Enfoque no farmacológico

Manejo del estilo de vida en la hipertensión arterial

Un compendio de estrategias de primera línea para prevenir y controlar la hipertensión arterial en la edad adulta

Autor/a: Fadi J Charchar, Priscilla R Prestes, Charlotte Mills

Fuente: J Hypertens 2023 Sep 13.

Introducción

La hipertensión es el factor de riesgo modificable más importante de morbilidad y mortalidad en todo el mundo.

Los cambios en el estilo de vida son la piedra angular de la prevención y el tratamiento y tanto los gobiernos como la industria son fundamentales para respaldar e implementar estas modificaciones. Además, los cambios en el estilo de vida pueden no sólo reducir y controlar la presión arterial (PA), sino también mejorar la salud cardiovascular y general.

Es importante destacar que las bien conocidas intervenciones en el estilo de vida, como el cambio en la dieta, la moderación del consumo de alcohol, el abandono del hábito de fumar y el ejercicio aeróbico, ahora se han extendido a estrategias menos obvias, como la reducción del estrés, el ejercicio isométrico y la reducción de la exposición a la contaminación.

Aunque los cambios en el estilo de vida son eficaces, siguen siendo difíciles de implementar y mantener a largo plazo porque muchas personas viven en entornos que no son propicios. Además, los médicos suelen estar mal capacitados para ayudar a los pacientes a adoptar comportamientos saludables.

En el presente artículo, los autores analizan la evidencia actualizada que respalda el uso de intervenciones en el estilo de vida en pacientes con hipertensión arterial o personas con riesgo de desarrollarla.

Recomendación general

Se recomiendan objetivos de estilo de vida (resumidos en la figura 1) para prevenir o retrasar la aparición de PA elevada y reducir el riesgo de ECV. Las modificaciones del estilo de vida deben ser la primera línea de tratamiento antihipertensivo en la hipertensión de grado 1. Sin embargo, si el control de la PA no se logra solo con estos cambios, los autores sugieren una combinación de modificaciones del estilo de vida y medicamentos antihipertensivos, ya que los primeros mejoran el efecto del tratamiento farmacológico.

FIGURA 1. Cambios en el estilo de vida. En verde se encuentran los cambios que se deben fomentar, aumentar y respetar, por ejemplo, el consumo de fibra dietética, la mejora de los hábitos de sueño, el aumento del ejercicio y la adopción de estrategias de atención plena. En rojo están los cambios para disminuir o evitar, por ejemplo, el consumo de tabaco y alcohol, el sedentarismo, el consumo de azúcares refinados y la exposición a la sal y la contaminación.

Control de peso
Recomendaciones:

1. La pérdida de peso debe incorporarse a la vida cotidiana, es decir, aumentar el ejercicio incidental, caminar o andar más en bicicleta, o practicar deporte regularmente, estar menos horas sentado, etc.

2. Se debe hacer hincapié en la intervención temprana y los programas de educación sanitaria para mantener un peso saludable durante toda la vida.

3. Para las personas con hipertensión se recomienda una pérdida de peso modesta que pueda mantenerse durante un largo período de tiempo junto con una reducción de la ingesta de calorías.

4. Las intervenciones para perder peso deben basarse en estrategias cognitivo-conductuales (p. ej., entrenamiento en conciencia del apetito, una estrategia de autocontrol en la que los individuos aprenden a identificar señales internas de hambre y saciedad moderadas y a utilizar estas señales para guiar su conducta alimentaria).

5. Se debe controlar la obesidad abdominal. Se deben utilizar puntos de corte étnicos específicos para el índice de masa corporal y la circunferencia de la cintura.

6. El tipo de programa de pérdida de peso elegido debe adaptarse, considerando el peso inicial individual, la edad, el sexo, las comorbilidades y el contexto situacional con el apoyo de un nutricionista.

7. Se fomenta el uso de enfoques innovadores basados en tecnologías de cambio de comportamiento (por ejemplo, aplicaciones, mensajes de texto) para todas las personas con sobrepeso u obesidad.

Actividad física
Recomendaciones:

1. Se debe alentar a todas las personas a realizar actividad física para prevenir o controlar la hipertensión y las enfermedades cardiovasculares.

2. Se debe hacer hincapié en la intervención temprana (desde la infancia) y los programas de educación sanitaria para mantener la actividad física a lo largo de toda la vida.

3. Tanto el ejercicio de resistencia aeróbico como el dinámico o sus combinaciones se pueden utilizar en la prevención y el tratamiento de la hipertensión y las enfermedades cardiovasculares.

4. Los adultos deben realizar entre 150 y 300 minutos de ejercicio de intensidad moderada o entre 75 y 150 minutos de ejercicio vigoroso, o una combinación equivalente, semanalmente.

5. El tipo de actividad/ejercicio elegido debe adaptarse individualmente, considerando el estado físico inicial, las comorbilidades, el tratamiento farmacológico, el contexto situacional y ser de naturaleza progresiva (es decir, comenzar lentamente y aumentar gradualmente la cantidad/intensidad de la actividad).

Nutrición general

A-Sal

Recomendación:
1. Ingesta de menos de 2 g de sodio (-5 g de sal o una cucharadita) por día.

B-Potasio

Recomendaciones:

1. La Administración Europea de Seguridad y Alimentación y la OMS recomiendan una ingesta de potasio de más de 3,5 g por día para adultos, mientras que las Academias

Nacionales de Ciencias y Medicina recomiendan una ingesta de más de 4,7 g por día para adultos.

2. Es necesario considerar las necesidades alimentarias y nutricionales individuales debido a la menor composición corporal entre sexos y las mayores diferencias entre la masa corporal dentro y entre poblaciones.

C-Azúcar

Recomendación:
1.Reducir o limitar la ingesta de azúcar tanto en forma cruda como en alimentos, bebidas y dulces procesados.

D-Fibra

Recomendación:
1. La ingesta de fibra de 25 a 29 g/día confirió la mayor reducción del riesgo, pero los datos de dosis-respuesta sugirieron que más de 30 g/día genera beneficios adicionales.

E-Alcohol

Recomendaciones:

1. El consumo de alcohol debe ser cero para obtener mejores resultados cardiovasculares. Sin embargo, el límite máximo diario recomendado de alcohol el consumo es de dos bebidas estándar para hombres y 1 para mujeres (10 g de alcohol/bebida estándar), aunque se reconoce que no existe un límite seguro de consumo de alcohol para prevenir la hipertensión y los resultados cardiovasculares adversos.

2. Deben evitarse los atracones de bebida.

F. Bebidas no alcohólicas

Recomendaciones:

1. El consumo regular moderado de café (de tres a cuatro tazas por día) no afecta negativamente a la presión arterial ni al sistema cardiovascular y puede ser moderadamente beneficioso.

2. Podrá considerarse la adición de bebidas ricas en nitratos, como zumo de remolacha, zumo de granada y cacao.

 

Ayuno intermitente
Recomendaciones:

1. El ayuno intermitente con restricciones calóricas puede ser beneficioso para perder peso y reducir la presión arterial, pero no es superior a una dieta general restringida en calorías. Por lo tanto, el uso del ayuno intermitente debe depender de las preferencias del paciente y de otras consideraciones.

2. El ayuno, incluso durante el Ramadán o Cuaresma, es generalmente seguro en poblaciones de riesgo bajo a moderado.

 

Reducción del estrés y Mindfulness
Recomendaciones:

1. Practicar técnicas de reducción del estrés al menos 3 h por semana para reducir el estrés mental y la PA.

2. Alternativamente, practique actividades como yoga, meditación o tai chi al menos 45 minutos al día.

3. Escuche música de una vez al día a tres veces por semana durante al menos 25 minutos.

 

Dormir
Recomendaciones:

1. Se debe considerar el control del peso para mejorar la calidad del sueño y el tratamiento de los trastornos del sueño (especialmente la AOS).

2. La higiene del sueño debe abordarse e implementarse de forma rutinaria. Se recomienda una duración del sueño de 7 a 9 h por noche para los adultos.

3. Los enfoques de higiene del sueño incluyen un entorno adecuado para dormir, horarios regulares de sueño, rutina de sueño para prepararse para dormir, evitar la ingesta de alimentos, cafeína, alcohol y cigarrillos cerca de la hora de acostarse y por la noche. exposición a luz brillante y ejercicio durante el día y su restricción antes de dormir.

4. Se debe implementar el control de estímulos y la construcción de una fuerte asociación entre la cama/dormitorio y el sueño: acuéstese sólo cuando tenga sueño; establecer una rutina de sueño; aplique la regla de los 20 minutos (es decir, si no puede

conciliar el sueño en 20 minutos, levántese y vaya a otra habitación y realice actividades no estimulantes).

5. No se deben recomendar de forma rutinaria las siestas diurnas de más de 30 minutos, dados sus efectos sobre la presión del sueño y el sueño nocturno y la falta de evidencia de resultados a largo plazo.

6. Los trabajadores por turnos podrían necesitar un enfoque individualizado para desarrollar patrones de sueño-vigilia. Se debe considerar la monitorización ambulatoria de la PA para el diagnóstico y las evaluaciones de seguimiento para evaluar los patrones de PA nocturna.

7. La detección de los trastornos del sueño (en particular, AOS) debe realizarse en la hipertensión resistente, en pacientes con hipertensión nocturna y/o descensos anormales de la PA. Si corresponde, se debe implementar un tratamiento, centrándose en cambios en el estilo de vida y el uso de tratamientos específicos (CPAP, aparatos bucales) para favorecer los buenos hábitos de sueño.

8. Las personas con trastornos del sueño conocidos (ronquidos, AOS, insomnio, etc.) deben someterse a mediciones periódicas de la PA. Se debe considerar la monitorización ambulatoria de la PA para la evaluación del patrón nocturno.

Fumar
Recomendaciones:

1.Se recomienda encarecidamente dejar de fumar (incluidos los cigarrillos electrónicos) por sus beneficios para la salud bien establecidos. Es importante destacar que se deben implementar estrategias y enfoques para evitar el aumento de peso después de dejar de fumar.

2.Las poblaciones objetivo clave son las que ya están expuestas al tabaquismo y las que aún no lo están, compuestas en gran medida por generaciones jóvenes.

3.Se ha demostrado que el asesoramiento de intervención breve y las técnicas de entrevista motivacional en los centros de salud son muy eficaces para dejar de fumar.

Exposición a la contaminación
Recomendaciones:

1. Haga ejercicio en parques y jardines alejados de vías transitadas.

2. Limite el tiempo que pasa al aire libre durante los períodos de alta contaminación.

3. Evitar la quema ineficiente de biomasa para calefacción doméstica.

4. Considere el uso de sistemas de ventilación con filtración para viviendas en zonas de alta contaminación.

 

Medicamentos sin receta y suplementos nutricionales
Recomendaciones:

1. La ingesta de vitaminas, minerales y micronutrientes debe obtenerse como parte de una dieta sana, rica en nutrientes y equilibrada.

2. Los suplementos saludables no reemplazan una dieta equilibrada y no se recomiendan como tratamiento para la hipertensión.

 

Intervenciones conductuales y salud digital
Recomendaciones:

1. Los proveedores de atención médica deben recibir capacitación en enfoques de cambio de comportamiento y tecnologías de apoyo digital para facilitar la acción y controlar la hipertensión.

2. Los cambios de comportamiento deben ser integrales y abarcar la mejora y el mantenimiento de la higiene bucal para prevenir la periodontitis y mejorar el control de la PA.

3. Uso continuo de dispositivos portátiles y herramientas digitales validados para mejorar la conciencia de los síntomas, introducir posibles recordatorios (por ejemplo, para la ingesta de medicamentos o promover un mayor ejercicio incidental), ayudar al cambio de comportamiento (por ejemplo, establecimiento de objetivos, apoyo a las decisiones, autocontrol, que puede integrar datos portátiles, Se deben fomentar sistemas de recordatorios y alertas, agentes conversacionales de soporte digital para mejorar la adherencia, motivación y autoeficacia del usuario, programación de personalización de la intervención).

4. Introducir tecnologías de comunicación para facilitar la orientación y el aporte profesional o el apoyo social (espacios digitales para comunicarse con proveedores de atención médica o pares, mensajes SMS) como una intervención digital independiente o integrada en una intervención multicomponente.

 

Enfoque holístico para la prevención de la presión arterial en todo el mundo
Recomendaciones:

1. Implementación de atención integral a los pacientes, como se evidencia en  América Latina, Canadá y algunos países de África, para proporcionar el tratamiento y manejo óptimos de la PA.

2. Mejorar el acceso al diagnóstico, tratamiento y manejo de la PA en áreas regionales y rurales.

 

Resumen general y una vistazo al futuro de las intervenciones asistidas en estilo de vida

En este documento se presentan recomendaciones que respaldan un estilo de vida saludable para controlar y mantener una presión arterial adecuada: más ejercicio, menos sal, azúcar y grasas saturadas en la dieta, más frutas, verduras y fibra dietética, no fumar ni consumir alcohol.

También se presentó evidencia emergente de modalidades más nuevas y se discutió el potencial de un mayor uso de tecnologías digitales para ayudar a mejorar los hábitos de vida de una manera personalizada. De hecho, existen muchas “aplicaciones” para teléfonos móviles que pueden utilizarse para ayudar a realizar un seguimiento del movimiento, la dieta y los hábitos. Estas tecnologías se pueden utilizar para controlar el peso, evaluar la composición de las comidas y el contenido calórico.

Es importante destacar que los datos que respaldan muchas de estas intervenciones revolucionarias son escasos y son esenciales estudios más amplios para evaluar la eficacia.