La enfermedad inflamatoria intestinal (EII) afecta a 6,8 millones de pacientes en todo el mundo y se asocia de forma independiente con un mayor riesgo de eventos de enfermedad cardiovascular aterosclerótica (ASCVD).
En un artículo de revisión publicado en la revista Journal of the American College of Cardiology, Miguel Cainzos-Achirica, MD, MPH, PhD, et al., Discuten los vínculos epidemiológicos entre la EII y la ASCVD y los posibles mecanismos subyacentes a esta asociación.
Los autores de la revisión abordan los desafíos que enfrentan los cardiólogos preventivos cuando manejan el riesgo cardiovascular en pacientes con EII. Estos desafíos "incluyen una guía disponible limitada y la incapacidad de los estimadores de riesgo clínico de uso común para capturar completamente su exceso de riesgo de ASCVD".
También examinan el papel de las afecciones inflamatorias crónicas en las pautas actuales de prevención primaria, estrategias propuestas para mejorar la prevención de ASCVD entre pacientes con EII y lagunas de evidencia y direcciones futuras en el campo.
"Una fuerte colaboración entre gastroenterólogos y cardiólogos preventivos, un cribado agresivo y un manejo de los factores de riesgo tradicionales y un manejo óptimo de la EII, particularmente durante los brotes, pueden ayudar a disminuir el riesgo de ASCVD en esta población de pacientes", concluyen los autores.
Las enfermedades inflamatorias crónicas que incluyen la infección por el virus de la inmunodeficiencia humana, la psoriasis, la artritis reumatoide y el lupus eritematoso sistémico predisponen a la enfermedad cardiovascular aterosclerótica (ASCVD).
La enfermedad inflamatoria intestinal (EII) es una afección inflamatoria crónica común y Estados Unidos tiene la prevalencia más alta en todo el mundo. Hasta ahora, la EII se ha pasado por alto como un factor que contribuye a la carga de ASCVD entre los adultos jóvenes y de mediana edad, pero los metanálisis de estudios de cohortes sugieren que la EII es un factor de riesgo independiente para ASCVD.
Esta revisión analiza los vínculos epidemiológicos entre la EII y la ASCVD y los posibles mecanismos subyacentes a estas asociaciones. El manejo del riesgo de ASCVD de los pacientes con EII es un desafío debido a su conocimiento reciente y a la incapacidad de las puntuaciones de riesgo actuales para capturar completamente su mayor riesgo.
Se evalúa el papel de la EII en las pautas actuales de prevención primaria y se describen estrategias para mejorar la reducción del riesgo de ASCVD en pacientes con EII. Finalmente, los autores discuten las lagunas de conocimiento y las futuras direcciones de investigación en este campo innovador.
Aspectos destacados • La EII afecta a 6,8 millones de personas en todo el mundo ya 3 millones en Estados Unidos. |
Conclusiones
La EII afecta a 6,8 millones de pacientes en todo el mundo y se asocia de forma independiente con un mayor riesgo de episodios de ASCVD.
Es probable que esta conexión opere a través de varios mecanismos y no esté completamente capturada por las puntuaciones de riesgo tradicionales. Una sólida colaboración entre gastroenterólogos y cardiólogos preventivos, un cribado y un tratamiento agresivos de los factores de riesgo tradicionales y un tratamiento óptimo de la EII, en particular durante los brotes, pueden ayudar a reducir el riesgo de ASCVD en esta población de pacientes.
Las próximas investigaciones sobre los mecanismos novedosos que subyacen a la conexión de la EII-ASCVD, la heterogeneidad del riesgo cardiovascular entre los pacientes con EII y sus determinantes, y los efectos de las terapias para la EII que modifican la enfermedad ayudarán a informar las intervenciones preventivas dirigidas a reducir aún más el riesgo de ASCVD en pacientes con EII más probablemente tener eventos.