La miopía constituye un problema importante de salud en todo el mundo. Los niveles más bajos pueden corregirse con anteojos, lentes de contacto o cirugía refractiva. Sin embargo la miopía elevada está asociada con riesgo de patologías que producen pérdida de visión como maculopatía miope, desprendimiento de retina, glaucoma y cataratas.

La prevalencia de la miopía está aumentando en diversas poblaciones del mundo y con más rapidez en el este y sudeste asiático. Dicho aumento está asociado con la creciente urbanización de estas poblaciones: La reducción del tiempo al aire libre, podría ser una de las razones de dicho incremento, un reciente meta-análisis reveló una reducción de 2% en las horas por semana pasadas al aire libre. El efecto protector de la actividad al aire libre también fue demostrado en estudios prospectivos.

Las imágenes de autofluorescencia conjuntival ultravioleta son un método objetivo de evaluar la exposición ocular a la luz solar, que se relaciona íntimamente con el tiempo al aire libre. Este método elimina la subjetividad del cuestionario. El daño solar pre clínico de la conjuntiva provoca fluorescencia con la luz ultravioleta, dicho fenómeno puede cuantificarse y analizarse mediante imágenes (fig. 1).

Utilizando dicha técnica, se pudo demostrar una asociación inversa entre autofluorescencia conjuntival ultravioleta y miopía en una cohorte de la población de Norfolk Island, aunque el tamaño de la muestra fue reducido y diversas variables que se prestan a confusión. El presente estudio fue diseñado para investigar dicha asociación en una población más numerosa.

Pacientes y métodos:
Participaron 1344 pacientes de raza blanca entre 19-22 años del Oeste de Australia, que integraron el Estudio de Salud Ocular. Se realizaron los siguientes procedimientos: autorrefracción cicloplégica, fotografías autofluorescencia ultravioleta conjuntival, cuestionario.

Fig. 1) Fotografía color y autofluorescencia ultravioleta de conjuntiva de adulto joven, la autofluorescencia revela fluorescencia en el área de daño solar.

Los resultados del presente estudio demostraron una importante relación entre miopía y autofluorescencia ultravioleta conjuntival, biomarcador objetivo de la exposición a la luz solar y tiempo de vida al aire libre. La relación siguió siendo significativa luego de ajustes por edad, sexo, nivel educativo y antecedentes familiares de miopía. A mayor área de autofluorescencia, menor prevalencia de miopía.

La autofluorescencia ultravioleta conjuntival media en el grupo con miopía elevada fue de 20,7 mm2, significativamente menor que en miopes en general (31,9 mm2) y no miopes (47,9mm2).

El presente estudio trató el tema de la menor autofluorescencia en miopes debido al efecto protector contra UV de las lentes correctivas, además de la diferencia de tiempo transcurrido al aire libre entre los grupos. Sin embargo, la menor autofluorescencia se siguió observando al incluir únicamente participantes que usaban lentes correctivas, lo que indica que la supuesta protección de las lentes es poco probable. Tampoco hubo diferencias entre quienes utilizaban lentes y quienes no lo hacían.

La autofluorescencia ultravioleta tuvo una mayor asociación con miopía que el recuerdo del participante del tiempo transcurrido al aire libre, lo que indicaría que la autofluorescencia es un método más confiable para determinar la exposición.

Los mecanismos que subyacen a esta asociación entre tiempo al aire libre y miopía han sido analizados recientemente. Aunque no se puede establecer la causalidad a partir del presente estudio, se confirma una fuerte relación inversa entre exposición ocular a la luz solar y miopía.

Conclusiones: En este grupo de población adulta joven, el error refractivo fue inversamente proporcional a la exposición ocular a la luz solar medida objetivamente, incluso luego de ajustes. Esto avala nuevamente la asociación inversa entre actividades al aire libre y miopía.

Síntesis y traducción: Dr. Martín Mocorrea, editor responsable de Intramed en la especialidad de oftalmología.