María Sainz | Javier Beneytez
Una mujer de 43 años. Este caso, pionero en Europa, pone sobre la palestra un tipo de intervención en alza y dispuesta a robotizarse en un futuro.
Cada vez son más los equipos médicos que se especializan en las técnicas mínimamente invasivas. El grupo de Antonio María de Lacy apuesta, desde el citado centro catalán, por ir aumentando progresivamente la dificultad de estas cirugías. "Ya no sólo se trata de extirpar la vesícula", apunta a ELMUNDO.es.
Con esta máxima dirigió el pasado cinco de noviembre la intervención en la que logró extraer un tumor tipo GIST de 8 cm a través del conducto vaginal de su paciente, que fue dada de alta tres días después. "Ya se habían realizado dos operaciones similares en Japón, pero en ambas el tumor era más pequeño, de unos dos centímetros", añade.
Lo cierto es que España está bastante bien situada en cuanto a NOTES (cirugía endoscópica por orificios naturales, en sus siglas en inglés) se refiere. Otra figura en la materia es José Francisco Noguera, jefe del servicio de Cirugía General del Hospital Son Llátzer (Mallorca), quien actualmente dirige un trabajo para probar nuevos endoscopios más flexibles.
"Se trata de miniaturizar los instrumentos; que éstos puedan manipularse mejor; que sean rotatorios; que tengan articulaciones; y que mantengan el mismo nivel de seguridad", explica este experto.
Con estas mejoras se pretende combatir la insuficiente movilidad de determinadas herramientas quirúrgicas con la que se encuentran los cirujanos. Aunque puedan visionar el interior del paciente, no siempre alcanzan todos los ángulos desde un mismo orificio, lo que 'obliga' a realizar incisiones en el abdomen. Estas nuevas 'entradas' también son necesarias para introducir todo el instrumental.
Como él mismo explica, "actualmente no se realiza la técnica NOTES de forma pura sino híbrida". Pero, a pesar de ello, los especialistas destacan sus amplios beneficios frente a la cirugía abierta (menos efectos secundarios, recuperación más rápida) y la laparoscopia (que requiere más incisiones y de mayor tamaño).
"La estética es lo de menos. Lo más importante es que aparecen menos complicaciones, como cuando se produce una infección. Además, cuantas más incisiones, mayor es el riesgo de aparezcan hernias o adherencias", recalca el doctor Noguera.
El ombligo y el recto
Este médico, que dirige sendos grupos de investigación sobre esta línea en el Instituto Universitario de Investigación en Ciencias de la Salud (IUNICS), cuenta con bastante pericia en la denominada 'cirugía de puerto único'. A través del ombligo, y de un par de incisiones abdominales, puede, por ejemplo, extraer la vesícula en unos 30 minutos.
"Es una técnica que nos aparta del objetivo final de no tener incisiones externas pero ofrece beneficios sobre la laparoscopia (que es la técnica que actualmente está más establecida) con un mínimo coste de desarrollo (se pueden emplear un laparoscopio rígido)", recalca.
Por otro lado, el doctor de Lacy, jefe del servicio de Cirugía Gastrointestinal del Clínic, presume de haber sido el primero en extirpar una vesícula por la boca y un cáncer de colon por vía anal.
"El futuro pasará por robotizar la técnica y también por establecer una igualdad entre sexos. Obviamente, la vagina no es una vía de entrada válida para el hombre así que estamos estudiando la viabilidad de introducirnos por el recto", concluye.