El agua potable sigue siendo un lujo inalcanzable para unos 1.100 millones de personas, según el segundo Informe de las Naciones Unidas (ONU) sobre el Desarrollo de los Recursos Hídricos en el Mundo, divulgado de cara al IV Foro Mundial del Agua, que se celebrará del 16 al 22 de marzo en la capital mexicana.
La ONU advierte de que la región del África subsahariana no logrará reducir a la mitad el número de personas sin acceso al agua potable salubre en el 2015, una de las Metas del Milenio de la ONU.
Respecto al cumplimiento de otros objetivos establecidos por las Naciones Unidas ese año, como la reducción a la mitad del número de habitantes del planeta privados de instalaciones de saneamiento básicas, la evaluación también es negativa
2.600 millones sin saneamiento
El documento, fruto de la labor conjunta de 24 organismos y de la ONU, unos 2.600 millones de personas de los países más pobres del mundo carecen de instalaciones de saneamiento básicas. Más de la mitad de ellos vive China e India.
El informe presenta un panorama detallado de la situación del agua en todas las regiones y en la mayoría de los países del mundo, y efectúa un seguimiento de los progresos realizados hacia la consecución de los objetivos de desarrollo del Milenio.
En el prefacio de la publicación, el secretario general de la ONU, Kofi Annan, urge a todos los países a "trabajar de cerca y juntos para promover el respeto de los ecosistemas naturales de los que dependemos, y asegurar que todas las personas tengan acceso al agua pura y a los beneficios que hace posible".
Asimismo, el director de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), Koichiro Matsuura, subraya en el prólogo que el problema del agua toca el "bienestar básico de los humanos (comida, seguridad y salud)", cuestiones de "desarrollo económico (industria y energía)", y "la preservación de los ecosistemas naturales en los que finalmente todos dependemos".
Carencia y mala gestión
El informe culpa de las carencias actuales de agua en el mundo a la gestión deficiente, la corrupción, la falta de instituciones adecuadas, la inercia burocrática, el déficit de nuevas inversiones en la creación de capacidades humanas y la escasez de infraestructuras físicas. La mala calidad del agua es una de las principales causas de las pobres condiciones de vida y de los problemas de salud en el mundo. En 2002 las enfermedades diarreicas y el paludismo acabaron con la vida de unos 3,1 millones de seres humanos. La ONU considera que cada año se podría salvar la vida de 1,6 millones de personas si se les ofreciera la posibilidad de acceder a agua potable e instalaciones higiénicas.
La ONU también alerta sobre el hecho de que la calidad del agua disminuye en muchas regiones del mundo y que se deterioran "rápidamente" la diversidad de los ecosistemas y las especies vegetales y animales de agua dulce. Como ejemplo el texto cita el caso del lago Chad, en África, cuyo volumen de aguas ha disminuido en un 90% desde 1960 por el pastoreo excesivo, la deforestación y los proyectos de regadío incompatibles con el medio ambiente.
Causa de desastres naturales
De otra parte, los investigadores concluyeron que el 90% de los desastres naturales son consecuencia de fenómenos que guardan relación con el agua y que "su número y frecuencia van en aumento". En este sentido, el estudio denuncia que dos de cada cinco habitantes del planeta viven en zonas vulnerables a las inundaciones y a la elevación del nivel del mar. Entre los países que corren más riesgos están Bangladesh, China, Filipinas, la India, Pakistán, los Países Bajos y Estados Unidos.