Por Genevra Pittman
NUEVA YORK (Reuters Health) - Un estudio demostró que los pacientes con psoriasis tratados con fármacos como Etanercept y Adalimumab son menos propensos a tener un infarto que aquellos tratados sólo con ungüentos más suaves.
El Etanercept y el Adalimumab, conocidos como inhibidores de la necrosis tumoral (TNF, por su nombre en inglés), reducirían la inflamación sistémica, lo que controlaría los riesgos cardíacos y los síntomas de la psoriasis.
Otras terapias, como la ciclosporina, el metotrexato y la fototerapia UV también disminuyeron el riesgo cardíaco, comparado con el uso de ungüentos o con personas que no recibieron ningún tratamiento.
"Todo esto sugiere que el estado inflamatorio crónico que produce la psoriasis tendría un papel en los males cardíacos", dijo el doctor Robert Kirsner, jefe de dermatología del hospital de la University of Miami, en Florida.
Los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos estiman que cerca del 3 por ciento de los adultos del país tiene psoriasis, que produce placas cutáneas que causan picazón y dolor.
El equipo encabezado por el doctor Jashin Wu, del Centro Médico de Kaiser Permanente, en Los Angeles, revisó las historias clínicas de casi 9.000 pacientes con psoriasis de ese sistema de salud: unos 1.700 habían utilizado un inhibidor de TNF durante por lo menos dos meses, a 2.100 les habían recetado otros fármacos para la psoriasis o fototerapia UV, y 5.100 sólo habían usado remedios tópicos, como los ungüentos.
En los cuatro años siguientes, los pacientes tratados con cualquier tipo de medicamento tenían la mitad de riesgo de padecer un infarto que el grupo tratado sólo con ungüentos.
Cada año, tres de cada 1.000 usuarios de un inhibidor de TNF tuvieron un infarto, comparado con cuatro de cada 1.000 bajo otros fármacos o luz UV, y cerca de siete de cada 1.000 usuarios de remedios suaves.
El sistema inmunológico generaría una respuesta inflamatoria que causaría los síntomas de la psoriasis. En Archives of Dermatology, el equipo de Wu escribe que el tratamiento agresivo de esa inflamación también reduciría los riesgos cardíacos asociados y, así, disminuirían los infartos.
"No podemos concluir que (los fármacos para la psoriasis) reducirán los infartos, pero son un indicio", dijo Wu a Reuters Health.
El estudio tuvo algunas limitaciones, como la falta de información sobre la gravedad de la psoriasis en los pacientes y el uso de otros fármacos para el corazón.
Wu declaró haber recibido subsidios de empresas que producen inhibidores de TNF, aunque esos laboratorios no participaron del estudio.
Un obstáculo para el acceso a ciertos tratamientos de la psoriasis es su costo: los inhibidores de TNF cuestan unos 15.000 dólares por año o más, mientras que productos como el metotrexato cuesta casi 1.000 dólares por año.
Para Kirsner, los resultados sugieren que recibir el tratamiento es más importante que el tipo de fármacos recetado.
Los inhibidores de TNF tienen efectos adversos, como un aumento en el riesgo de padecer infecciones, mientras que otros fármacos pueden dañar el hígado o los riñones.
"También está el costo de no tratar la psoriasis. Y ese costo puede ser un aumento del riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares. De modo que ignorar la psoriasis no sería una decisión adecuada", agregó Kirsner.
FUENTE: Archives of Dermatology, online 20 de agosto del 2012.