Por Genevra Pittman
NUEVA YORK (Reuters Health) - Una revisión de la literatura médica revela que los abortos son tan seguros cuando los realizan parteras, enfermeras entrenadas y asistentes médicos que cuando están a cargo de un médico experimentado.
Un equipo analizó cinco estudios que habían comparado las complicaciones y los efectos adversos de abortos en el primer trimestre del embarazo de 9000 mujeres, según el profesional que los había realizado. En general, no halló diferencias.
"Dado que el acceso a un aborto es cada vez más limitado, incluir a otros profesionales de la salud entre los que pueden realizarlo es clave porque cada vez habrán más barreras", sostuvo Amy Levi, profesora de asistencia del parto de University of New Mexico, Albuquerque.
Contar con enfermeras y parteras entrenadas en la realización de abortos también permitiría que algunas mujeres reciban atención antes de consultar al médico y Levi aseguró que un acceso temprano se traduce en menos complicaciones y mejores resultados. Esto se aplica especialmente a los países en desarrollo, donde son pocos los médicos que practican abortos.
En estudios realizados en clínicas y hospitales de Asia, Africa y Estados Unidos, los procedimientos a cargo de enfermeras, parteras y médicos compartieron tasas similares de abortos incompletos, determinación errónea de la edad fetal y complicaciones como hemorragias y lesiones uterinas.
Por ejemplo: en un estudio sobre 1400 mujeres que se habían realizado un aborto en Vermont o New Hampshire, el 2,2 por ciento de los procedimientos a cargo de un asistente médico y el 2,3 por ciento de los abortos realizados por médicos tuvieron complicaciones.
El equipo de Nathalie Kapp, de la Organización Mundial de la Salud, considera que los resultados no son aplicables a las enfermeras y las parteras que practican abortos sin acceso rápido a servicios de ER ni a los abortos que se realizan después del primer trimestre, según publica en BJOG: An International Journal of Obstetrics and Gynaecology.
El Instituto Guttmacher estima que 39 estados exigen que los abortos los realicen médicos con licencia y Levi, que no participó del estudio, señaló que sólo unos pocos permiten que otro personal de la salud practique abortos quirúrgicos y farmacológicos.
Pero consideró que los resultados son "muy poderosos" en otras regiones del mundo, donde el aborto no seguro es una de las principales causas de muerte materna y los profesionales no médicos superan ampliamente la cantidad de médicos.
También coinciden con sus expectativas después de haber trabajado en un programa de California para entrenar enfermeros, parteras y asistentes médicos en la práctica de abortos seguros.
"El acceso a un aborto seguro es determinante para reducir la mortalidad materna en el mundo", dijo Levi. "Esto debe ser parte de las conversaciones sobre la atención de la salud femenina y esta información ayudará."
FUENTE: BJOG: An International Journal of Obstetrics and Gynaecology, online 20 de agosto del 2012