Por Kerry Grens
NUEVA YORK (Reuters Health) - Un estudio demuestra que las personas vacunadas después de que se les diagnostica un trastorno nervioso llamado síndrome de Guillain-Barré no vuelven a tener brotes de la enfermedad.
"Las personas con el síndrome de Guillain-Barré pueden usar las vacunas", dijo el doctor Roger Baxter, autor principal y coeditor del Centro para el Estudio de Vacunas de Kaiser Permanente, en Estados Unidos.
Guillain-Barré es una enfermedad autoinmune rara que causa debilidad muscular y parálisis. No tiene cura, pero existen tratamientos para aliviar los síntomas.
Cada año, una o dos de cada 100.000 personas desarrollan el síndrome. Se desconoce la causa, pero Baxter comentó que existen pruebas de que varios casos están asociados con el uso de una vacuna contra el brote de gripe porcina durante los años 70.
"Es probable que exista una relación con una vacuna antigripal", dijo Baxter, aunque agregó que estudios sobre el síndrome de Guillain-Barré y otras vacunas no hallaron una relación. "No existiría otra vacuna relacionada que no sea la utilizada en 1976", añadió.
De hecho, estudios recientes hallaron que la gripe estaría asociada con el síndrome.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC por su sigla en inglés) recomiendan no vacunar contra la gripe a los pacientes que hayan tenido los síntomas del síndrome de Guillain-Barré dentro de las seis semanas posteriores a una aplicación previa de la vacuna antigripal.
Eso se aplica a un subgrupo muy pequeño de pacientes con el síndrome, pero la preocupación de Baxter es que algunos médicos incluyan a toda persona que haya tenido la enfermedad.
Entonces, el equipo de Baxter reunió las historias clínicas de 550 personas tratadas en Kaiser Permanente de California del Norte e indagó qué inmunizaciones habían recibido y cuántas recurrencias del síndrome de Guillain-Barré habían sufrido durante más de una década.
En ese grupo, 279 habían recibido por lo menos una vacuna después del diagnóstico, incluidos 107 que habían recibido una vacuna antigripal. En total, los pacientes recibieron casi 1.000 vacunas y ninguno tuvo un brote de la enfermedad en los dos meses posteriores a la vacuna.
Una sola persona tuvo un brote a los cuatro meses de una vacuna combinada contra sarampión, paperas y rubeola, según publica Clinical Infectious Diseases.
Dieciocho pacientes pertenecían a la categoría de la recomendación de los CDC contra la inmunización antigripal; dos de ellos recibieron una vacuna antigripal más adelante sin signos de recurrencia del síndrome.
Baxter, que con otro de los coautores recibió fondos de la industria, dijo que aunque estos resultados no prueban que exista una relación entre la vacuna antigripal y las crisis del síndrome de Guillain-Barré, todavía son varios los casos como para confirmar que no existe un riesgo.
Aún así, "la gran mayoría de los pacientes puede aplicarse la vacuna antigripal", dijo el autor.
Los CDC financiaron el estudio.
FUENTE: Clinical Infectious Diseases, online 19 de enero del 2012