Podría provocar un aumento de peso

La amigdalectomía para la apnea del sueño

Un estudio halló que los niños con sobrepeso que se sometieron a la cirugía eran más propensos a hacerse obesos en un plazo de siete meses.

Fuente: Medlineplus

 Las amigdalotomías se realizan comúnmente para aliviar la apnea del sueño en los niños, pero un estudio reciente confirma que el tratamiento puede acelerar el aumento de peso en los niños, sobre todo si ya tienen sobrepeso.

Los investigadores dijeron que esto es un problema, dado que la obesidad es un factor de riesgo de varios problemas, entre otros, con cierta ironía, la apnea del sueño. Pero no están desaconsejando la amigdalotomía entre los niños que la necesiten.

En lugar de ello, apuntaron, médicos y padres deben saber que una dieta saludable y el ejercicio se hacen incluso más importantes después de que los niños se sometan a la cirugía.

"No se puede solo tratar la apnea del sueño. También se necesita un asesoramiento sobre la nutrición y el estilo de vida", apuntó el investigador líder, el Dr. Eliot Katz, especialista en enfermedades respiratorias del Hospital Pediátrico de Boston.

Un especialista en sueño pediátrico que no participó en el estudio se mostró de acuerdo.

"La nutrición y el ejercicio son igual de importantes que tratar la apnea del sueño con un solo procedimiento", apuntó la Dra. Sangeeta Chakravorty, codirectora del centro de evaluación del sueño pediátrico del Hospital Pediátrico de Pittsburgh.

La apnea obstructiva del sueño surge cuando una constricción en las vías respiratorias provoca pausas repetidas en la respiración durante la noche. En los niños, la causa más común es la inflamación en las amígdalas y las adenoides, unos tejidos que combaten la enfermedad que se encuentran en la parte trasera de la garganta y en las cavidades nasales, respectivamente. Y con frecuencia se recomienda una cirugía para extirpar esos tejidos, conocida técnicamente como una adenoamigdalectomía.

Hace mucho que los médicos saben que tras la cirugía los niños pueden aumentar de peso a un ritmo acelerado, apuntó Chakravorty.

Pero el nuevo estudio, que aparece en línea el 28 de julio y en la edición impresa de agosto de la revista Pediatrics, ofrece la "certeza" de que en realidad sí es un efecto del tratamiento, apuntó Katz.

Esto se debe a que los niños del estudio se asignaron al azar a la cirugía o a una "espera vigilante", que consistía en posponer la cirugía y persistir con otras opciones, como unos medicamentos para controlar mejor cualquier síntoma de alergias nasales o asma.

En total, 204 niños de 5 a 9 años de edad se asignaron a la cirugía de inmediato, mientras que 192 permanecieron en la espera vigilante. El equipo de Katz halló que durante siete meses, los niños que se sometieron a la cirugía mostraron un aumento de peso promedio más rápido que los niños en el grupo de comparación.

Se trató de una diferencia pequeña en general, apuntó Chakravorty. Y entre los niños con un peso normal no hubo un efecto importante.

"No está haciendo que los niños con un peso normal se hagan obesos", anotó Chakravorty.

Pero hubo un impacto más claro entre los niños que tenían sobrepeso antes de la cirugía. De esos niños, el 52 por ciento se habían convertido oficialmente en obesos siete meses tras la cirugía, frente al 21 por ciento de los niños con sobrepeso en el grupo de espera vigilante, halló el estudio.

Hay unas cuantas explicaciones posibles para el aumento de peso postquirúrgico, según el equipo de Katz. El proceso de quemar calorías podría reducirse cuando los niños ya no tienen problemas para respirar durante el sueño. Y algunos niños podrían quemar menos calorías durante el día porque se hacen menos activos después de que su apnea del sueño mejora. (Paradójicamente, el mal sueño con frecuencia hace que los niños sean "hiperactivos", en lugar de mostrarse somnolientos, explicó Katz).

La apnea del sueño en sí también provoca cambios metabólicos, apuntó Katz. La hormona de crecimiento es liberada de noche, y el trastorno del sueño puede interferir con ese proceso. De forma que el cuerpo podría adaptar el metabolismo en un esfuerzo por mantener el crecimiento del niño.

"Cuando se alivia la apnea del sueño, están preparados para un aumento rápido del peso", apuntó Katz.

Antes era común que los niños con apnea del sueño tuvieran un peso bajo y que no crecieran bien, anotó Chakravorty. En esos niños, un aumento de peso rápido tras una amigdalotomía podría ser bueno.

Pero actualmente, con el aumento en la obesidad infantil, muchos niños con apnea del sueño ya tienen sobrepeso o son obesos. Si aumentan de peso con rapidez, apuntó Katz, la apnea del sueño podría volver en seis meses a un año.

"Tras la cirugía, con frecuencia los padres están muy satisfechos", anotó Katz. "Los niños duermen mejor, y quizá se comporten mejor y les vaya mejor en la escuela. Pero existe este problema insidioso del aumento de peso".

Chakravorty se mostró de acuerdo en que la dieta y el ejercicio son la clave para los niños con apnea del sueño, y dijo que eso es así independientemente del método de tratamiento. Y en los niños con sobrepeso, tan solo perder peso podría solucionar la apnea del sueño.

Pero si en última instancia los niños necesitan una cirugía, los padres no deberían obviarla debido a preocupaciones sobre el aumento de peso, según Katz. Anotó que si una mejora en los síntomas de apnea del sueño explica el aumento de peso postquirúrgico, otros tratamientos (que incluyen los medicamentos o los aparatos de presión positiva continua en las vías respiratorias) podrían también fomentar un aumento de peso en exceso.

"Creo que hay implicaciones más allá del tratamiento quirúrgico", apuntó Katz.


FUENTES: Eliot Katz, M.D., pulmonary and respiratory diseases, Boston Children's Hospital; Sangeeta Chakravorty, M.D., co-director, pediatric sleep evaluation center, Children's Hospital of Pittsburgh; August 2014, Pediatrics.