Después de un reemplazo de cadera, no se observó que hubiera ninguna desventaja por el tratamiento de bajo costo.
La aspirina parece ser tan buena como los anticoagulantes más caros y potentes en la prevención de la formación de coágulos sanguíneos después de una operación quirúrgica de reemplazo de cadera, según una nueva investigación.
Las personas a las que se les implanta una cadera artificial tienen un gran riesgo de formación de coágulos sanguíneos, de modo que tras la cirugía podrían sufrir, por ejemplo, una trombosis venosa profunda y un embolismo pulmonar. Para evitar esto, los médicos normalmente recetan medicamentos anticoagulantes, como, por ejemplo, heparina de bajo peso molecular, que se suministra con inyecciones, o rivaroxaban, un medicamento más reciente, que se toma con una pastilla.
Pero ese antiguo medicamento de botiquín, la aspirina, también tiene propiedades anticoagulantes. Y los investigadores canadienses se preguntaron si este medicamento sencillo y barato también podría evitar los coágulos después de una cirugía importante.
Compararon los medicamentos durante cuatro semanas, tras 10 días de tratamiento con heparina inmediatamente después de la cirugía.
Los investigadores hallaron que los dos medicamentos eran igual de efectivos y seguros. En lo que se diferencian mucho es en el costo.
"La heparina de bajo peso molecular y el nuevo anticoagulante, el Xarelto, tienen un precio parecido; los dos son varios cientos de veces más caros que la aspirina", afirmó el autor principal del estudio, el Dr. David Anderson, profesor y jefe del departamento de medicina en la Universidad de Dalhousie, en Halifax, Nueva Escocia.
"Dado el bajo costo de la aspirina y sus ventajas, es una alternativa razonable a la heparina de bajo peso molecular cuando se usa de la manera en que se diseñó este ensayo", comentó Anderson.
Otro experto afirmó que los resultados del estudio, publicado en la edición del 4 de junio de la revista Annals of Internal Medicine, están en línea con algunas observaciones anteriores. "Después de iniciar el tratamiento con un anticoagulante, dar entonces aspirina a estos pacientes para prevenir [coágulos sanguíneos graves] es igual de bueno", afirmó Jawed Fareed, profesor de farmacología y patología y director de la unidad de investigación sobre hemostasia y trombosis del Centro Médico de la Universidad de Loyola en Maywood, Illinois.
Para llevar a cabo el estudio, Anderson y colegas reclutaron a 778 pacientes que se sometieron a una operación quirúrgica de reemplazo de cadera entre 2007 y 2010. Todos se inyectaron heparina (dalteparina) durante 10 días tras la operación. Después, fueron repartidos en dos grupos de forma aleatoria durante cuatro semanas más de terapia anticoagulante. La mitad de ellos siguieron con las inyecciones de heparina, y la otra mitad tomó una dosis baja (81 miligramos) de aspirina al día.
Cinco personas que tomaban dalteparina y una que tomaba aspirina sufrieron un coágulo sanguíneo. La diferencia absoluta entre ambas terapias fue del uno por ciento. Cinco personas que tomaban dalteparina padecieron eventos de sangrado lo suficientemente graves como para necesitar tratamiento, frente a dos de las que tomaban aspirinas.
Anderson indicó que la diferencia en los eventos de sangrado no era significativa desde el punto de vista estadístico, pero la aspirina tenía una tendencia a ser la alternativa más segura. No obstante, es demasiado temprano como para afirmar de forma definitiva que la aspirina podría causar menos eventos de sangrado, aclaró.
Anderson afirmó que los investigadores tuvieron que detener el estudio antes de lo previsto porque no pudieron reclutar la cantidad de pacientes que deseaban. Mientras el estudio estaba en marcha se aprobó el Xarelto, y como es una pastilla en lugar de una inyección como la dalteparina (de la marca Fragmin), fue difícil encontrar voluntarios para la parte del ensayo de las inyecciones múltiples.
Los investigadores ahora están duplicando el estudio, pero esta vez comparan el Xarelto con la aspirina. También están incluyendo a personas con cirugía de reemplazo de rodilla, y solo están usando cinco días de tratamiento inicial con el anticoagulante más potente.
"Si la aspirina resulta ser tan buena como el Xarelto, dada la cantidad de operaciones quirúrgicas de [reemplazos] de articulaciones que se realizan en Norteamérica, podría ahorrar al sistema de atención de salud millones de dólares si se demuestra que al menos es igual de efectiva", planteó Anderson.
Fareed comentó que no usaría la aspirina inmediatamente después de la cirugía. "Pero una vez pasada la fase inicial, creo que la aspirina es una buena opción. Y confío en que habrá menos eventos de sangrado con la aspirina", opinó Fareed.
Afirmó que los médicos quizá no pasen a usar la aspirina de inmediato, y probablemente esperarán a que los grupos médicos escriban nuevas directrices que sugieran que la aspirina como el tratamiento estándar. Pero ciertamente es un tema que los pacientes podrían comentar con su médico antes de la cirugía, sugirió.
"Pienso que hemos demostrado que una terapia muy sencilla, barata y oral parece ser tan buena como un agente anticoagulante más caro, más potente y menos conveniente para la prevención de los coágulos sanguíneos tras un reemplazo de cadera", concluyó Anderson.
FUENTES: David Anderson, M.D., head, department of medicine, Capital Health, and professor, Dalhousie University, Halifax, Nova Scotia, Canada; Jawed Fareed, Ph.D., professor of pharmacology and pathology, and director, hemostasis and thrombosis research unit, Loyola University Medical Center, Maywood, Ill.; June 4, 2013, Annals of Internal Medicine.
¿Aspirina, heparina o rivaroxaban?
Prevención del tromboembolismo
La aspirina sirve para la prevención de coágulos igual que los anticoagulantes más costosos, según un estudio.
Fuente: Medlineplus