Un nuevo dispositivo cardiaco implantado podría ser más efectivo que los anticoagulantes para reducir el riesgo de accidente cerebrovascular (ACV) en las personas que sufren del trastorno del ritmo del corazón conocido como fibrilación auricular, informan unos investigadores.
El dispositivo, conocido como WATCHMAN, resultó superior al anticoagulante de uso común warfarina para prevenir los ACV, los coágulos y las muertes entre los pacientes de fibrilación auricular, encontró el estudio.
"Son unos resultados importantes", dijo el autor del estudio, el Dr. Vivek Reddy, profesor de cardiología de la Escuela de Medicina Icahn en Mount Sinai, en la ciudad de Nueva York. "Hay muy pocas intervenciones cardiovasculares que muestren una reducción en la mortalidad, y ésta es una de ellas".
Los hallazgos podrían conducir a la aprobación federal final para el dispositivo, que ha estado bajo revisión de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de EE. UU. durante varios años, apuntó Reddy.
Un panel asesor de la FDA otorgó un voto positivo al dispositivo en octubre. "Es probable que lo aprueben, y estará disponible para su uso en Estados Unidos en el primer semestre de 2015", dijo Reddy.
Los hallazgos serán publicados en la edición del 19 de noviembre de la revista Journal of the American Medical Association, y también serán presentados el domingo en la reunión anual de la Asociación Americana del Corazón (American Heart Association), en Chicago.
La fibrilación auricular es un trastorno eléctrico del corazón que hace que lata de forma irregular. Los latidos descompensados permiten a la sangre aglutinarse y coagular en el corazón, lo que aumenta el riesgo de ACV del paciente, según los Institutos Nacionales de la Salud de EE. UU.
El dispositivo WATCHMAN es un paraguas de malla de tela y metal que los médicos insertan a través de un tubo en la cámara izquierda superior, o aurícula izquierda, del corazón del paciente. Es fabricado por la firma Boston Scientific, que pagó el ensayo clínico y proveyó respaldo financiero a Reddy y a los demás coautores del estudio.
El dispositivo cubre el apéndice auricular izquierdo, un saco muscular en forma de oreja localizado en la parte superior de la aurícula izquierda. Estudios anteriores han sugerido que el apéndice auricular izquierdo es la principal fuente de coágulos sanguíneos que provocan ACV en los pacientes de fibrilación auricular, señalaron los investigadores en la información de respaldo.
La malla está diseñada para impedir el paso de los coágulos, evitando que circulen por el cuerpo. "Al final se coagula del todo detrás del dispositivo y se sana", explicó Reddy.
El dispositivo WATCHMAN podría ser una alternativa para las personas a quienes no les está médicamente permitido tomar anticoagulantes, o que no desean tomar los fármacos.
Las personas que toman warfarina deben analizar su sangre de forma constante, además de controlar múltiples interacciones que el fármaco puede tener con otros medicamentos y con alimentos, según la información de respaldo del artículo. Alrededor de dos de cada cinco pacientes que podrían tomar anticoagulantes no lo hacen, lo que los deja con un riesgo sustancial de accidente cerebrovascular.
En este ensayo clínico participaron 707 pacientes de fibrilación auricular y al menos un factor de riesgo adicional de ACV. De esos pacientes, 463 recibieron un implante WATCHMAN, y los demás tomaron warfarina.
Tras casi cuatro años, alrededor del 8.4 por ciento de los pacientes con WATCHMAN habían sufrido un ACV, un coágulo sanguíneo o habían muerto, frente al 13.9 por ciento de los del grupo que tomaron warfarina.
Los pacientes con el dispositivo también tuvieron unas tasas más bajas de muerte relacionada con el corazón (el 3.7 frente al 9 por ciento) y de muerte por todas las causas (el 12.3 frente al 18 por ciento), que los pacientes que tomaban warfarina.
Pero los pacientes con el dispositivo también tuvieron una cantidad ligeramente más alta de efectos secundarios adversos, en comparación con los pacientes que tomaron warfarina, señaló el Dr. Alfred Bove, cardiólogo y profesor emérito de medicina de la Facultad de Medicina de la Universidad de Temple, en Filadelfia.
El efecto secundario más común fue una acumulación peligrosa de líquido alrededor del corazón, anotó el estudio.
Bove dijo que le preocupa que pueda haber un aumento dramático en las complicaciones relacionadas con el dispositivo si los cardiólogos con distintos grados de capacidad comienzan a usarlo de forma común.
"Insertar el dispositivo conlleva cierta habilidad", dijo Bove. "Si es un paciente, no acuda al médico de siempre para pedirle que le inserte una de esas cosas. Investigue un poco y encuentre un médico especializado".
Reddy se mostró de acuerdo en que los pacientes con el dispositivo tuvieron más complicaciones, pero señaló que los pacientes que toman warfarina están en un mayor riesgo de problemas de salud a largo plazo.
"Con los medicamentos, hay un riesgo cumulativo que nunca cesa. Una persona podría decidir que un riesgo es mejor que el otro. Es una cuestión de preferencia para los pacientes individuales", aseguró Reddy. "La cuestión es que tenemos una alternativa a los anticoagulantes para las personas que intentamos proteger del ACV".
FUENTES: Vivek Reddy, M.D., professor, cardiology, Icahn School of Medicine at Mount Sinai, New York City; Alfred Bove, M.D., Ph.D., professor emeritus, department of medicine, section of cardiology, Temple University School of Medicine, Philadelphia; Nov. 19, 2014, Journal of the American Medical Association.