La "observación" (estudio de 20 años)

Cáncer de próstata de bajo riesgo: ¿cuál es la mejor opción?

La "observación" es la mejor opción para la mayoría de cánceres de próstata de riesgo bajo

Fuente: MedlinePlus

Un estudio de 20 años encontró poca diferencia en las tasas de mortalidad, y más complicaciones con la cirugía

Los hombres con un cáncer de próstata en etapa temprana que se someten a una cirugía para extirpar el tumor no viven más que los que no reciben ningún tratamiento, concluyó un ensayo clínico de larga duración.

Al mismo tiempo, casi uno de cada tres hombres que se sometieron a la cirugía acabaron teniendo complicaciones a largo plazo, como la incontinencia urinaria y la disfunción eréctil, apuntó el investigador líder, el Dr. Timothy Wilt, investigador clínico en el Sistema de Atención de la Salud de Asuntos de Veteranos de Minneapolis.

Basándose en estos hallazgos, los expertos en el cáncer deben revisar las directrices clínicas de forma que la mayoría de hombres con un cáncer de próstata de riesgo bajo no reciban ningún tratamiento, planteó Wilt.

En su lugar, los médicos deben simplemente seguir el progreso del cáncer de crecimiento lento de sus pacientes haciendo preguntas sobre las señales y los síntomas de la progresión de la enfermedad.

"Nuestros resultados demuestran que para la gran mayoría de hombres con un cáncer de próstata localizado, seleccionar la observación del tratamiento que elijan puede ayudarles a vivir durante un tiempo similar, evitar la muerte por el cáncer de próstata, y prevenir los daños del tratamiento quirúrgico", dijo Wilt.

Más o menos un 70 por ciento de los hombres recién diagnosticados con cáncer de próstata están en las primeras etapas de la enfermedad, con tumores no agresivos que no se han propagado más allá de la glándula prostática, según una declaración del coautor del estudio, el Dr. Gerald Andriole, director de cirugía urológica de la Facultad de Medicina de la Universidad de Washington, en St. Louis.

"Esos pacientes tienen un pronóstico excelente sin cirugía", dijo Andriole. "Este estudio confirma que el tratamiento agresivo por lo general no es necesario".

Este ensayo clínico se inició en 1994, más o menos en la época en que un nuevo análisis sanguíneo llamado antígeno prostático específico (APE) revolucionó la detección del cáncer de próstata, explicaron los investigadores en las notas de respaldo.

De hecho, este fue el primer ensayo aleatorio en comparar la cirugía con ningún tratamiento desde que la prueba del APE se hizo común, señaló Wilt.

La prueba sanguínea del APE permitió a los médicos detectar cánceres de próstata que de otra forma no hubieran sido notados a lo largo de la vida de un hombre, según el Dr. Len Lichtenfeld, subdirector médico de la Sociedad Americana Contra El Cáncer (American Cancer Society).

Antes de la prueba del APE, era de conocimiento generalizado que casi todo hombre que llegara a los 90 años tendría un cáncer de próstata, dijo Lichtenfeld. Pero el cáncer solo se encontraría durante una autopsia, dado que nunca tuvo ningún efecto en su salud.

"En la era del APE, cuando pudimos comenzar a encontrar muchos cánceres más, supusimos que cada cáncer que encontráramos tenía el potencial de ser un 'cáncer malo', cuando de hecho una minoría de cánceres de próstata provocarán alguna vez dificultades a un hombre a lo largo de su vida", comentó Lichtenfeld. "Es una lección que supimos hace muchos años, pero que perdimos de vista por el camino".

En el ensayo clínico, los investigadores asignaron al azar a 731 hombres con un cáncer de próstata de riesgo bajo a someterse a una cirugía o solo a observación.

La observación es muy distinta que la vigilancia activa, anotó Wilt.

En la vigilancia activa, los hombres reciben pruebas del APE ocasionales, exámenes rectales digitales y biopsias de próstata mientras los médicos controlan con cuidado el progreso del tumor, dijo Wilt. La observación solo implica que los médicos pregunten sobre los problemas de salud que podrían estar relacionados o no con el cáncer de próstata.

De los hombres que se sometieron a una cirugía para el cáncer de próstata, 223 (un 61 por ciento) murieron durante las hasta dos décadas de seguimiento, frente a 245 hombres (un 67 por ciento) de los que se asignaron a la observación. La diferencia no es estadísticamente significativa, anotaron los investigadores.

Además, 27 hombres (un 7 por ciento) en el grupo de cirugía murieron de cáncer de próstata, en comparación con 42 hombres (un 11 por ciento) en el grupo de observación. Esa diferencia tampoco fue estadísticamente significativa, según el informe.

El Dr. Sumanta Pal, oncólogo y profesor clínico asistente en City of Hope en Duarte, California, dijo que "en muchos pacientes con un riesgo bajo, el cáncer de próstata puede desarrollarse de forma muy indolente, así que incluso si se deja intacto, hay muchos pacientes que no tienen una progresión significativa de la enfermedad a lo largo de un periodo extenso".

Los investigadores sí encontraron que algunos hombres con un cáncer de próstata moderadamente agresivo vivirían más si se sometieran a una cirugía. Esos pacientes, además de los hombres con un cáncer de próstata de alto riesgo, deben hablar sobre los beneficios de los tratamientos (como la cirugía o la radioterapia) con el médico, planteó Andriole.

Lichtenfeld enfatizó que el "estudio no significa que todo hombre con un cáncer de próstata puede prescindir del tratamiento. Lo que este estudio implica es que debemos prestar atención a lo que encontramos en el momento del diagnóstico, y entonces personalizar el mejor tratamiento para ese hombre en particular".

El estudio aparece en la edición del 13 de julio de la revista New England Journal of Medicine.


FUENTES: Timothy Wilt, M.D., MPH, clinical investigator and staff physician, Minneapolis Veterans Affairs Health Care System; Len Lichtenfeld, M.D., deputy chief medical officer, American Cancer Society; Sumanta Pal, M.D., assistant clinical professor, City of Hope, Duarte, Calif.; July 13, 2017, New England Journal of Medicine


¿Los hombres grandes son más propensos al cáncer de próstata agresivo?

Un estudio encontró que los hombres con más estatura y más peso eran más propensos a desarrollarlo y a morir por su causa

Mientras más grande es un hombre, mayor es su riesgo de desarrollar y morir de un cáncer de próstata agresivo, sugiere un nuevo estudio.

Cada 4 pulgadas (unos 10 centímetros) adicionales de estatura aumentaban las probabilidades de un hombre de ser diagnosticado con un cáncer de próstata de riesgo alto en un 21 por ciento, y sus probabilidades de morir por el cáncer de próstata en un 17 por ciento, encontraron los investigadores.

Lo mismo sucedió con el tamaño de la cintura del hombre. Cada aumento de 4 pulgadas en la circunferencia de la cintura aumentó las probabilidades de desarrollar un cáncer de próstata agresivo en un 13 por ciento, y el riesgo de morir de un cáncer de próstata en un 18 por ciento.

"Sin duda creo que estos resultados animan a los hombres a tener un peso sano, y a tener más políticas de salud pública para prevenir la obesidad", afirmó la investigadora líder, Aurora Pérez-Cornago, epidemióloga nutricional en la Universidad de Oxford, en Inglaterra.

Pérez-Cornago y sus colaboradores llegaron a sus conclusiones basándose en datos de casi 142,000 hombres en ocho países europeos que participaron en un estudio a largo plazo del cáncer y la nutrición.

Entre esos hombres, poco más de 7,000 desarrollaron un cáncer de próstata durante los 14 años de seguimiento, incluyendo a 728 que fueron diagnosticados con un cáncer agresivo y 1,388 con un cáncer en etapa avanzada. De los diagnosticados, 934 murieron del cáncer.

Estudios anteriores han sugerido un vínculo potencial entre el cáncer de próstata y la estatura o el peso de un hombre, pero este es el primero en evaluar si esos factores influyen en el riesgo de ser diagnosticado con un cáncer de crecimiento lento o agresivo, dijo Pérez-Cornago.

La estatura en sí no se vinculó con el riesgo general de un hombre de desarrollar un cáncer de próstata, ni tampoco se asoció con el riesgo de ser diagnosticado con un cáncer de próstata de grado bajo o intermedio, dijeron los investigadores.

Pero la estatura sí influyó en el riesgo de un hombre de ser diagnosticado con un cáncer de próstata agresivo y de morir de cáncer de próstata, mostró el estudio.

De forma similar, se mostró que el índice de masa corporal y la circunferencia de la cintura predecían de forma directa el riesgo de desarrollar un cáncer de próstata de grado alto.

El estudio solo encontró una asociación entre la estatura, el peso y el cáncer de próstata agresivo; no pudo probar un vínculo causal.

Pero la asociación entre la estatura y el riesgo de cáncer de próstata no es nueva, dijo Victoria Stevens, directora estratégica de los servicios de laboratorio de la Sociedad Americana Contra El Cáncer (American Cancer Society).

Los investigadores sospechan que el aumento en el riesgo a partir de la estatura probablemente se relacione con la nutrición en la niñez temprana que fomentó un crecimiento rápido, dijeron Stevens y Pérez-Cornago.

Hay dos teorías principales sobre el posible vínculo entre la obesidad y el cáncer de próstata.

Una es que la obesidad influye en las hormonas del cuerpo de una forma que fomenta el cáncer de próstata, dijeron Stevens y Pérez-Cornago.

Por otro lado, quizá simplemente sea más difícil detectar el cáncer de próstata temprano en los hombres que son obesos, planteó Stevens.

"Es menos probable que el cáncer se detecte en una etapa temprana en los hombres obesos, en parte porque el examen rectal digital es más difícil de realizar", dijo Stevens. "Si tienen una próstata grande, es más fácil pasar algo por alto".

La prueba sanguínea del APE para el cáncer de próstata también es menos confiable en los hombres obesos, porque tienden a tener un volumen más alto de sangre que diluye y oculta los niveles elevados del antígeno prostático específico, dijo Stevens.

Stevens y Pérez-Cornago no se mostraron de acuerdo en si los hombres altos y los obesos deben hacerse pruebas de cáncer de próstata con más frecuencia.

Pérez-Cornago planteó que podría ser buena idea que los hombres altos en particular se evalúen más de cerca, dado que no pueden hacer nada respecto a ese factor de riesgo. Por otra parte, los hombres obesos pueden reducir el riesgo al perder peso.

Pero Stevens anotó que en general los expertos en el cáncer han estado reconsiderando el valor de las pruebas de cáncer de próstata para todos los hombres, dado que la mayoría de esos tumores nunca son potencialmente letales.

La tasa de supervivencia a 15 años de los hombres diagnosticados con un cáncer de próstata es de un 96 por ciento, según la Sociedad Americana Contra El Cáncer.

El Dr. Sumanta Pal, experto en cáncer de próstata, se mostró de acuerdo con Stevens.

"Según muchas directrices existentes, la evaluación del cáncer de próstata sigue siendo una práctica altamente individualizada que se debe personalizar para cada paciente según factores como los antecedentes familiares, pero en la actualidad no se tienen en cuenta factores como la estatura o el peso", dijo Pal, profesor clínico asistente en City of Hope en Duarte, California.

El estudio aparece en la edición del 12 de julio de la revista BMC Medicine.


FUENTES: Aurora Perez-Cornago, Ph.D., nutritional epidemiologist, University of Oxford, England; Victoria Stevens, Ph.D., strategic director, laboratory services, American Cancer Society; Sumanta Pal, M.D., assistant clinical professor, City of Hope, Duarte, Calif.; July 12, 2017, BMC Medicine