Las mujeres que han pasado por un evento traumático o han contraído un trastorno por estrés postraumático (TEPT) se enfrentan a un riesgo más alto de ataque cardiaco o accidente cerebrovascular (ACV), según sugiere un nuevo estudio de gran tamaño.

Para las mujeres con un TEPT grave, el estudio halló que tenían un riesgo de ataque cardiaco o ACV un 60 por ciento más alto que las mujeres que no habían sufrido ningún evento traumático. El riesgo aumentó un 45 por ciento para las mujeres que sufrieron un evento traumático, pero no contrajeron el TEPT, añadieron los investigadores.

"Nuestro estudio es el primero en observar la exposición a un suceso traumático y los síntomas del TEPT y los nuevos casos de enfermedades cardiovasculares en una muestra de la población general de mujeres", explicó la investigadora principal, Jennifer Sumner, epidemióloga en la Facultad de Salud Pública Mailman de la Universidad de Columbia, en la ciudad de Nueva York.

Es importante indicar, no obstante, que aunque este estudio halló una asociación ente los eventos traumáticos y el riesgo de ACV y el ataque cardiaco, no fue diseñado para demostrar una relación de causalidad. Es posible que otros factores pudieran explicar el aumento del riesgo.

El informe aparece en la edición en línea del 29 de junio de la revista Circulation.

Entre los síntomas del TEPT se encuentran: evitar todo aquello que recuerde al evento traumático; tener pesadillas o recuerdos vívidos del evento traumático; tener problemas para dormir; estar irritable, o alarmarse fácilmente, explicó Sumner.

Algunas de las mujeres del estudio contrajeron TEPT después de sufrir eventos traumáticos y extremadamente estresantes, como un contacto sexual no deseado, la muerte inesperada de un ser querido o una agresión física, dijo.

"El TEPT es dos veces más común entre las mujeres que entre los hombres. Aproximadamente una de cada 10 mujeres contraerán el TEPT a lo largo de su vida", indicó. "La investigación ha empezado a sugerir que las tasas de enfermedades cardiovasculares son más altas en las personas con TEPT. Pero casi toda la investigación se ha realizado en hombres".

Además de ser un problema psicológico, el TEPT también aumenta el riesgo de enfermedades crónicas, dijo.

Para realizar el estudio, Sumner y sus colegas revisaron los datos de casi 50,000 mujeres que participaron en el Estudio de la salud de las enfermeras II.

Casi 35,000 de las mujeres habían sufrido un evento traumático. Un poco menos de 10,000 mujeres presentaban síntomas de TEPT, halló el estudio. Durante el periodo de seguimiento de 20 años, 548 mujeres sufrieron un ataque cardiaco o un ACV, dijo el estudio.

Las mujeres con TEPT deberían ser conscientes de que podrían tener un riesgo más alto de ataque cardiaco o de ACV, dijo Sumner. Y las mujeres con un TEPT han de saber que llevar a cabo conductas malsanas, como fumar cigarrillos y comer una dieta malsana, podría aumentar este riesgo incluso más, añadió.

"El TEPT generalmente se considera un problema psicológico, pero también tiene un impacto profundo en la salud física, sobre todo en el riesgo cardiovascular", señaló.

Los profesionales de la atención sanitaria que traten a mujeres en riesgo de TEPT, incluyendo a los médicos de atención primaria, deberían evaluar los riesgos de sufrir un ataque cardiaco o un ACV, comentó Sumner.

"El tratamiento psicológico para el TEPT también ha de tener en cuenta las consecuencias del trastorno para la salud a largo plazo. En última instancia, la integración de la atención de salud mental y física es clave", dijo.

El Dr. Gregg Fonarow, profesor de cardiología de la Universidad de California, en Los Ángeles, dijo que "estudios anteriores han sugerido que hay una asociación entre una variedad de factores estresantes psicológicos y sociales y el riesgo más alto de sufrir un ataque cardiaco y un ACV".

Algunos estudios han encontrado que el TEPT se asocia con un riesgo excesivo, pero muchos de estos estudios se han limitado a los hombres, indicó.

Este estudio muestra que las mujeres con síntomas del TEPT también son más propensas a sufrir ataques cardiacos y ACV. También mostró que hasta la mitad del riesgo aumentado se relacionó con conductas malsanas y factores de riesgo, como la hipertensión, dijo Fonarow.

Fonarow señaló que las mujeres que han sufrido eventos traumáticos o que tienen un TEPT pueden reducir su riesgo de ataque cardiaco y ACV si controlan los factores de riesgo tradicionales.

"Las personas con un riesgo más alto deberían tomar medidas proactivas para reducir su riesgo mediante la adopción de conductas saludables para el corazón, como no fumar y tener unos niveles saludables de peso corporal, presión arterial y colesterol", aconsejó Fonarow.

FUENTES: Jennifer Sumner, Ph.D., epidemiologist, Mailman School of Public Health, Columbia University, New York City; Gregg Fonarow, M.D., professor, cardiology, University of California, Los Angeles; June 29, 2015, Circulation