Por C. Vidya Shankar
NUEVA YORK (Reuters Health) - En los niños pequeños con VIH, esperar para iniciar la terapia antirretroviral (ARV) hasta reunir los criterios clínicos reduciría la supervivencia, reveló un estudio realizado en Tailandia.
En tanto, el mismo enfoque en niños más grandes no afectaría la supervivencia.
La probabilidad de sobrevivir cinco años en los chicos que comenzaron la terapia ARV al reunir los criterios clínicos fue del 76,7 por ciento, comparado con el 94,8 por ciento entre los niños que iniciaron la terapia a mayor edad.
Esto respalda las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de iniciar la terapia ARV inmediatamente después del diagnóstico en los menores de 2 años, opinó la doctora Intira J. Collins, autora principal de la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres.
"Los resultados son más aplicables a los países en desarrollo, ya que la mayoría de las naciones desarrolladas brindan el tratamiento inmediato a los bebés con VIH", indicó la experta.
"En el estudio, el acceso a la terapia en Tailandia era limitado. Los niños que comenzaron la terapia antes del año de vida eran aquellos con necesidad evidente de tratamiento", dijo Collins.
Pero "cada vez hay más pruebas de que los niños responden más a la terapia cuando su estado clínico e inmunológico es mejor, lo que sugiere que no se gana nada con esperar para iniciar el tratamiento", destacó la autora.
En el estudio prospectivo publicado en Clinical Infectious Diseases, el equipo analizó la supervivencia a cinco años de 578 niños infectados con VIH por transmisión vertical -o de madre a hijo-, atendidos en hospitales de Tailandia.
De esos niños, 111 participaron desde el nacimiento, mientras que el resto era mayor al ingresar al estudio e iniciar la terapia ARV.
En general, 59 participantes comenzaron la terapia antes del año de vida y los 519 restantes, después del año; 29 bebés y 216 niños completaron el seguimiento a cinco años. En ese período, murieron 13 bebés que comenzaron la terapia ARV antes del año de vida y 29 que lo hicieron más tardíamente.
La probabilidad de supervivencia fue del 84,3 por ciento al año y del 76,7 por ciento a los cinco años en el grupo tratado en la infancia temprana y del 95,7 y el 94,8 por ciento, respectivamente, en los niños más grandes.
Un análisis de variables múltiples demostró que el riesgo de morir fue más alto en los bebés tratados con la terapia ARV antes de los 12 meses de edad.
"El momento óptimo de inicio de la terapia en bebés y niños de algún modo depende de la edad y de la condición inmunológica de cada niño", dijo el profesor Michael Brady, jefe de Pediatría del Hospital Nacional de Niños de Columbus, en Ohio. Brady no participó del estudio.
Brady agregó que los bebés deberían comenzar a recibir la terapia ARV inmediatamente después del diagnóstico.
Pero los niños mayores pueden esperar hasta reunir los criterios clínicos porque la enfermedad tiende a no avanzar tan rápidamente, comentó Brady, quien precisó que el acceso a la atención, el cumplimiento del tratamiento y la respuesta inicial a la terapia son algunos indicadores de buenos resultados.
"Los bebés deben empezar a recibir la terapia en cuanto se comprueba que están infectados con VIH, idealmente dentro de los primeros tres meses de vida y antes de que desarrollen síntomas o se vuelvan inmunocomprometidos", concluyó Collins.
FUENTE: Clinical Infectious Diseases, 2010