Varios estudios han evaluado los efectos profilácticos de soluciones oftálmicas no esteroides para tratar el edema macular cistoideo (EMC) después de cirugía de cataratas. En ellos se utilizó oftalmoscopía y angiografía fluoresceínica para detectar EMC. Sin embargo, no se han publicado estudios sobre el efecto profiláctico de la solución oftálmica de bromfenac para tratar EMC e inflamación después de la cirugía de cataratas en pacientes con diabetes, sin soluciones oftálmicas esteroides administradas al mismo tiempo. La tomografía de coherencia óptica (TCO) sirve para cuantificar el edema macular en una etapa incipiente, lo que resultaba imposible con los métodos anteriores. En el presente estudio se utilizó TCO-3 para comparar el efecto profiláctico de la solución oftálmica de bromfenac con el de solución de esteroides para tratar la inflamación y EMC después de cirugía de cataratas en pacientes con diabetes.
Pacientes y métodos:
Intervinieron 62 pacientes con diabetes (34 hombres y 28 mujeres, entre 37 y 84 años) sometidos a facoemulsificación con implante de LIO. Se les asignó aleatoriamente tratamiento con bromfenac (BF) o esteroides (E). Se midió el grosor perifoveal promedio (GPP) mediante TCO antes de la cirugía, al día siguiente, a la semana 1, 2, 4 y 6 postoperatorias. En cada consulta se registró la agudeza visual mejor corregida, presión intraocular y flare en la cámara anterior. Se utilizó el mismo método para comparar pacientes con retinopatía diabética no proliferativa (RDNP) en el grupo BF (n=16) y en el grupo E (n= 11).
Se han planteado varias hipótesis sobre la causa subyacente del EMC después de cirugía de cataratas. Una es que el trauma mecánico promueve la expresión de ciclooxigenasa, lo que origina la síntesis de varias prostaglandinas y otros mediadores inflamatorios y provoca el colapso de la barrera hemato-acuosa, acompañada por un incremento en la concentración de proteínas en la cámara anterior. Las sustancias que causan inflamación se acumulan en el humor acuoso y se dispersan en el vítreo, donde aumenta la permeabilidad de los vasos sanguíneos retinianos provocando EMC. Los AINE son eficaces como profilaxis para reducir la incidencia de EMC después de cataratas. Bromfenac, es un AINE e inhibe eficazmente la actividad COX en la cascada araquidónica.
La epiteliopatía corneal es un efecto adverso de los AINE tópicos. Sin embargo, los efectos colaterales primarios de los corticosteroides tópicos incluyen: infecciones de córnea, glaucoma inducido por esteroides, demoras en la cicatrización. En el presente estudio, no hubo efectos adversos en el grupo BF –aun en pacientes con diabetes, que se consideran más susceptibles a desarrollar epiteliopatía- esto indica que bromfenac es una droga relativamente segura. La PIO no aumentó en ningún paciente del grupo E, aunque los esteroides suelen incrementar la PIO en 40% de los pacientes que reciben un tratamiento oftalmológico de 4-6 semanas. Debido a que los pacientes deben continuar aplicándose las gotas oftálmicas durante varios meses después de la cirugía, el uso de bromfenac es más recomendable.
En el presente estudio, no hubo diferencias quirúrgicas entre ambos grupos en cuanto al flare de la cámara anterior (indicador de inflamación) en el primer día postoperatorio. En el grupo BF se observó una reducción significativa desde la semana 1. En la semana 1, se reemplazó la betametasona por fluorometolona 0,2% para evitar efectos adversos. No obstante, bromfenac se considera más efectivo que 0,1% de fluorometolona para contrarrestar la inflamación de la cámara anterior en el postoperatorio. Además, en el grupo BF, no se observaron diferencias significativas en los valores postoperatorios del flare en el grupo con retinopatía diabética no proliferativa y el grupo sin RD. Se considera que bromfenac tiene una eficacia anti-inflamatoria suficiente en pacientes con diabetes y con retinopatía diabética no proliferativa.
El grosor foveal en el presente estudio fue similar al informado en la literatura. En el grupo BF con RDNP fue de 222,9±46,0 µm en la semana 2 y 211,1±19,4 µm en la 4. Sin embargo, la agudeza visual postoperatoria también fue estable. La TCO podría ser un método más sensible para detectar el EMC postoperatorio. Los cambios en la agudeza visual parecen ser menos importantes que los del grosor retiniano. Dos pacientes en el grupo E con RDNP tuvieron degeneración cistoide según la TCO en las semanas 1 y 2 respectivamente. Los valores postoperatorios de agudeza visual en ambos pacientes fueron de -0,1 LogMAR en la semana 1 y 0,1 LogMAR en la semana 6.
En el grupo BF ningún paciente presentó marcado engrosamiento acompañado de degeneración cistoide. El presente estudio indicaría que la aplicación postoperatoria de gotas esteroides únicamente puede no ser suficiente para prevenir el incremento del grosor foveal después de cirugía de cataratas en pacientes con RDNP. En la evaluación cuantitativa del edema retiniano utilizando TCO-3, bromfenac fue efectivo como profilaxis contra EMC en pacientes con RDNP.
Probablemente Bromfenac fue más efectivo en pacientes con RDNP, en parte por los distintos mecanismos de acción de los AINE y los esteroides. Los AINE inhiben COX-2 en la cascada araquidónica, mientras que los esteroides inhiben COX-2 y lipoxigenasa al inhibir la fosfolipasa A2. Los resultados del presente estudio serán evaluados en mayor profundidad con relación al inicio de la RD, para clarificar la patología subyacente.
En el presente estudio, bromfenac fue considerado seguro debido a la ausencia de efectos colaterales en los pacientes con RDNP. Bromfenac contiene la inflamación de la cámara anterior luego de cirugía de cataratas y es significativamente más efectivo en prevenir el engrosamiento retiniano en las semanas postoperatorias 4 y 6 que la fluorometolona 0,1% en pacientes con RDNP. En virtud del tamaño reducido de la muestra del presente estudio, es necesario seguir investigando para confirmar la eficacia de bromfenac después de cirugía de cataratas.
Conclusiones:
Bromfenac contiene la inflamación de la cámara anterior y el engrosamiento retiniano después de cirugía de cataratas en pacientes con retinopatía diabética no proliferativa.
♦ Síntesis y traducción: Dr. Martín Mocorrea, Médico oftalmólogo
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