En pacientes con cálculos ureterales que se tratan médicamente (es decir, sin intervención urológica), ¿qué tan precisas son la resolución del dolor y la visualización informada por el paciente de un cálculo expulsado como indicadores de que el cálculo ha pasado realmente?
Para averiguarlo, los investigadores estudiaron a 212 pacientes que acudieron a un departamento de emergencias canadiense con cálculos ureterales documentados por tomografía computarizada (tamaño medio de los cálculos, 6,5 mm) y fueron tratados médicamente.
Fueron atendidos en una clínica de piedra un promedio de 18 días después; en las imágenes de seguimiento, se documentó el paso de cálculos en 105 pacientes. Los hallazgos fueron los siguientes:
- De 129 pacientes que informaron cese del dolor, el 37% todavía tenía cálculos ureterales.
- De 72 pacientes que, según los informes, observaron el paso de su cálculo, el 19% todavía tenía cálculos ureterales.
- De 59 pacientes con cese del dolor y observación informada del paso de cálculos, el 20% todavía tenía cálculos ureterales.
Comentario
El mensaje para llevar a casa es que los pacientes con cálculos ureterales requieren un seguimiento para asegurarse de que el cálculo haya pasado y que la hidronefrosis se haya resuelto.
Resumen
Propósito:
Se evaluó la precisión de los resultados informados por los pacientes para predecir el paso espontáneo de cálculos ureterales.
Materiales y métodos:
Los pacientes con nuevos cálculos ureterales unilaterales fueron evaluados prospectivamente con respecto a los síntomas actuales y si creían que su cálculo había pasado. El resultado primario fue el paso espontáneo exitoso de cálculos, confirmado por ecografía y radiografía de riñón, uréter y vejiga.
El paso espontáneo de cálculos se comparó con las respuestas de resultado informadas por el paciente para evaluar la precisión.
Resultados:
De los 212 pacientes, 105 (49,5%) tuvieron un paso espontáneo exitoso de cálculos con un seguimiento medio de 17,6 días.
En comparación con el grupo de excreción espontánea de cálculos sin éxito, aquellos con excreción espontánea exitosa de cálculos tenían cálculos significativamente más pequeños (promedio de 5,4 frente a 7,6 mm), más distales (71,4% frente a 34,6%) con un tiempo promedio de seguimiento ligeramente mayor en la primera visita (19,2 frente a 16,0 dias). Además, hubo más cese del dolor informado por los pacientes (77,1% frente al 44,9%) y el paso de cálculos percibido (55,2% frente al 13,1%) en este grupo.
El cese del dolor fue 79,7% (95% CI 67,1-89,0) sensible y 55,8% (95% CI 44,0-67,1) específico para el paso exitoso de cálculos espontáneos.
Asimismo, el paso de cálculos informado por el paciente fue 59,3% (95% CI 45,7 a 71,9) sensible y 87,0% (95% CI 77,4 a 93,5%) específico.
En el análisis de regresión logística multivariable, el cese del dolor (OR 4,02; IC del 95%: 1,91 a 8,47; p <0,01) y el paso de cálculos informado (OR 3,79; IC del 95%: 1,73 a 8,28; p <0,01) fueron predictores independientes de cálculo espontáneo exitoso. paso.
Conclusiones: El cese del dolor y la expulsión de cálculos informada por el paciente son predictores independientes de una expulsión espontánea satisfactoria de cálculos. Sin embargo, ambas evaluaciones pueden medir incorrectamente el paso espontáneo de cálculos, lo que suscita preocupación por su validez como único criterio de valoración clínico. |