Introducción
La saliva contiene 99.5% de agua, proteínas en un 0.3% y sustancias inorgánicas un 0.2%. La mayor parte del tiempo se encuentra en promedio 1.1 mL de saliva en la boca. Diariamente, es secretado aproximadamente de 1.0 a 1.5 L. Las glándulas salivales mayores producen el 93% del volumen total de la saliva y las menores el 7%.2
A la obstrucción de una glándula salival o de la luz del conducto excretor por la formación de concreciones calcáreas o sialolitos en el parénquima de las mismas se le ha llamado sialolitiasis. Es la afección más frecuente de las glándulas salivales. Se ha externado en varias teorías que es originada por la mineralización de diversos componentes como cuerpos extraños, detritus celulares y microorganismos; inicialmente, se deposita una matriz orgánica, probablemente de glucoproteínas, para luego presentarse el depósito de material inorgánico que inicia su mineralización. La composición mineral de los sialolitos es básicamente calcio fosfato; tienen morfología variada, desde redondeados, ovalados, hasta tomar la configuración intraluminar del conducto, de tamaño variable, desde milímetros hasta centímetros, su coloración es pardo-amarillenta y su superficie es granulosa.3, 4, 5, 6, 7
Afecta de modo diferente a las distintas glándulas, la submandibular es la más afectada, seguida de la parótida y la sublingual. Esta afección es muy rara antes de la adolescencia, se presenta con mayor frecuencia en adultos en edad media, con una predilección por el sexo masculino. En estudios de necropsia se ha informado una incidencia en el 1% de la población.4, 5, 7 Las principales molestias son dolor, tumefacción e inflamación del área afectada.6, 7
Se hace notar que en las glándulas salivales menores, los sialolitos no ocasionan síntomas clínicos significativos. Se pueden presentar únicamente como nódulos pequeños, del color normal de la mucosa o amarillentos, firmes a la palpación, no indurados y localizados dentro de los tejidos blandos. Sin embargo, pueden tornarse sintomáticos cuando son traumatizados o sufren infección.7
Presentación de caso clínico
Llegó a la práctica privada una paciente de 71 años de edad, con hipertensión controlada de 20 años de evolución. La presión arterial que se obtuvo fue de 130/90 mmHg. Refirió tener un aumento de volumen en la cara interna del labio superior, de crecimiento muy lento, con cuatro años de evolución (Figura 1).
Figura 1. Aumento de volumen en la cara interna del labio superior
A la exploración física, se observaba aumento de volumen en la región ventral del labio superior, sin cambio de coloración de la mucosa y con dimensiones aproximadas de 16 mm de largo x 0.5 mm de ancho. A la palpación, se apreció un objeto adherido a plano superficial y profundo, móvil y no doloroso. Se decidió realizar biopsia escisional de la región del labio superior, previa asepsia y antisepsia del área a tratar, se procedió a realizar el bloqueo infraorbitario del lado derecho con mepivacaina con epinefrina al 2%. Se efectuó una incisión lineal en la región ventral del labio superior. Se realizó la disección del músculo orbicular superior y se encontró una muestra de 14 mm de largo con forma tuboidal y sólida en su interior (Figuras 2 y 3).
Figuras 2 y 3. Se realizó la disección
y se obtuvo una muestra de 14 mm de largo con forma tuboidal y sólida en su interior
Se envió para estudio histopatológico (Figuras 4 y 5). El diagnóstico fue sialolitiasis de glándula salival menor del labio.
Figuras 4 y 5. Se envió la muestra al laboratorio para su estudio histopatológico
Conclusión
No es muy común encontrar en los conductos excretores de glándulas salivales menores material calcificado, llamado sialolito. Sin embargo, cuando se halla no es por los síntomas causados, ya que por lo general son asintomáticos. Por lo contrario, los sialolitos de los conductos excretores de las glándulas salivales mayores sí causan sintomatología muy molesta.
Referencias bibliográficas
1 Nelson Lobos JF. Patologías de Glándulas Salivales Glándulas Salivales Menores. 2006. http://www.medicinaoral.cl/pdf/G_Salivales_DrLobos4.pdf
2 Bioquímica Dental. (en línea) (consultado el 22 de mayo de 2011)Disponible en: http://bioquimicadental.blogspot.com/2009/03/el-agua-es-el-principalcomponente-de.html
3 Rebolledo Cobos M, Carbonell Muñoz Z, Díaz Caballero A. Sialolitos en conductos y glándulas salivales. Revisión de literatura. Avances en Odontoestomatología 2009; Vol. 25 - Núm. 6. http://scielo.isciii.es/pdf/odonto/v25n6/original1.pdf
4 Moya LM, Velasco LA. Trastornos de las Glándulas Salivares 2005. (Consultado en línea 20 de marzo de 2011). Disponible en: http://eusalud.uninet.edu/apuntes/tema_27.pdf
5 García Ruiz J. Patología Obstructiva de las Glándulas Salivares 2010. Consultado en línea en: http://www.otorrinoweb.com/cuello/1625.htm
6 Izurieta Herrera J, Sanabria Hernández M, Bastida Martínez D. Trastorno de las glándulas salivares.
Sialolitiasis. Foros de Patología de la Universidad Rey Juan Carlos. 2009-2010. http://biopat.cs.urjc.es/conganat/files/2009-2010_G17.pdf
7 Haberland Kausel CM. Patología de Glándulas Salivales Mayores y Menores. Estudio Epidemiológico y Clínico-Patológico. Tesis. Universidad Francisco Marroquín. Facultad de Odontología. Guatemala. 1994. http://www.tesis.ufm.edu.gt/pdf/1068.pdf