Introducción
El trastorno bipolar (TB) es una enfermedad episódica de por vida heterogénea y genéticamente compleja con estimaciones de prevalencia en el rango de 1-4 % y curso clínico variable. El TB se asocia con mortalidad prematura, siendo las causas más comunes la enfermedad cardiovascular (ECV) y el suicidio. Además, los pacientes con TB se ven significativamente más afectados que la población general por la obesidad y sus complicaciones, como la diabetes tipo 2 (T2DM), las enfermedades cardiovasculares y el síndrome metabólico. De hecho, la prevalencia del síndrome metabólico en pacientes con TB puede duplicarse en comparación con la de la población general.
La resistencia a la insulina (RI) juega un papel vital en la patogenia de la DM2, el síndrome metabólico y las ECV. En la etapa temprana de la RI, se presenta hipersecreción de insulina con normoglucemia; sin embargo, con el tiempo, se agota la capacidad de aumentar la secreción de insulina del páncreas. En última instancia, la RI representa un estado metabólico en el que los órganos periféricos resisten el efecto biológico de la acción de la insulina. El método “estándar de oro” para medir la RI es el pinzamiento euglucémico-hiperinsulinémico, sin embargo, dada la complejidad de dicho procedimiento, se limita su uso clínico de rutina, Las medidas alternativas basadas en los niveles de glucosa e insulina en ayunas o después de una prueba de tolerancia oral a la glucosa de 2 horas se utilizan ampliamente en entornos clínicos y de investigación.
Un metanálisis reciente reveló que el 22,4 % de las personas con TB tenían valores de corte altos de glucosa plasmática en ayunas (FPG) [FPG ≥ 100 mg/dL (FPG ≥ 100)] (95 % IC, 16,7–28,7 %); diagnóstico de alteración de la glucosa en ayunas y sugestivo de resistencia a la insulina (RI). Además, reveló para las personas con TB un riesgo casi 1,6 veces mayor de desarrollar DM2 y un riesgo de obesidad igualmente alto (RR = 1,67, IC del 95 %: 1,32–2,12, p < 0,001).
Curiosamente, la RI se ha identificado en pacientes con TB recién diagnosticados, pero no en sus familiares de primer grado no afectados ni en comparación con controles emparejados sin TB. Además, las personas con TB y RI tienen más probabilidades de desarrollar peores resultados clínicos con un curso más prolongado que los pacientes con TB euglucémicos. Por ejemplo, presentan ciclos más rápidos y tienen una peor respuesta al litio y los estabilizadores del estado de ánimo. Una revisión sistemática reciente proporcionó evidencia cualitativa de que el metabolismo alterado de la glucosa (IGM) podría considerarse un factor de riesgo para peores resultados en el TB, incluido un curso crónico de la enfermedad, peor funcionamiento global y ciclos rápidos. Sin embargo, dada la gran heterogeneidad entre los estudios, aún no se dispone de una medida cuantitativa de la magnitud del efecto de la RI en los resultados clínicos en el TB.
A pesar de la prevalencia de la RI y sus consecuencias cardiometabólicas, hasta donde sabemos, solo unos pocos estudios han intentado evaluar el grado de RI en sujetos con TB o sus efectos en el curso clínico. Además, existe evidencia escasa y mixta sobre la interacción clínica entre el TB y la RI. Por lo tanto, la siguiente revisión sistemática tiene como objetivo proporcionar información sobre los hallazgos más actuales sobre los correlatos clínicos de RI en el TB, incluido su impacto en los hallazgos de neuroimagen, los dominios cognitivos, el curso de la enfermedad y la respuesta al tratamiento. Una comprensión integral de la RI en el TB puede ayudar a refinar los modelos fisiopatológicos del TB. Además, puede fomentar intervenciones individualizadas destinadas a tratar anomalías tanto metabólicas como psiquiátricas.
Antecedentes
Aunque la resistencia a la insulina (RI) y el síndrome cardiometabólico son prevalentes en pacientes con trastorno bipolar (TB), solo unos pocos estudios han intentado evaluar con precisión el grado y el impacto clínico de la RI en el TB.
Métodos
Se realizó una búsqueda exhaustiva en múltiples bases de datos de investigación hasta mayo de 2022, siguiendo un protocolo predefinido (PROSPERO: CRD42022359259). Extrajimos los hallazgos de neuroimagen, cognición, curso de la enfermedad y respuesta al tratamiento de individuos con BD con evidencia de RI en comparación con individuos euglucémicos con BD.
Resultados
De 1436 artículos identificados, se incluyeron 10 informes que cumplían con los criterios de inclusión (n = 1183).
Los pacientes con trastorno bipolar (TB) con resistencia a la insulina (RI) mostraron peores puntajes compuestos de memoria verbal y peor función ejecutiva y exhibieron volúmenes hipocampales más pequeños junto con alteraciones neuroquímicas prefrontales en comparación con los pacientes con BD euglucémicos.
El metanálisis de efectos fijos reveló que los pacientes con TB con alteración del metabolismo de la glucosa (IGM) tenían más probabilidades de desarrollar un ciclo rápido y crónico en comparación con los pacientes con BD euglucémicos (k = 2, OR = 2,96, IC del 95 % 1,69–5,17, OR=2,88, IC del 95 %: 1,59–5,21, p<0,001, respectivamente), con una tendencia a puntuaciones significativamente más bajas de la Evaluación global del funcionamiento (k=5, MD=−4, IC del 95 % −8,23–0,23, p=0,06 ).
Los pacientes con TB con alteración del metabolismo de la glucosa (IGM) mostraron una tasa más alta de respuesta deficiente a los estabilizadores del estado de ánimo en comparación con los pacientes con BD euglucémicos (k = 2, OR = 6,74, IC del 95 %: 1,04–43,54, p = 0,04).
Limitaciones
El diseño transversal y los tamaños de muestra pequeños de los estudios incluidos limitan la generalización de los resultados.
Conclusión La resistencia a la insulina (RI) se asocia con peores resultados clínicos en el trastorno bipolar (TB) y respuesta inadecuada al tratamiento. La implementación de estrategias para prevenir y tratar la RI en el TB es crucial para mejorar el pronóstico de una población tan difícil de tratar. |