Métodos:

Este estudio fue diseñado para examinar los efectos a corto plazo de una dieta y ejercicio riguroso sobre la presión arterial, hiperinsulinemia, y biodisponibilidad de óxido nítrico. Once hombres fueron puestos en una dieta pobre en grasas y rica en fibras, combinada con ejercicio diario durante 45-60 minutos por 3 semanas. Se obtuvieron muestras de sangre pre y post ayuno para determinación de lípidos, insulina, 8-isoprostaglandina F2-alpha y glucemia. Se midieron parámetros antropomórficos, presión arterial, y metabolitos del óxido nítrico (NOx) en orina.

Resultados:

 El ejercicio y la dieta produjeron disminución de la presión arterial sistólica (p<0,01), diastólica (p<0,01) 8-isoprostaglandina F2-alpha (p<0,05), mientras que el NOx urinario aumentó (p<0,05).

Se observó una reducción significativa de la insulina en ayuna (p<0,01), así como de la correlación entre la disminución de la insulina sérica y el aumento del NOx urinario (p<0,05). Todas las determinaciones de lípidos en ayunas se redujeron en forma significativa, y mejoró el índice colesterol total/HDL.

Si bien, el peso corporal y el índice de masa corporal disminuyeron en forma significativa, la obesidad persistió y estos cambios no estuvieron correlacionados con los parámetros medidos.

En conclusión, el ejercicio y la dieta resultaron en una mejoría dramática de la presión arterial, estrés oxidativo, y biodisponibilidad de óxido nítrico, lo que indica el beneficio que tienen estos cambios de hábito en la prevención de arteriosclerosis.

Comentario del Editor:

Este trabajo demuestra una vez más los beneficios de una buena calidad de vida, expresados aquí a través de la actividad física y la dieta. Los resultados enfatizan el concepto de que los médicos deben insistir intensamente en sus pacientes sobre estos aspectos y que antes de iniciar un tratamiento hipotensor o hipocolesterolémico, con incremento del gasto económico, hay que dar un plazo prudencial para evaluar los resultados que pueden ofrecer la dieta y el ejercicio. Se manifiesta aquí también, que a nivel molecular el ejercicio mejora la función endotelial, expresada por un aumento de la producción de óxido nítrico.

Artículo comentado por el Dr. Ricardo Ferreira, editor responsable de IntraMed en la especialidad de Cardiología.