Los investigadores, del Centro Médico de la Universidad de Nimega (Países Bajos), recogieron muestras sanguíneas de 45 madres y de sus hijos con espina bífida, así como de 83 madres con sus respectivos hijos que conformaron el grupo control, para evaluar los niveles séricos de folatos y de folatos en hematíes, vitamina B12 sérica, vitamina B6 y homocisteína plasmática total.
Las madres con niños con espina bífida presentaban concentraciones de vitamina B12 que eran un 21% inferiores a las de las madres del grupo control, con niveles medios de 223 y 283 pmol/L, respectivamente. Y las concentraciones de 185 pmol/L o inferiores se asociaron a un riesgo 3,5 veces superior de espina bífida. No se registraron diferencias significativas entre los dos grupos en cuanto a folatos, folatos en hematíes y homocisteína total. Tampoco entre los niños en ninguno de los parámetros en estudio.
Para los autores, estos resultados sugieren que en las madres con niveles bajos de vitamina B12 podría ser beneficioso el uso de suplementos vitamínicos durante el embarazo, lo que deberá corroborarse en futuras investigaciones.
Webs Relacionadas
Centro Médico de la Universidad de Nimega
http://www.umcn.nl/homepage/
American Journal of Obstetrics and Gynecology
http://www.sciencedirect.com/