Los niños que sufren el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) tienen casi 3 veces más probabilidades de sufrir problemas con el lenguaje que los niños que no tienen el TDAH, según una nueva investigación.
Y esas dificultades lingüísticas pueden tener consecuencias académicas de largo alcance, descubrió el estudio.
El estudio, publicado en línea el 21 de abril en la revista Pediatrics, observó a niños de 6 a 8 años con y sin TDAH en Australia.
"Descubrimos que el 40 por ciento de los niños del grupo del TDAH tenían problemas de lenguaje, en comparación con el 17 por ciento del grupo de 'control'", señaló Emma Sciberras, psicóloga clínica e investigadora postdoctoral en el Instituto de Investigación Pediátrica Murdoch, en Victoria, Australia. "Las tasas de problemas del lenguaje eran parecidas en los chicos y las chicas con TDAH", añadió.
Los niños con TDAH normalmente tienen problemas con el rendimiento escolar y la socialización. El impacto que los problemas de lenguaje podrían tener en estos factores no se han estudiado bien, indicaron los autores del estudio.
"Las diferencias en el rendimiento académico entre los niños con TDAH y problemas del lenguaje, en comparación con los que solo tienen TDAH, eran muy grandes y clínicamente significativas", dijo Sciberras.
Los problemas de lenguaje se refieren al lenguaje hablado, tanto al lenguaje receptivo como al expresivo. El lenguaje receptivo es la capacidad de escuchar y comprender lo que se ha dicho; el expresivo es la capacidad de hablar y de que los demás comprendan.
En un estudio distinto sobre el mismo tema que aparece en la revista, Sciberras y sus colaboradores observaron a casi 400 niños con TDAH, de 5 a 13 años de edad, y hallaron que casi dos tercios tenían uno o más trastornos de ansiedad.
Cuando los niños con TDAH que tenían dos o más trastornos de ansiedad (esto sucedió para un tercio de los niños) su calidad de vida, su conducta y la rendimiento diario se vieron perjudicados, indicaron los investigadores.
"Es muy habitual que los niños con TDAH experimenten dificultades adicionales", dijo Sciberras. "Ambos estudios demuestran que las dificultades adicionales que aparecen en conjunción con el TDAH, en este caso la ansiedad y los problemas de lenguaje, pueden hacer que el funcionamiento diario resulte todavía más difícil para los niños con TDAH".
El estudio sobre el lenguaje contó con 179 niños a los que habían diagnosticado TDAH y con 212 sin el trastorno de atención. Menos de la mitad de los niños con TDAH estaban tomando medicamentos como ayuda para controlar sus síntomas.
Después de tener en cuenta los factores sociodemográficos y otras afecciones, como los trastornos del espectro autista, los investigadores descubrieron que el riesgo de tener problemas de lenguaje era 2.8 veces más alto en los niños con TDAH.
Cuando los investigadores observaron cómo estos problemas del lenguaje afectaban al trabajo escolar, hallaron unas puntuaciones más bajas en matemáticas, lectura y académicas.
No obstante, los investigadores no hallaron que los problemas del lenguaje tuvieran un impacto en la socialización.
"Nos sorprendió que los problemas del lenguaje no estuvieran asociados con una conducta social más deficiente en los niños con TDAH", dijo Sciberras. "Podría ser que los niños con TDAH ya tengan una conducta social más deficiente debido a otros factores, incluyendo los síntomas de su TDAH u otras dificultades asociadas".
Pero Sciberras advirtió que los problemas de lenguaje podrían complicarse más a medida que estos niños crecen porque las relaciones sociales se hacen más complejas con la edad.
Un experto que no participó en el estudio dijo que éste es un buen recordatorio para los padres y los médicos.
"Si un niño tiene un TDAH y no le va bien en la escuela, aunque los síntomas de su TDAH estén bien controlados, además de realizar pruebas para los problemas de aprendizaje, también debería evaluarse si también sufren problemas de lenguaje. Y eso no es algo que siempre tengamos en cuenta", dijo el Dr. Bradley Berg, director médico del Centro Pediátrico McLane de Baylor Scott & White Healthcare en Round Rock, Texas.
Pero no está claro si las intervenciones sobre el lenguaje y el habla ayudarán a los jóvenes con TDAH.
Berg también indicó que este problema es como el de "la gallina y el huevo". "¿Tienen estos niños un trastorno del lenguaje que hace que no comprendan lo que se hace en la escuela y eso les hace estar inquietos y nerviosos porque se aburren? ¿O tienen un TDAH y eso es lo que dificulta la comprensión del lenguaje? ¿O sucede algo en esa zona del cerebro que crea ambos problemas?", planteó. "No lo sabemos".
Es posible que los hallazgos de este estudio australiano no sean trasladables a la población estadounidense. Por un lado, las tendencias de los medicamentos podrían ser distintas, dijo Berg.
Para los niños con TDAH que también sufren ansiedad, Sciberras dijo que los medicamentos pueden ser útiles, y un tipo de psicoterapia llamada terapia cognitivo-conductual también podría ser de utilidad. Los investigadores están realizando un estudio sobre el tratamiento de la ansiedad en los niños con TDAH.
"Si a los padres les preocupa que su niño con TDAH tenga ansiedad, dificultades con el lenguaje o cualquier otro tipo de problemas que no se están manejando, les animamos a que comenten sus preocupaciones con el médico que trata a su hijo", señaló.
FUENTES: Emma Sciberras, D.Psych., post-doctoral research fellow and clinical psychologist, Murdoch Children's Research Institute, Victoria, Australia; Bradley Berg, M.D., Ph.D., medical director, McLane Children's, Baylor Scott & White Healthcare, Round Rock, Texas; May 2014, Pediatrics.
Pueden tener consecuencias académicas
Los problemas de lenguaje son comunes en los niños con TDAH
La ansiedad a menudo va también de la mano con el trastorno de la atención.
Fuente: Medlineplus