Seguimiento de 10 años

Vinculan el consumo de papas antes del embarazo con la diabetes gestacional

Cinco tazas de papas a la semana aumentan las probabilidades en un 50 por ciento

Fuente: Medlineplus

"Las papas se consideran un tipo de verdura, pero no todas las verduras son saludables"

Las mujeres que comen muchas papas antes del embarazo parecen ser más propensas a contraer diabetes gestacional, sugiere un estudio reciente.

El riesgo de diabetes gestacional de una mujer pareció aumentar en un 27 por ciento si consumía con regularidad entre dos y cuatro tazas de papas a la semana antes del embarazo. Cinco o más tazas por semana parecieron aumentar el riesgo en un 50 por ciento, incluso después de que los investigadores tomaran en cuenta la obesidad antes del embarazo y otros factores de riesgo, halló el estudio.

"Cuantas más papas consumían las mujeres, mayor era su riesgo de diabetes gestacional", dijo la primera autora, la Dra. Cuilin Zhang, investigadora principal del Instituto Nacional de Salud Infantil y Desarrollo Humano de EE. UU. "Las papas se consideran un tipo de verdura, pero no todas las verduras son saludables".

Pero es importante anotar que este estudio solo mostró una asociación entre el consumo de papas y el riesgo de diabetes gestacional, un tipo de diabetes que se contrae durante el embarazo. El estudio no fue diseñado para determinar causalidad.

Los hallazgos del estudio se publicaron en línea el 12 de enero en la revista BMJ.

Las papas son el tercer alimento cultivado más comúnmente consumido en el mundo, tras el arroz y el trigo. Alrededor del 35 por ciento de las mujeres de EE. UU. en edad fértil comen papas a diario, según la información de respaldo del estudio.

Las papas son ricas en vitamina C, potasio y fibra. Lamentablemente, las papas también contienen una cantidad significativa de carbohidratos simples, que se descomponen y se absorben en el torrente sanguíneo con facilidad, explicó Zhang.

Comer una taza de papas puede aumentar de forma marcada los niveles de azúcar en sangre, equivalente a una lata de refresco o un puñado de gomitas, según los expertos en nutrición de la Universidad de Harvard.

Unos niveles elevados de azúcar en sangre pueden fomentar la resistencia a la insulina, y contribuir a que se contraiga diabetes tipo 2, dijo Zhang.

Muchas mujeres también comen papas preparadas como papas fritas, y los aceites usados para freírlas pueden aumentar la resistencia a la insulina cuando se consumen, añadió.

Para investigar el efecto del consumo de papas sobre el embarazo, Zhang y sus colaboradores reunieron datos de casi 16,000 mujeres que participaron en un estudio nacional de la salud de las enfermeras.

Durante un seguimiento de 10 años, el equipo de investigación encontró casi 900 casos de diabetes gestacional que ocurrieron en casi 22,000 embarazos de un único feto.

Al revisar unos cuestionarios sobre la comida que las enfermeras completaron cada dos años, los investigadores encontraron una asociación entre comer papas y el riesgo de diabetes gestacional.

Los investigadores también estimaron que las mujeres podrían reducir su riesgo de diabetes gestacional entre un 9 y un 12 por ciento si sustituyeran dos porciones de papas a la semana por otras verduras o granos integrales.

La diabetes gestacional puede provocar problemas de salud para los recién nacidos. Podrían sufrir de un nivel bajo de azúcar en sangre y tener problemas de respiración justo tras nacer, así como tener más probabilidades de morir antes o poco después del nacimiento, según los Institutos Nacionales de la Salud de EE. UU.

"Las mujeres que estén planificando un embarazo deben reducir su consumo de papas", aconsejó Zhang. "Lo que las madres comen podría afectar a la salud de sus bebés".

El Dr. Raul Artal, obstetra y ginecólogo de la Facultad de Medicina de la Universidad de Saint Louis, se mostró de acuerdo en que reducir el consumo de papas es una medida inteligente que las mujeres en edad fértil pueden tomar.

"La palabra clave es la sensatez", enfatizó Artal. "Coma de forma sensata. Comer algunas papas no está mal, pero no demasiadas".


FUENTES: Cuilin Zhang, M.D., M.P.H., Ph.D., senior investigator, U.S. National Institute of Child Health and Human Development; Raul Artal, M.D., obstetrician/gynecologist, St. Louis University School of Medicine, St. Louis; Jan. 12, 2016, BMJ