Sedentarismo y Lumbalgia

El sedentarismo en la infancia y adolescencia favorece el dolor de espalda

El sedentarismo es uno de los factores que contribuye a que aparezca dolor de espalda en los escolares. Así lo aseguraron en rueda de prensa el Dr. Francisco Manuel Kovacs, presidente de la Fundación Kovacs, y Margarita Martín, directora de la Unidad de la Espalda Kovacs de Madrid. El escaso ejercicio físico, unido a la mala higiene postural y el excesivo peso, son los principales causantes de que más de la mitad de los adolescentes españoles haya sufrido esta dolencia alguna vez.

Concretamente, entre los 13 y los 15 años han tenido dolor de espalda el 50,9% de los chicos y el 69,3% de las chicas. Según el Dr. Kovacs, es una edad en la que se produce un punto de inflexión -a los diez años sólo ha tenido esta molestia el 6%- debido a los cambios en la musculatura y a la repetición de malos hábitos a lo largo del tiempo.

La importancia del ejercicio se ve en que las chicas -y las mujeres en general- son más propensas a sufrir este trastorno porque por naturaleza tienen menos musculatura que los varones. Según este experto, está demostrado que a las seis semanas de haber practicado algún deporte de manera regular, mejora el tono muscular de los escolares y que a los cuatro meses la musculatura ha aumentado.

El sedentarismo no es el único factor que contribuye a la mala salud de la espalda. La mala higiene postural, favorecida además por el mobiliario inadecuado y el excesivo peso del material escolar son otros dos importantes perjuicios.

El Dr. Kovacs recordó que lo ideal es que el peso que transporta el niño no sea superior al 10% suyo propio, algo que está demostrado que no se cumple. En su opinión, esto podría evitarse si los libros se dividieran en fascículos trimestrales. Sin embargo, dado que esto no es así, de momento, se debe cargar el material adecuadamente.

Así, explicó que lo mejor es que los niños lleven mochilas con ruedas o en su defecto, con tirantes anchos que se lleven a la espalda sobre ambos hombros y colgada en la parte baja de la espalda, nunca entre los omoplatos.

En cualquier caso, este experto hizo un llamamiento a los padres para que si a sus hijos les duele la espalda, acudan al médico ya que puede ser un síntoma de enfermedad sistémica. Subrayó que aunque la probabilidad de que el niño tenga una enfermedad grave es baja, el porcentaje de que un dolor de espalda sea un síntoma es mucho mayor que en las personas de más edad.

Finalmente, apeló a perder el miedo a la actividad en el caso de que aparezca el dolor. "El mensaje que hay que dar al niño es haz lo que quieras, pero hazlo bien", dijo. La Dra. Margarita Martín recordó además otras pautas a seguir para completar una buena salud de la espalda como sentarse correctamente -lo más atrás posible en la silla y apoyando los codos en la mesa-; estudiar con un atril; tener el ordenador a la altura de los ojos; cambiar la postura con frecuencia; levantarse cada 45 o 60 minutos y estirar los músculos antes y después de hacer ejercicio.

Webs Relacionadas
Fundación Kovacs
http://www.kovacs.org/