Robert Preidt
Ciertos cambios en el estilo de vida podrían reducir mucho el riesgo de accidente cerebrovascular (ACV), según un estudio reciente.
Los investigadores calcularon el riesgo de ACV entre casi 23,000 estadounidenses negros y blancos a partir de los 45 años de edad. El riesgo se evaluó mediante el uso de los factores de salud "Life's Simple 7" (algo así como las 7 cosas sencillas de la vida) de la Asociación Americana del Corazón (American Heart Association): ser activo, controlar el colesterol, comer una dieta saludable, gestionar la presión arterial, mantener un peso saludable, controlar la glucemia y no fumar.
Durante los cinco años de seguimiento, ocurrieron 432 ACV entre los participantes. Los siete factores desempeñaban un rol importante en la predicción del riesgo de ACV, pero la presión arterial era la más importante, según el estudio, que aparece en la edición del 6 de junio de la revista Stroke.
"En comparación con aquellos cuya presión arterial está en mal estado, los que estaban en el ideal tenían un riesgo de ACV futuros un 60 por ciento más bajo", aseguró en un comunicado de prensa de la revista la autora principal del estudio, la Dra. Mary Cushman, profesora de medicina de la Universidad de Vermont, en Burlington.
Cushman y colegas también hallaron que las personas que no fumaban o que habían dejado de fumar hacía más de un año antes del inicio del estudio tenían un riesgo de ACV un 40 por ciento más bajo.
Para el estudio, los investigadores calificaron las puntuaciones de Life's Simple 7 de los participantes como inadecuado (de 0 a 4 puntos), promedio (de 5 a 9 puntos) u óptimo (de 10 a 14 puntos). Cada aumento de un punto se asociaba con un riesgo de ACV un 8 por ciento más bajo. Las personas con puntuaciones óptimas tenían un riesgo un 48 por ciento más bajo que las que tenían puntuaciones inadecuadas, y las que tenían puntuaciones promedio tenían un riesgo un 27 por ciento más bajo.
En general, los negros tenían unas puntuaciones más bajas que los blancos, pero la asociación entre las puntuaciones y el riesgo de ACV fue similar en ambas razas.
"Esto respalda la importancia crítica de mejorar estos factores de salud, dado que los negros tienen unas tasas de mortalidad por ACV que son casi el doble que las de los blancos", planteó Cushman.
Cada año, unas 795,000 personas de EE. UU. sufren un ACV, que es la cuarta causa principal de muerte y una causa importante de discapacidad a largo plazo en el país, según la Asociación Americana del Corazón.
FUENTE: Stroke, news release