Los resultados no respaldan su uso

Plasma rico en plaquetas en el tratamiento de la tendinopatía de Aquiles

Los hallazgos no respaldaron la utilidad de la inyección de PRP para la tendinopatía de Aquiles no tratada quirúrgicamente.

La eficacia de la terapia de inyección de plasma rico en plaquetas en el tratamiento de pacientes con tendinopatía de Aquiles: una revisión sistemática y metanálisis

Antecedentes:

En los últimos años, se han realizado muchos estudios para evaluar la eficacia del plasma rico en plaquetas (PRP) en el tratamiento de afecciones musculoesqueléticas. Sin embargo, existe controversia sobre sus beneficios para los pacientes con tendinopatía de Aquiles.

Objetivos:

Este estudio tuvo como objetivo investigar si las inyecciones de plasma rico en plaquetas pueden mejorar los resultados en pacientes con tendinopatía de Aquiles.

Métodos:

Se realizó una búsqueda bibliográfica exhaustiva en las bases de datos PubMed, Embase, Cochrane Library, Web of Science, China Biomedical CD-ROM y Chinese Science and Technology Journal para identificar ensayos clínicos controlados aleatorios que compararan la eficacia de la inyección de PRP en pacientes con tendinopatía de Aquiles (AT) versus placebo, publicado entre el 1 de enero de 1966 y el 1 de diciembre de 2022.

Se utilizó el software Review Manager 5.4.1 para el análisis estadístico y se utilizó la puntuación de Jadad para evaluar la bibliografía incluida. Solo 8 de los 288 artículos encontrados cumplieron los criterios de inclusión.

Resultados:

Nuestro trabajo sugiere que:

El grupo de tratamiento con PRP tuvo una puntuación VISA-A ligeramente más alta que el grupo de placebo a las 6 semanas [DM = 1,92, IC del 95 % (-0,54, 4,38), I2 = 34 %], a las 12 semanas [DM = 0,20, IC del 95 % (-2,65 3,05), I2 = 60 %] y 24 semanas [DM = 2,75, IC del 95 % (-2,76, 8,26), I2 = 87 %]). Sin embargo, la diferencia no fue estadísticamente significativa.

El grosor del tendón de Aquiles fue mayor a las 12 semanas de tratamiento en el grupo de tratamiento con PRP en comparación con el grupo de control [DM = 0,34, IC del 95 % (-0,04, 0,71), p = 0,08], pero la diferencia no fue estadísticamente significativa.

Los resultados de mejora de la EVA no mostraron diferencias significativas a las 6 y 24 semanas entre los dos grupos, respectivamente (DM = 6,75, IC del 95 % = (-6,12, 19,62), I2 = 69 %, p = 0,30), y (DM = 10,46, IC 95 % = (-2,44 a 23,37), I2 = 69 %, p = 0,11).

Sin embargo, a las 12 semanas de tratamiento, el grupo de inyección de PRP mostró una mejora sustancial de la EVA en comparación con el grupo de control (DM = 11,30, IC del 95 % = (7,33 a 15,27), I2 = 0 %, p < 0,00001). La diferencia fue estadísticamente significativa.

Los resultados de la tasa de retorno al ejercicio mostraron una mayor tasa de retorno al ejercicio en el grupo de tratamiento con PRP que en el grupo de placebo [RR = 1,11, IC del 95 % (0,87, 1,42), p = 0,40]; la diferencia no fue estadísticamente significativa.

Conclusión:

No hay pruebas de que las inyecciones de PRP puedan mejorar los resultados funcionales y clínicos del paciente para la tendinopatía de Aquiles.

Aumentar la frecuencia de las inyecciones de PRP puede mejorar los resultados y, además, se necesitan diseños más rigurosos y ensayos controlados aleatorios clínicos estandarizados para producir resultados más confiables y precisos.

Mensaje final:

Nuestro estudio muestra evidencia moderada de que la inyección de RPP no mejoró significativamente los puntajes de VISA-A, la satisfacción del paciente o las tasas de regreso a los deportes, y los resultados de mejora de VAS no mostraron diferencias significativas a las 6 y 24 semanas entre los dos grupos.

Sin embargo, el grosor del tendón de Aquiles fue mayor en el grupo tratado con PRP que en el grupo placebo a las 12 semanas de tratamiento; la diferencia no fue estadísticamente significativa.

Por otro lado, a las 12 semanas de tratamiento, el grupo de inyección de PRP mostró una mejora sustancial de la EVA en comparación con el grupo de control, y la diferencia fue estadísticamente significativa.

Nuestros hallazgos no respaldaron la utilidad de la inyección de PRP para la tendinopatía de Aquiles no tratada quirúrgicamente.

Es evidente que nuestro estudio no llegó a un consenso con investigaciones previas; por lo tanto, alentamos a los investigadores y médicos ortopédicos a estar atentos a los temas. Se necesitan diseños más rigurosos y métodos estandarizados para producir resultados más confiables y precisos.