Sus secuelas se detectan en scáners

Muchos eventos cardíacos son asintomáticos

Un estudio muestra evidencias de cicatrices cardiacas que con frecuencia aparecen en escáneres, aunque no se haya reportado ningún ataque

Fuente: Medlineplus

Robert Preidt

Una investigación reciente sugiere que muchos estadounidenses sufren de ataques cardiacos "silenciosos": eventos que pasan desapercibidos pero que son de suficiente gravedad como para dejar cicatrices en el corazón.

"Sabemos que los factores de riesgo de las enfermedades cardiacas, la principal causa de muerte de los estadounidenses de ambos sexos, son predominantemente modificables, así que este hallazgo ofrece más respaldo a la idea de que la identificación y la gestión tempranas de esos factores de riesgo son esenciales", señaló la Dra. Stacey Rosen, vicepresidenta de salud de las mujeres del Instituto Katz de Salud de las Mujeres en New Hyde Park, Nueva York. Rosen no participó en la nueva investigación.

El estudio fue liderado por el Dr. David Bluemke, del Instituto Nacional de Imágenes Biomédicas y Bioingeniería de EE. UU. Su equipo observó los escáneres cardiacos de más de 1,800 personas de 45 a 84 años de edad provenientes de varios grupos étnicos, que no sufrían de ninguna enfermedad cardiaca cuando se inscribieron en el estudio entre 2000 y 2002.

Diez años más tarde, todos los pacientes se sometieron a imágenes magnéticas para evaluar su salud cardiaca. En ese momento, su edad promedio era de 68 años.

Los escáneres revelaron que casi un 8 por ciento de los participantes tenían cicatrices provocadas por un ataque cardiaco, de las cuales un 78 por ciento no se habían detectado antes.

Los hombres eran mucho más propensos que las mujeres a presentar ese tipo de cicatriz: casi un 13 frente a un 2.5 por ciento, respectivamente. Otros factores asociados con un riesgo más alto de cicatrices cardiacas incluían fumar, tener más peso, unos niveles más altos de depósitos de calcio vinculados con las enfermedades cardiacas en las arterias, y el uso de antihipertensivos al inicio del estudio.

Los investigadores enfatizaron que "aún está por definirse" una determinación del impacto para la salud de esos ataques silenciosos. Pero apuntaron que el 70 por ciento de los pacientes que pierden sus vidas debido a una muerte cardiaca repentina muestran evidencias de este tipo de cicatrices previas en el corazón.

El Dr. Kevin Marzo, jefe de cardiología del Hospital de la Universidad de Winthrop en Mineola, Nueva York, revisó los nuevos hallazgos, y comentó que respaldan la idea de que un ECG de rutina realizado en el consultorio del médico quizá solo detecte un porcentaje bajo de los ataques cardiacos silenciosos.

Según Marzo, eso significa que, para algunos pacientes, tomar medidas como los cambios en el estilo de vida y la gestión del colesterol para reducir el riesgo de ataque cardiaco podrían ser "necesarios a pesar de la reconfirmación de tener un ECG normal en el consultorio del médico".

El estudio aparece en la edición del 10 de noviembre de la revista Journal of the American Medical Association.


FUENTES: Stacey E. Rosen, M.D., vice president, women's health, The Katz Institute for Women's Health, New Hyde Park, N.Y.; Kevin Marzo, M.D., chief, Division of Cardiology, Winthrop-University Hospital, Mineola, N.Y.; Journal of the American Medical Association