El implante alpha-IMS de segunda generación, con algunas mejoras de diseño, mostró un buen perfil de seguridad con buenos resultados visuales y con la primera demostración de reconocimiento de letras y palabras de un paciente implantado.
El alpha IMS utiliza el ojo del paciente para captar las imágenes y no necesita de la video cámara. También cuenta con partes internas y externas. Las partes internas son
a) MPDA de silicona fotovoltaica subretiniana.
b) Un dispositivo de inducción interno implantado por debajo de la piel en la región retro auricular.
c) cable de silicona que conecta a y b.
El MPDA está diseñado para ser insertado subretinianamente y permitir la recepción de imágenes en la retina a través del ojo. La conversión de las imágenes se consigue mediante generación de fotocorriente por parte de cada fotodiodo, que luego es amplificada logarítmicamente antes de ingresar al microelectrodo que estimula las neuronas retinianas.
Lo ideal es que el implante de 3mm x 3mm se coloque por debajo de la fóvea o lo más cerca posible para permitir una estimulación óptima del MPDA. El cable de silicona que conecta el MPDA sale del ojo a través de la coroides para pasar por el borde lateral de la órbita y por debajo del músculo temporal, dentro del espacio sub-periostial y llega a la región retro auricular donde culmina en el dispositivo interno (ver figura).
Debido a la extensa vía extraocular del cable de silicona, el implante de alpha-IMS requiere un equipo multidisciplinario de cirujanos. El procedimiento toma entre 6 y 7 horas y puede ser retirado sin serias complicaciones.
Foto del alpha-IMS. a) MPDA magnificado y b) esquema de las distintas partes del implante.
Sting et al han publicado un informe sobre los primeros diez pacientes implantados con este sistema, con un seguimiento de 3 a 9 meses. Se informaron dos efectos adversos: un paciente desarrolló sangrado subretiniano postoperatorio con aumento de la PIO a 46 mmHg, que se resolvió con medicación. Otro paciente sufrió daño del nervio óptico intra-operatorio, al tocar la punta del implante el nervio óptico, como consecuencia el paciente quedó con visión sin percepción de luz. A pesar de estas complicaciones, los resultados visuales fueron favorables: tres pacientes pudieron reconocer letras en condiciones de alto contraste, con una agudeza visual de 1,43 log MAR (Snellen 20/546)-.
Por otro lado, IMI GmbH desarrolló IRIS (sigla en inglés sistema de implante retiniano inteligente) y Epi-Ret desarrolló el Epi-Ret 3. Ambos, al igual que Argus II, constan de una unidad externa con video cámara, unidad procesadora portátil, dispositivo externo y la unidad interna compuesta de receptor interno, circuito procesador y sistema de electrodos de estimulación epirretiniano.
En 2005, se implantó IRIS, con un sistema de 49 electrodos en cuatro pacientes que pudieron discernir líneas simples y puntos, como también detectar movimientos horizontales. En 2007 se realizó un estudio multicéntrico, en el cual se implantó IRIS con un prototipo de 61 electrodos en pacientes con retinitis pigmentosa, se publicaron los resultados en 2009, un paciente informó percepción visual confiable con estimulación.
Epi-Ret e es un dispositivo de tercera generación, la principal diferencia es que las partes internas están compactadas en un disco compacto con las dimensiones de una lente intraocular que se inserta en el saco capsular. En 2007 se realizó un ensayo en el que seis pacientes recibieron un implante durante cuatro semanas, Todos los pacientes informaron fosfenos como puntos, arcos o líneas.
Las prótesis retinianas actuales pueden dividirse en las que cuentan con un dispositivo externo para captar las imágenes (Argus II) y las que utilizan el mismo ojo del paciente (alpha-IMS). La desventaja del sistema externo es que la captura de imágenes es independiente de la posición del ojo, no obstante los pacientes implantados con Argus II mostraron mejorías funcionales en orientación y movilidad, como también la capacidad de localizar cuadrados apuntando a la pantalla LCD plana, utilizando el dispositivo. Por otro lado este sistema evita la pérdida del procesamiento intrarretiniano debido a remodelado neural intrarretiniano. El remodelado neural presenta un serio problema para el sistema de captura de imágenes, ya que depende de la integridad de la red retiniana intrínseca para el procesamiento de imágenes.
El principal problema de la visión artificial es la persistencia de la imagen, con Argus II las imágenes percibidas desaparecen en segundos, sin embargo dos de los pacientes percibieron imágenes constantes sin necesidad de sacudir la cabeza para recapturar la imagen, esto se podría deber a que conservan un mayor número de células ganglionares.
Conclusiones:
Después de décadas de investigación, se ha hecho realidad el sueño del ojo biónico que proporciona visión artificial a pacientes ciegos. Dos sistemas distintos han recibido la Conformidad Europea: El sistema Argus II, en marzo de 2011 y el alpha-IMS en julio de 2013. El Argus II también ha sido aprobado por la FDA en 2013. Por primera vez, los pacientes con pérdida de visión profunda por retinitis pigmentosa tienen un tratamiento. La tecnología seguirá avanzando, a medida que aumente la cantidad de pacientes que se benefician con el tratamiento.
Síntesis y traducción: Dr. Martín Mocorrea, editor responsable de Intramed en la especialidad de oftalmología.