Los adultos jóvenes que tienen una tiroides hiperactiva se enfrentan a un riesgo mucho mayor de accidente cerebrovascular (ACV) que las personas que no sufren de la afección, señalan investigadores taiwaneses.
"Se trata de un análisis bien controlado, y los pacientes de hipertiroidismo deben recibir un tratamiento puntual para prevenir estas complicaciones", señaló el Dr. Majaz Moonis, director de servicios de accidente cerebrovascular en la Universidad de Massachusetts, en Worcester.
Ya sea que el hipertiroidismo provoque el ACV o que sea un marcador de otros riesgos se desconoce, pero Moonis afirmó que los resultados del estudio no son sorprendentes. "Los pacientes de hipertiroidismo tienen una mayor hipertensión y fibrilación auricular, algo bien documentado", dijo.
Para el estudio, que aparece en la edición en línea del 1 de abril de la revista Stroke, un equipo liderado por Herng-Ching Lin de la Facultad de Administración de la atención de salud del Colegio de Medicina de la Universidad de Medicina de Taipéi, recolectó datos sobre 3,176 adultos jóvenes que tenían hipertiroidismo. Compararon a estas personas con 25,408 personas similares que no tenían hipertiroidismo. La edad promedio era de 32 años.
Los investigadores dieron seguimiento a los pacientes durante cinco años. Durante ese periodo, 198 personas (0.7 por ciento) sufrieron un ACV, incluso 31 (uno por ciento) de los pacientes de hipertiroidismo, y 167 (0.6 por ciento) de los que no lo sufrían, encontraron los investigadores.
Tras tomar en cuenta factores como la edad, el sexo, los ingresos, el ambiente, la presión arterial alta, la diabetes, un ritmo cardiaco irregular conocido como fibrilación auricular, el colesterol alto, la enfermedad de la arteria coronaria y si tomaban medicamentos para tratar problemas del ritmo cardiaco, el riesgo de sufrir un accidente cerebrovascular fue 44 por ciento más elevado entre los pacientes de hipertiroidismo, frente a los que no lo sufrían, encontró el equipo de Lin.
Este es el primer estudio en documentar una relación entre el ACV y una tiroides hiperactiva en personas menores de 45 años, aseguró.
"Nuestro estudio muestra una asociación entre el hipertiroidismo y el riesgo de ACV isquémicos [un accidente cerebrovascular causado por un coágulo sanguíneo] subsiguientes entre adultos jóvenes", apuntó Lin en una declaración. "Una evaluación más rigurosa en estudios futuros tal vez ayude a aclarar las causas del ACV en ese grupo de edad. Nuestros resultados indican una necesidad de evaluar la función tiroidea y detectar el hipertiroidismo en exploraciones para identificar las causas del ACV isquémico en la gente joven".
Lin señaló que hasta el dos por ciento de la población mundial tiene una tiroides hiperactiva, lo que acelera el metabolismo y causa sudoración, pérdida de peso, diarrea y nerviosismo.
En los adultos mayores, el hipertiroidismo se asocia con la fibrilación auricular, que puede llevar a un ACV o a muerte cardiaca repentina. Sin embargo, esta relación no se había documentado en adultos más jóvenes, apuntó Lin.
Otro experto, el Dr. Larry B. Goldstein, director del Centro de accidente cerebrovascular de la Duke, no cree que este estudio muestre una relación causal entre el hipertiroidismo y el ACV.
"La pregunta es si esto es real y cuál es el mecanismo potencial", planteó. "El riesgo general parece ser relativamente bajo. Tendría que haber 250 personas con hipertiroidismo para que resulte un ACV".
Tratar el hipertiroidismo probablemente eliminaría los factores de riesgo asociados con el riesgo de ACV, añadió Goldstein.
FUENTES: Larry B. Goldstein, M.D., director, Duke University Stroke Center, Durham, N.C.; Majaz Moonis, M.D., director, stroke services, University of Massachusetts, Worcester; April 1, 2010, Stroke, online