El Departamento de Cirugía Ortopédica del Lund University Hospital, en Suecia ha publicado los resultados de un estudio a largo plazo en pacientes a los que se practicó meniscectomía, un procedimiento quirúrgico asociado con un elevado riesgo de osteoartritis de rodilla, con el fin de comparar la rotura de menisco traumática con la rotura degenerativa, y la meniscectomía total con la parcial.

M. Englund, autor de este estudio, publica que se llevó a cabo el seguimiento durante catorce años, en más de doscientos pacientes con meniscectomía, sin que se les hubiera realizado anteriormente cirugía de rodilla. El seguimiento, según indican sus autores se realizó mediante un cuestionario genérico (Short Form 36), y uno específico para la enfermedad (Knee Injury and Osteoarthritis Outcome Score).

Los resultados recogen que los pacientes con rotura degenerativa presentaban puntuaciones relativas a su funcionalidad y calidad de vida, significativamente peores que los individuos con rotura traumática. Y estos mismos resultados aparecían cuando el equipo investigador analizaba las consecuencias específicas para la rodilla, en otros pacientes equivalentes en sexo y edad, y con lesiones traumáticas o degenerativas.

No había diferencias en los resultados dependiendo del tipo de resección, sin embargo, los autores indican que los pacientes que experimentaron meniscectomia subtotal para una rotura degenerativa, puntuaban significativamente peor en los resultados específicos de rodilla que los pacientes con meniscectomía parcial para el mismo tipo de rotura.

Como conclusión a este estudio, Englund y colaboradores consideran que los resultados a largo plazo en la cirugía de menisco, parece depender en gran medida del tipo de rotura de menisco. Además, según afirman, estos resultados apoyan la práctica de una resección mínima del menisco en el tratamiento de roturas degenerativas.

Los autores sugieren que el proceso de la enfermedad asociado con el desarrollo de osteoartritis en el cartílago de la articulación, puede también ser activo en el menisco, y una rotura en el menisco con cambios degenerativos, puede considerarse el primer signo de osteoartritis de la articulación.