Por Amy Norton
NUEVA YORK (Reuters Health) - Un estudio pequeño sugiere que las personas que padecen migrañas sentirían que el tiempo pasa más lentamente que en la realidad.
Esta diferencia en la percepción del tiempo sería sutil, ya que se traduce en milisegundos. Pero validaría una queja habitual de estos pacientes, que en la consulta dicen que a veces se sentirían algo "fuera" de tiempo, según opinó un especialista en cefaleas ajeno al estudio.
Los resultados, publicados en la revista Headache, surgen de 27 adultos con migrañas y otros 27 participantes sin dolores de cabeza (controles); todos tenían la misma edad.
Los investigadores realizaron una prueba de percepción del tiempo en la que estimaron la cantidad de veces que una serie de rectángulos aparecían en una pantalla de computadora. A veces, la imagen aparecía durante 600 milisegundos (seis décimas de segundo), 3 segundos o 5 segundos.
En general, el grupo que padecía migrañas sobreestimaba la ventana temporal de 600 milisegundos. Pensaban que había durado el doble de tiempo (unos 1,2 segundos, en promedio), mientras que la estimación del grupo de control era de unos 0,9 segundos.
Esa es una diferencia pequeña, pero suficiente para respaldar la noción de que "la migraña altera la función cognitiva", escribe el equipo de Kai Wang, del Centro Médico Anhui, en Hefei, China.
La doctora Jennifer Kriegler, profesora asociada de neurología de la Escuela Lerner de Medicina en la Clínica de Cleveland, coincidió: "Muchos pacientes con migrañas dicen que cuando pasan por un período de ataques, sienten que están dentro de una nube de niebla. Perciben que no están procesando la información claramente".
A pesar de su tamaño pequeño, Kriegler, que no participó del estudio, elogió su diseño. Señaló que sugiere también que la sensación de confusión de los pacientes no es sólo por el dolor. "Sería por las diferencias en el funcionamiento del cerebro", dijo Kriegler.
Se estima que el 11 por ciento de la población mundial tuvo una migraña en el último año. Sólo en Estados Unidos, su tratamiento y la pérdida de productividad le cuestan al sistema unos 20.000 millones de dólares anuales.
Las migrañas producen un dolor pulsátil e intenso en una zona de la cabeza, junto con un aumento de la sensibilidad a la luz y el sonido; pueden causar náuseas o vómitos.
El 30 por ciento de las personas con migrañas recurrentes sienten alteraciones sensoriales inmediatamente después de la aparición del dolor. Esas alteraciones, o aura, suelen ser visuales (flashes de luz o puntos ciegos), pero también pueden incluir molestias como el entumecimiento, hormigueo o dificultad para hablar o comprender lo que se dice.
Se desconoce qué las causa, pero se deberían a una actividad cerebral anormal. Y, como en el nuevo estudio, algunos expertos las asociarían, en especial a las migrañas con aura, a alteraciones de la memoria, el tiempo de reacción y de otras habilidades cognitivas.
En el estudio, las personas con migraña percibían distinto la ventana temporal de 600 milisegundos, pero no las más prolongadas de 3 y 5 segundos. Para Kriegler, se necesitan estudios más grandes para determinar si las diferencias surgen sólo en milisegundos.
La experta consideró "significativo" que los participantes con migrañas no sintieran dolores de cabeza durante las pruebas. De modo que opinó que aun entre los ataques migrañosos existiría una diferencia en el funcionamiento del cerebro.
Pero, "¿es esto algo que modificará el rendimiento cotidiano de los pacientes? Quizás no", dijo Kriegler. O, por lo menos, no en el corto plazo, agregó. Para ella, los resultados "validan" de algún modo la queja de los pacientes de que las migrañas "los dejan fuera de juego".
FUENTE: Headache, online 23 de julio del 2012