Por Kathryn Doyle
NUEVA YORK (Reuters Health) - Un nuevo estudio demuestra que vivir en una zona con menos cirujanos generales aumentaría el riesgo de que las personas con apendicitis lleguen al quirófano con una ruptura del apéndice.
"El estudio demuestra la importancia del acceso a la cirugía, en especial a la cirugía general, y que los problemas de acceso afectan realmente la salud de la gente", dijo el coautor del estudio, Thomas Ricketts, de la University of North Carolina, en Chapel Hill.
La ley de reforma del sistema de salud de Estados Unidos incluye una cláusula sobre el uso de incentivos económicos para aumentar la cantidad de médicos en sitios donde los profesionales son escasos, pero esos bonos sólo se aplican a sitios con muy pocos médicos de atención primaria.
La información que analizaron los autores mostró que entre el 2007 y el 2009 recibieron el alta de los hospitales de Carolina del Norte casi 30.000 pacientes con apendicitis; un cuarto había tenido una ruptura del apéndice.
La Agencia para la Investigación y la Calidad de la Atención revela que cada año, en Estados Unidos, se registran unas 95.000 rupturas de apéndices. Un estudio del 2008 había mostrado que una apendicectomía cuesta entre 10.000 y 18.000 dólares si hubo ruptura del apéndice.
Si la cirugía se realiza antes de la ruptura, a las 20 horas o menos del inicio del dolor abdominal, los pacientes se recuperan rápido. Si el apéndice estalló (a las 40 horas del inicio de los síntomas) podrían necesitarse más cirugías y más tiempo de recuperación, según detalla el Manual Merck.
Los autores compararon la cantidad de casos de apendicitis, y en especial las rupturas, con la cantidad de cirujanos generales en "las áreas de atención quirúrgica" del estado.
Observaron que contar con menos de tres cirujanos generales por cada 100.000 habitantes elevaba un 5 por ciento el riesgo de sufrir la ruptura del apéndice con respecto a las zonas con por lo menos cinco cirujanos, según publican en Annals of Surgery.
Pero en las áreas donde más cirujanos se necesitaban, la tasa de ruptura de apéndice era del 25 por ciento, comparado con el 24 por ciento en las zonas sin esa necesidad.
El doctor Edward Livingston, especialista en el uso de la ruptura del apéndice como un indicador de atención, pero que no participó del estudio, consideró que esa diferencia es muy pequeña como para sacar conclusiones.
Livingston, subeditor del contenido clínico de Journal of the American Medical Association, en Chicago, dijo que la lógica indica que las rupturas serían más comunes en las zonas rurales, pero que el estudio halló lo opuesto si los resultados son confiables.
Señaló que en las zonas rurales había menos cirujanos por extensión de la población, aunque no tuvieron en cuenta a los residentes, los asistentes y los enfermeros, que son parte del equipo de trabajo en los centros médicos urbanos.
Comentó que el mismo estudio, pero con más pacientes de más regiones, no mostraría diferencias entre los grupos y que tendría más sentido medir la demora entre la aparición de los síntomas y la entrada al quirófano en distintas áreas para determinar si los sitios con más demora coinciden con las zonas con menos cirujanos y, así, poder inferir que la falta de cirujanos induce una demora en la atención que provoca las rupturas.
"Deberían medir la demora para probar el argumento", indicó Livingston.
FUENTE: Annals of Surgery
La importancia del acceso a la cirugía
Asocian la falta de cirujanos con más apendicitis con ruptura
Cada año, en Estados Unidos, se registran unas 95.000 rupturas de apéndices.