Las arterias de los niños obesos tienen un grado de rigidez que se observa normalmente en adultos con enfermedad cardiaca, según un nuevo estudio.
Investigadores canadienses evaluaron a 63 niños obesos, con una media de edad de 13 años, y 55 niños de peso normal. Los niños obesos tuvieron resultados anormales en un ultrasonido del corazón y los vasos sanguíneos que midió la rapidez con que la sangre fluía por todo el cuerpo.
De especial interés fue la rigidez de la aorta, la arteria más grande del cuerpo, que transporta sangre rica en oxígeno a todas las otras arterias.
"La aorta normal tiene cualidades elásticas que protege el flujo de sangre. Cuando se pierde esa elasticidad, resulta en rigidez aórtica, un signo de desarrollo de enfermedad cardiovascular", dijo en un comunicado de prensa de la Heart and Stroke Foundation of Canada el autor del estudio, el Dr. Kevin Harris, del Hospital Pediátrico BC de Vancouver. "La rigidez aórtica se asocia con eventos cardiovasculares y muerte prematura".
Es como si el proceso de envejecimiento se hubiera acelerado en las aortas de los niños obesos, agregó.
Investigaciones futuras deberían evaluar si la rigidez arterial en los niños obesos se puede revertir con un tratamiento como mejor dieta y ejercicio, señaló Harris.
Los hallazgos del estudio, que se tenía previsto presentar el lunes en el Congreso Cardiovascular Canadiense, son alarmantes, señaló la vocera de la Heart and Stroke Foundation, la Dra. Beth Abramson.
"Sabemos que existe una relación entre el estilo de vida poco saludable y las enfermedades del corazón," advirtió en el comunicado de prensa. "Nuestros niños están en riesgo. La mala nutrición y la inactividad amenazan su salud y bienestar. Tenemos que repensar las normas de estilo de vida que hemos aceptado como sociedad para proteger la salud futura de nuestros niños".
FUENTE: Heart and Stroke Foundation of Canada, news release, Oct. 25, 2010