. Entre los principales desafíos se encuentran lograr:
- Un diagnóstico temprano y certero sobre su condición respiratoria.
- Acceso a información, recursos y tratamientos adecuados que les permitan tener un correcto manejo de su enfermedad.
- Sensibilizar sobre la importancia de estratificar y tratar correctamente a una persona con asma grave.
¿Qué ocurre en México? |
Ahora es momento de conocer el panorama actual del asma en México. Tan solo en 2021 la tasa nacional de incidencia indicó más de 40 mil nuevos casos. Por lo anterior, es una de las Enfermedades No Transmisibles (ENT) con mayor incidencia en el país. Además se estima que apenas cinco de cada 10 personas diagnosticadas tienen control de su enfermedad.
El asma no controlada puede referirse al manejo deficiente de los principales malestares o signos que experimenta un paciente, así como áreas de oportunidad asociadas al seguimiento del tratamiento indicado por el médico tratante, actividad física limitada e incomodidades nocturnas.
También puede incluir crisis frecuentes que requieran medicación o algunas otras graves que pueden llegar a requerir hospitalización. Se estima que el 25% de las personas con asma no tienen adherencia a su tratamiento. Además de que al menos una de cada 10 personas no se ha sometido a una revisión de la enfermedad en los últimos dos años.
Además, por la falta de diagnóstico, se ha observado una anomalía en la incidencia de quienes padecen asma. De tal forma que hasta el 50% de las personas con la enfermedad no saben que la tienen, lo cual representa un problema de salud pública en muchos países.
Por todo lo anterior es que se le debe brindar más atención al asma en México. No solo se trata de las personas que ya fueron diagnosticadas sino también de quienes tienen esta enfermedad y no lo saben por la falta de revisiones médicas periódicas.