En los últimos años, las inyecciones intravítreo se han vuelto una práctica cada vez más común en oftalmología. Hay diversas medicaciones que se administran de esta forma como agentes anti factor de crecimiento endotelial vascular ((FCEV), esteroides y fragmentos de proteína enzimática. Estas inyecciones son en general seguras y bien toleradas. Sin embargo, la complicación más grave de este procedimiento es la endoftalmitis, aunque su incidencia es muy baja, las consecuencias pueden ser gravísimas, ya que algunos pacientes pueden llegar a perder la visión de forma permanente.
Por lo tanto es muy importante la esterilización del ojo, para esto el procedimiento general es la preparación de la superficie ocular con povidona iodada tópica 5%. Existen controversias acerca de la necesidad de utilizar antibióticos tópicos antes y después de la inyección intravítreo. Hasta el momento, ninguna investigación ha probado que el uso de antibióticos reduzca la incidencia de endoftalmitis y si podría incrementarse la resistencia a los antibióticos por parte de la flora conjuntival, pudiendo también afectar la flora nasofaríngea. Asimismo, al aumentar la proporción de bacterias resistentes en la superficie ocular, se corre el riesgo de que se desarrollen infecciones más difíciles de tratar. En el presente estudio intentamos determinar si el uso únicamente de povidona tópica, sin agregar antibióticos tópicos antes ni después de la inyección, afecta los patrones de resistencia o altera la flora conjuntival de línea de base.
Pacientes y métodos:
Participaron 13 pacientes de un mismo centro oftalmológico de Pennsylvania, sometidos a inyecciones intravítreo de agente anti FCEV, para tratar DMAE exudativa o edema macular por trombosis de vena retiniana. Se realizaron cultivos del ojo a tratar antes de la inyección y al menos tres veces, una vez al mes durante el trascurso del estudio. La preparación de la superficie ocular consistió en anestesia tópica y povidona iodada tópica 5%. Durante la investigación se analizaron los patrones de crecimiento de la flora conjuntival y los patrones de resistencia a los antibióticos más comunes.
Es fundamental minimizar las complicaciones de las inyecciones intravítreo que están siendo cada vez más utilizadas. Aunque el uso de antibióticos perioperatorios pareciera servir para reducir el riesgo de infección, las pruebas existentes no avalan su uso. La Red de investigación clínica para la retinopatía diabética, informó un solo caso de endoftalmitis en 3333 inyecciones sin utilizar antibióticos y 6 casos de endoftalmitis en 4694 inyecciones en pacientes que recibieron antibióticos tópicos como profilaxis. Otro estudio obtuvo los mismos resultados con el uso de antibióticos post-inyección. En el presente estudio de 13 pacientes que recibieron povidona iodada en el momento de la inyección intravítreo y ningún tipo de antibióticos, no hubo pruebas de aumento de la resistencia a ninguno de los antibióticos estudiados, incluyendo azitromicina y fluoroquinolonas, en 25 cultivos comparados con las muestras tomadas en línea de base. A pesar de que existe la creencia ampliamente difundida de que la povidona iodada no provoca resistencia a los antibióticos, existen escasas investigaciones que avalan esta teoría.
Al disminuir la flora conjuntival existente con povidona iodada, es probable que cepas bacterianas que se dividen más rápido o cepas más virulentas pudieran reemplazar a otras menos virulentas o de crecimiento más lento. En el presente estudio, no observamos ninguna alteración aparente en la flora conjuntival de línea de base con respecto a la misma flora después de reiteradas inyecciones intravítreo utilizando povidona iodada únicamente como profilaxis. Las bacterias más comúnmente aisladas fueron estafilococos coagulasa negativos.
Sensibilidad de Staphylococcus coagulasa negativo en línea de base
Sensibilidad de Staphylococcus coagulasa negativo durante el seguimiento (n=25)
La comparación de la sensibilidad de Staphylococcus coagulasa negativo a los distintos antibióticos no muestra diferencia entre línea de base y el seguimiento luego de varias inyecciones intravítreo de agente anti FCEV.
No se realizó análisis de genotipo de bacteria. En la conjuntiva de cualquier persona, hay múltiples cepas del mismo organismo que pueden tener distintos patrones de resistencia. También es posible que luego de meses o años de tratamiento se altere la flora conjuntival y/o la sensibilidad bacteriana, lo que no puede detectarse a corto plazo. Asimismo, también son pocos los pacientes que intervinieron en la investigación. Sin embargo, se siguió a cada paciente durante varios meses y se obtuvieron varios cultivos luego de múltiples aplicaciones de inyección intravítreo. Además, un estudio similar con menos pacientes todavía, demostró el comienzo de resistencia a antibióticos luego de un corto plazo después de inyección intravítreo con antibióticos tópicos.
La presente investigación determinó que el uso de povidona iodada 5% tópica, sin antibióticos post-inyección intravítreo, no afecta la flora conjuntival ni promueve el desarrollo de resistencia a los antibióticos. Sobre la base de este y otros estudios anteriores, el uso de povidona iodada únicamente al momento de la inyección intravítreo, sin agregar antibióticos tópicos, parece presentar menos riesgo de contribuir al problema cada vez mayor de la resistencia a los antibióticos.
Conclusiones:
La preparación de la superficie ocular para inyección intravítreo utilizando povidona iodada 5% únicamente, sin antibióticos tópicos, pareciera no provocar resistencia bacteriana o alteraciones discernibles en la flora conjuntival.
• Síntesis y traducción: Dr. Martín Mocorrea, editor responsable de Intramed en la especialidad de oftalmología.