Por Kathryn y Doyle
NUEVA YORK (Reuters Health) - En un estudio sobre casi un millón de niñas de Dinamarca y Suecia, un equipo halló que la vacuna contra el virus del papiloma humano no está asociada con problemas de salud en el corto y largo plazo.
La vacuna, que se administra en tres dosis en seis meses a niños y niñas de 12 años, protege de la infección del virus que causa el cáncer de cuello uterino.
"No existían dudas antes de nuestro estudio y, tampoco, surgieron nuevas preocupaciones después", dijo la autora principal del estudio, Lisen Arnheim-Dahlström, del Instituto Carolino de Estocolmo.
El equipo utilizó datos nacionales de ambos países para investigar a cuántas niñas de entre 10 y 17 años se les diagnosticó alguna de 53 enfermedades inmunológicas o neurológicas, como la celiaquía, la pancreatitis, la artritis reumática, la psoriasis y la narcolepsia.
Además, se analizó si aparecían coágulos inmediatamente después de la vacunación.
A más de 997.000 niñas se les diagnosticaron las enfermedades de la lista entre el 2006 y el 2010, y más de 296.000 de ellas habían recibido por lo menos una dosis de la vacuna. Unas 160.000 ya tenían las tres dosis.
Según demuestran los resultados publicados en BMJ, no existe una relación entre el tipo o la oportunidad de aparición de los trastornos y la vacunación en los seis meses previos o alguna vez.
La responsabilidad de la seguridad es mayor cuando se le está administrando un fármaco a población sana, según dijo el doctor Mark Schiffman, investigador principal del Instituto Nacional del Cáncer que no participó del estudio.
Aunque su investigación está orientada al cáncer de cuello uterino, Schiffman comentó que no hizo vacunar a su hija cuando se aprobó la vacuna.
Comentó que, a menudo, los ensayos clínicos para la aprobación de un fármaco son muy pequeños como para detectar si la administración de una dosis a millones de personas afectaría negativamente a una o dos. Ese tipo de asociaciones pequeñas sólo se pueden detectar una vez que el producto se aplicó en una población grande.
Desde su aprobación, en el 2006, ya se aplicaron más de 100 millones de dosis de la vacuna en el mundo.
"Estoy convencido -dijo Schiffman-. Les digo a mis amigos y familiares que la vacuna contra el VPH es segura." Ya hizo vacunar a su hija y lo recomendaría para todas las niñas.
"Aquí, en Australia, los médicos (y la comunidad) apoyaron el uso de la vacuna desde el principio", comentó la doctora Julia Brotherton por e-mail. "Había padres con dudas al principio porque era una vacuna nueva, pero ya no lo es y su efecto en Australia es significativo."
Brotherton es directora médica del Registro del Programa Nacional de Vacunación contra el VPH de Australia, donde se identificaron muy pocos casos de verrugas genitales en mujeres jóvenes desde la implementación de la vacuna y una reducción de las lesiones precancerosas de cuello uterino.
FUENTE: BMJ
Un estudio de Escandinavia
Demuestran la seguridad de la vacuna contra el VPH
No está asociada con problemas de salud en el corto y largo plazo.