Las mujeres que tienen síndrome metabólico están en alto riesgo de desarrollar enfermedad arterial periférica (EAP), una afección que eleva de forma dramática el riesgo de enfermedad cardiaca y accidente cerebrovascular.
Mediante el uso de datos de más de 27,000 mujeres que formaron parte del Estudio de salud de la mujer, los investigadores identificaron a las participantes que tenían síndrome metabólico, una colección de síntomas que incluye obesidad abdominal, presión arterial alta, bajo colesterol HDL (el "bueno"), niveles elevados de triglicéridos y resistencia a la insulina.
Se consideraba que las mujeres tenían síndrome metabólico si presentaban tres o más de estos síntomas.
Las mujeres que tenían síndrome metabólico se enfrentaban a un riesgo 62 por ciento mayor de desarrollar enfermedad arterial periférica en comparación con las que no tienen síndrome metabólico. Cada síntoma de síndrome metabólico elevaba el riesgo de EAP en 20 por ciento, halló el estudio.
Alrededor de ocho millones de estadounidenses tienen enfermedad arterial periférica, que afecta por lo general las arterias en la pelvis y las piernas. Los síntomas incluyen calambres y dolor o cansancio en los músculos de la cadera y de las piernas al caminar o subir escaleras, aunque no todo el que tiene EAP presenta síntomas. El dolor desaparece normalmente durante el reposo.
El estudio también encontró que las mujeres que tenían síndrome metabólico y EAP también presentaban niveles elevados de dos marcadores de inflamación, la proteína C reactiva de alta sensibilidad y la molécula de adhesión intercelular soluble 1.
El estudio aparece en la edición del 8 de septiembre de Circulation: Journal of the American Heart Association.
La relación entre el síndrome metabólico y la EAP en las mujeres quedó parcialmente explicada por el aumento de la inflamación y la disfunción endotelial vascular, de acuerdo con investigadores del Hospital Brigham and Women's de Boston.
Aunque la mayoría de los estudios sobre el síndrome metabólico han estudiado la enfermedad arterial coronaria y el accidente cerebrovascular, este estudio está entre los primeros que analizan el riesgo de desarrollar EAP, señalaron los investigadores.