"Una protección significativa"

Escudos contra radiación protegen a médicos en cardiocirugías

Exigen un manejo activo para ser útiles-

Por Will Boggs

NUEVA YORK (Reuters Health) - Los escudos contra la radiación les brindan a los médicos "una protección significativa" durante las cirugías cardíacas, si los usan adecuadamente, publica un equipo en JACC: Cardiovascular Interventions.

"Aunque estos escudos protectores están disponibles en los quirófanos para cirugías cardiovasculares, exigen un manejo activo para ser útiles", escriben los expertos en un estudio sobre "las mejores prácticas".

El equipo del doctor Kenneth A. Fetterly, de la Clínica Mayo en Rochester, Minnesota, colocó a un paciente artificial sobre la mesa de operación y midió la intensidad de la radicación en tres sitios dentro del quirófano donde se pararían los cirujanos para intervenir vía la arteria femoral, la vena yugular o para colocar un marcapasos.

Los autores hicieron el experimento con (1) un escudo del tórax montado desde el techo con un orificio de la silueta para colocarlo directamente sobre todo el paciente; (2) un escudo de las extremidades inferiores que se coloca en un lateral de la mesa de operaciones; (3) un escudo accesorio que se une al escudo anterior para cubrir la parte superior del cuerpo del paciente, y (4) un paño desechable que absorbe la radiación.

"Sólo el escudo de las extremidades inferiores", que se usa para ingresar un catéter por la arteria femoral, "puede considerarse de uso estandarizado. El resto de los escudos y sus usos demandan sistemas adicionales de montaje", escribe el equipo.

Los médicos suelen mover los escudos durante las cirugías, de modo que el equipo midió la radiación con los escudos en distintas posiciones.

"Sólo protegen de la radiación cuando se encuentran entre la fuente de emisión de los rayos X y el cuerpo del médico", recuerdan los autores.

La colocación del escudo torácico fue crítica. El mejor nivel de protección se logró con el escudo bien ajustado al cuerpo del paciente y ubicado hacia la cabeza desde el sitio de acceso por vía femoral. La protección se redujo cuando el escudo se movió apenas 5 centímetros de la posición ideal.

"Si un médico quiere reducir la dosis de radiación en los brazos, el cuello y la cabeza que están sin protección, tiene que aprender cómo incorporar al quirófano un escudo torácico montado en el techo", dijo Fetterly.

"Ese escudo exige que la posición sea precisa durante la cirugía para que dé resultado. Cuando esto sucede, es muy efectivo", agregó.

Durante los cateterismos por vía femoral, el escudo de las extremidades inferiores proporcionó buena protección en las piernas, pero baja protección en la parte media del cuerpo y ninguna protección en la parte superior. Incorporar el escudo accesorio y el paño desechable aumentó la protección del tórax a por lo menos un 80 por ciento de la dispersión de la radiación.

Los resultados fueron similares en los cateterismos por vía yugular, aunque la protección del tórax nunca llegó al 80 por ciento con ninguna combinación de escudos.

"La configuración básica de los escudos para los cateterismos femorales es sencilla de aplicar", agregó, aunque aclaró que "si los escudos se colocan para realizar un cateterismo femoral, para realizar procedimientos por vía yugular y torácica anterior (como para colocar un marcapasos) hay que reconfigurar la posición".

En las intervenciones del lado izquierdo del tórax, los escudos brindaron un nivel excelente de protección de la zona inferior, pero sólo moderado en la parte media y superior del cuerpo del paciente.

"Los cardiólogos no reciben una dosis de radiación suficiente como para exigir modificaciones para cumplir con las normas federales", dijo Fetterly.

"De todos modos, los profesionales quieren reducir la dosis todo lo que sea posible (...) Existen las herramientas para protegerse de la radiación durante los procedimientos de intervencionismo cardíaco y los médicos son los responsables de usar los escudos disponibles con buen criterio", finalizó.

FUENTE: Journal of the American College of Cardiology: Cardiovascular Interventions, octubre del 2011