Abordaje diagnóstico
Si tomamos en cuenta que la etiología principal del dolor abdominal en el CSD de etiología biliar es la litiasis, se debe realizar una historia clínica adecuada enfocada en los factores de riesgo para enfermedad litiásica y episodios previos similares de dolor. Ante la presencia de fiebre e ictericia se debe sospechar de obstrucción de la vía biliar con colangitis ascendente. Es importante recordar que en los pacientes de edad avanzada, los cuadros de colecistitis aguda pueden manifestarse sólo como ataque al estado general y febrícula.7
En el diagnóstico diferencial deben considerarse etiologías extraabdominales de dolor en el CSD, incluyendo neumonía basal derecha, derrame pleural, infarto pulmonar y síndrome coronario agudo. Para evaluar la etiología y gravedad del cuadro se sugieren los siguientes exámenes de laboratorio: biometría hemática completa con diferencial, electrolitos séricos, nitrógeno ureico, creatinina, glucosa, aminotransferasas, fosfatasa alcalina, bilirrubinas y lipasa.
El ultrasonido abdominal sigue siendo el estudio ideal para la mayoría de los pacientes debido a su alta sensibilidad para detectar litiasis y su habilidad para documentar dilatación de la vía biliar que excede incluso a la tomografía abdominal computarizada. La principal limitación del ultrasonido abdominal es la incapacidad para evaluar la parte distal del conducto biliar común, el cual se encuentra por detrás de la silueta duodenal.
El diagnóstico de obstrucción biliar distal se infiere generalmente por la presencia de dilatación de la vía biliar.
En el paciente con dolor en el CSD y un incremento súbito de las aminotransferasas debe pensarse en la presencia de coledocolitiasis, particularmente si se acompaña de aumento de las bilirrubinas.4, 5, 6, 7
En caso de presentarse la tríada clásica de coledocolitiasis y colangitis, deberá considerarse la realización de colangiopancreatografía retrógrada endoscópica (CPRE) tras el ultrasonido abdominal. En los centros en los que se encuentra disponible, el ultrasonido transendoscópico permite visualizar la porción distal del conducto biliar común y es de gran ayuda en el esclarecimiento de la causa de la obstrucción.4
La colangioresonancia magnética es un estudio no invasivo alternativo a CPRE que tiene una adecuada sensibilidad y razonablemente se puede utilizar en los casos en los que no se tiene contemplado un procedimiento terapéutico o cuando existen factores de riesgo (por ejemplo, coagulopatías) que contraindiquen la realización de la colangiografía endoscópica.4, 5