Avanzar hacia la cobertura universal de salud, promover la salud y el bienestar y proteger contra emergencias de salud son las prioridades globales de la OMS1 que comparten el Programa de Trabajo Europeo 2020-2025 de la OMS propuesto.
La pandemia de la enfermedad por coronavirus 2019 (COVID-19) ha subrayado la importancia de interconectar estas prioridades estratégicas. De las seis regiones de la OMS, la región europea es la más afectada por la morbilidad y mortalidad relacionadas con enfermedades no transmisibles (ENT) 3 y el crecimiento de las ENT es preocupante.
Las enfermedades cardiovasculares, los cánceres, las enfermedades respiratorias crónicas y la diabetes se encuentran entre las principales causas de muerte y discapacidad en la región y una proporción cada vez mayor de niños y adultos viven con sobrepeso u obesidad, 4 uno de los principales factores de riesgo de ENT.
La prevención y el control de las ENT son importantes durante esta pandemia porque las ENT son los principales factores de riesgo para los pacientes con COVID-19.5 Además, algunas de las medidas restrictivas, como el bloqueo, el distanciamiento social y las restricciones de viaje para reducir la propagación de la infección en muchos países tienen un impacto específico en personas que viven con ENT al limitar su actividad, la capacidad de asegurar alimentos saludables y el acceso a servicios preventivos o de promoción de la salud.6
La pandemia de COVID-19 ha tenido un impacto generalizado en la salud, revelando la vulnerabilidad particular de las personas con afecciones subyacentes.
En Italia, un informe reciente reveló que la mayoría (96 · 2%) de los pacientes que murieron en el hospital por COVID-19 tenían comorbilidades, principalmente ENT; lLas ENT más prevalentes entre estos pacientes fueron hipertensión (69 · 2%), diabetes tipo 2 (31 · 8%), cardiopatía isquémica (28 · 2%), enfermedad pulmonar obstructiva crónica (16 · 9%) y cáncer ( 16 · 3%) .7
También se ha informado una asociación entre la gravedad de COVID-19 y las ENT en España,8 China,9 y los EE. UU.10 Sin embargo, muchas muertes por COVID-19 también se producen en personas mayores que a menudo tienen comorbilidades existentes.11
El índice de masa corporal (IMC) también podría estar asociado con la gravedad de COVID-19; en China, los pacientes con COVID-19 grave y los no sobrevivientes generalmente tenían un IMC alto (> 25 kg / m2)12.
El impacto de las medidas de respuesta de COVID-19 en las ENT es multifacético. El distanciamiento físico o la cuarentena pueden conducir a un mal manejo de los factores de riesgo conductuales de las ENT, que incluyen una dieta poco saludable, inactividad física, consumo de tabaco y uso nocivo del alcohol.13
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La evidencia de esta y las pandemias anteriores sugiere que sin un manejo adecuado, las condiciones crónicas pueden empeorar debido a situaciones estresantes resultantes de restricciones, situaciones económicas inseguras y cambios en los comportamientos normales de salud. Al igual que con otros servicios de salud y programas preventivos, el aplazamiento de las citas y pruebas médicas de rutina puede retrasar el manejo de las ENT, mientras que el distanciamiento físico, el acceso restringido a las unidades de atención primaria de salud, farmacias y servicios comunitarios, junto con una reducción de los enlaces de transporte, interrumpen la continuidad de atención a pacientes con ENT. Esta interrupción de los servicios de salud y suministros médicos de rutina corre el riesgo de aumentar la morbilidad, la discapacidad y la mortalidad evitable con el tiempo en pacientes con ENT. Además, los pacientes con obesidad severa que requieren cuidados intensivos tienen mayores necesidades de manejo del paciente. |
La prevención y el control de las ENT tienen un papel crucial en la respuesta COVID-19 y se requiere una respuesta adaptativa para dar cuenta de las necesidades de las personas con ENT. La prevención de las ENT es importante ya que la verdadera escala de los grupos de riesgo probablemente se subestima, dado que muchos casos de hipertensión y diabetes no se diagnostican.14,15
as comunidades y los sistemas de salud deben adaptarse para apoyar y controlar los mayores riesgos de las personas. con ENT conocidas y sensibilidad al ejercicio sobre la vulnerabilidad de la gran población con ENT no diagnosticadas y aquellas con mayor riesgo de ENT.
La respuesta de COVID-19 y el enfoque continuo y fortalecido en la prevención y el manejo de las ENT son aspectos clave e interconectados de la salud pública en la actualidad. Si la respuesta COVID-19 no está adaptada para abarcar la prevención y el manejo de los riesgos de ENT, fallaremos a muchas personas en un momento en que su vulnerabilidad aumenta.
¿Qué pasos se deben tomar para adaptar la respuesta COVID-19?
La Oficina Regional de la OMS para Europa ha comenzado a desarrollar una lista de acciones que podrían ser adaptadas por los países para abordar las necesidades de las personas con riesgo de ENT o que ya viven con ENT, junto con consideraciones prácticas para los equipos que desarrollan planes de respuesta COVID-19 a nivel local o nacional.
| Respuestas específicas para ENT | Riesgos asociados | |
| Tiempo prolongado en el interior | Use tecnología para proporcionar conocimiento y apoyo para el manejo de ENT, información en línea sobre ejercicio y clases de autocontrol de salud mental, recetas saludables para la preparación en el hogar y entrega en línea de alimentos saludables, entre otras respuestas | Actividad física reducida y aumento de la tensión sobre la salud mental podría dar lugar a un mayor consumo de alimentos poco saludables y al uso nocivo de tabaco y alcohol |
| Miembros de la familia en el hogar | Brindar arreglos especiales para que las familias con pacientes con ENT se autoaíslen | Riesgo de mayor contacto con los miembros más jóvenes de la familia en el hogar |
| Acceso inadecuado a medicamentos | Use más la telemedicina, permita que los médicos y farmacéuticos locales o comunitarios renueven o extiendan las recetas de medicamentos, entregue los medicamentos esenciales para las ENT a su hogar. | Escasez de medicamentos esenciales como la insulina y otros medicamentos específicos para las ENT. |
| Transporte y otros servicios restringidos | Priorizar y garantizar servicios continuos a nivel comunitario de manera segura para atender las necesidades de los pacientes con ENT. | Instalaciones de transporte restringidas y apoyo familiar para la atención continua de ENT. |
| Control de Infecciones | ||
| Detección temprana y pruebas de laboratorio | Priorizar a los pacientes con ENT para la prueba COVID-19; el triaje debe tener en cuenta si los pacientes tienen ENT y están inmunocomprometidos. | Aquellos pacientes con ENT para quienes las visitas a los centros de salud son esenciales podrían tener un mayor riesgo de exponerse a COVID-19. |
| Rastreo de contactos | Céntrese especialmente en aquellos con factores de riesgo aumentados para ENT y pacientes con ENT (es decir, pacientes que viven con obesidad) y alerta y sigue de cerca cualquier posible contacto para pacientes con ENT. | Los pacientes con ENT pueden desconocer los riesgos adicionales que representan para ellos. |
| Pruebas exhaustivas | Priorice a los pacientes con ENT para que se realicen las pruebas cuando sea posible. | Promueva la necesidad de realizar pruebas a los pacientes con ENT que podrían estar menos motivados o ser capaces de buscar pruebas activamente (de una manera segura y físicamente distanciada). |
| Entornos de atención médica (control de infecciones) | Proporcionar a los pacientes con ENT y al personal de atención médica que trabaja en los servicios de ENT capacitación especial y equipo de protección personal, así como a profesionales de la salud con mayor riesgo de ENT. | Los pacientes con ENT con comorbilidades tienen un mayor riesgo de infección ; El personal sanitario que trabaja en las clínicas de ENT también tiene un mayor riesgo de infección. |
Los pacientes que viven con obesidad y ENT corren un mayor riesgo de los efectos de emergencias en la salud, tales como COVID-19.16. El personal de salud de ENT y los trabajadores y voluntarios asociados deben participar de manera central en la planificación de las estrategias de respuesta de COVID-19 para garantizar que las necesidades de pacientes y cuidadores sean abordadas.
Se debe proporcionar asesoramiento específico a nivel nacional y local para pacientes que viven con ENT, sus familias y sus cuidadores. La prevención y el control de la obesidad y las ENT son cruciales en la preparación para esta y futuras amenazas a la salud pública. Una respuesta simplificada a COVID-19 en el contexto de las ENT es importante para optimizar los resultados de salud pública y reducir los impactos de esta pandemia en las personas, los grupos vulnerables, los trabajadores clave y la sociedad.
Acerca de los autores: HHPK es Director Regional de la Oficina Regional de la OMS para Europa. JB es el Jefe de la Oficina Europea de la OMS para la Prevención y Control de Enfermedades No Transmisibles. KW es un oficial técnico y HLR y RM son consultores en la Oficina Europea de Prevención y Control de Enfermedades No Transmisibles de la OMS. AK es el Director Adjunto del Centro Nacional de Investigación Médica para Terapia y Medicina Preventiva, Rusia. No declaramos otros intereses en competencia. Solo los autores son responsables de las opiniones expresadas en este Comentario y no representan necesariamente las opiniones, decisiones o políticas de las instituciones a las que están afiliados.