Introducción y objetivos
El uso excesivo de alcohol, el consumo de tabaco y de marihuana son factores de riesgo comunes para los trastornos mentales y las dolencias físicas crónicas en adolescentes y adultos jóvenes. Se ha sugerido que el involucramiento en actividades sexuales y la ruptura de los vínculos sentimentales se asocian con el abuso de sustancias en adolescentes y adultos jóvenes, pero el mecanismo causal detrás de esta asociación permanece poco comprendido.
Algunas pruebas sugieren que los mismos factores biopsicosociales subyacen tanto en las tendencias para involucrarse en relaciones sentimentales como en el abuso de sustancias. Se ha observado, por ejemplo, que las actividades sexuales en las relaciones sentimentales generan sensaciones de placer y recompensa a través de las mismas vías nerviosas que el uso de drogas.
El incremento hormonal y otros factores fisiológicos de la pubertad inducen un aumento del interés por las relaciones sentimentales y un incremento de las motivaciones sexuales; se estima que los mismos factores inducen también las conductas de riesgo, incluido el abuso de drogas.
En este estudio se analizó la asociación entre los ideales de relaciones sentimentales (tomados como variable indirecta de la motivación) y el riesgo de abuso de alcohol, tabaco y marihuana en personas de ambos sexos, desde la etapa de adolescentes hasta la de adultos jóvenes.
Pacientes y métodos
El estudio utilizó los registros de la base de datos Add Health (National Longitudinal Study of Adolescent Health), un estudio poblacional y longitudinal sobre una población representativa de adolescentes, incorporados entre 1994 y 1995, y seguidos hasta 2008.
Con una metodología combinada de cuestionarios autoadministrados y entrevistas a los adolescentes y a sus padres, se recolectó información social, psicológica y de salud, incluidos los datos demográficos, los comportamientos de riesgo, los problemas de salud y la composición familiar. La base de datos completa comprendió 15 170 participantes. Se liberó para uso público una parte de ésta (4 882 participantes), obtenida por medio de una selección al azar. Este conjunto de datos fue el utilizado en el presente estudio.
La percepción de una relación sentimental “ideal” fue evaluada mediante 17 tarjetas con opciones de respuestas, que los participantes podían elegir o rechazar libremente, según estuvieran de acuerdo o no con lo propuesto en cada tarjeta.
Se utilizaron métodos de regresión logística múltiple escalonada y de regresión de Poisson con estimación de la varianza para determinar el grado de asociación entre los factores de riesgo analizados (incluido el efecto de potenciales de confusión) y la presencia de abuso de alcohol, tabaco y marihuana.
Resultados
El 46% de los datos provino de varones y el 54%, de mujeres. La media de edad de los varones fue de 16.0 y 22.4 años (al momento de la incorporación y en el último registro de la base de datos, respectivamente). Para las mujeres, la media de edad estuvo en los 15.9 y 22.2 años, respectivamente.
Respecto del consumo de marihuana, el 78% de los varones y el 77% de las mujeres dieron información completa. Cuatro opciones de respuesta en los varones y 2 en las mujeres se asociaron positivamente con el consumo de la droga.
De los participantes que informaron haber consumido alcohol en los últimos 12 meses, el 79% de los varones y el 80% de las mujeres completaron la información requerida. Tres opciones de respuesta en los varones y 2 en las mujeres fueron predictivas de alto consumo de alcohol.
En lo que respecta al consumo de tabaco, el 76% de los varones y el 78% de las mujeres completaron el cuestionario. Tres opciones de respuesta en los varones y 2 en las mujeres predijeron el consumo habitual de tabaco.
Para las tres sustancias, la menor cantidad de parejas sexuales se asoció con menor probabilidad de consumo.
Discusión y conclusión
El hallazgo de la asociación entre un mayor número de parejas sexuales y un mayor consumo de alcohol, tabaco y marihuana es concordante con otros estudios previos sobre el tema, que sugieren que el involucramiento en actividades sexuales se asocia con el abuso de sustancias con capacidad de adicción. Esta asociación se mantuvo después de ajustar los resultados para la presencia de posibles variables de confusión.
Los hallazgos también sugieren que los adolescentes y adultos jóvenes que incluyen las actividades sexuales en sus “ideales” de relación sentimental tienen un riesgo significativamente mayor de presentar conductas de abuso de sustancias.
Desde una perspectiva fisiológica, se ha sugerido que tanto la actividad sexual como el consumo de drogas son conductas que persiguen una recompensa, y que las sensaciones placenteras asociadas con ambas se generan por las mismas vías nerviosas.
Además, un número de componentes de una relación sentimental “ideal” mostraron ser protectores del abuso de alcohol, marihuana o tabaco en los individuos que los eligieron como opción. Estos incluyeron el recibir regalos de la pareja, la declaración de los sentimientos y el proyecto de matrimonio para los varones, y el dar regalos a la pareja y la perspectiva de embarazo para las mujeres.
Estas preferencias pueden indicar que la intimidad y el compromiso alcanzado en una relación sentimental pueden ser protectores de conductas de riesgo, especialmente del abuso de sustancias.
SIIC - Sociedad Iberoamericana de Información Científica